—Pelotudito, vos no vas a ir disfrazado de pollo a tu cita — Bufó frustrado el azabache observando al hibrido menor — Aww, ¿Por? — Chilló el oji- verde observando triste al oso —Es ridículo amigo, me vas a hacer pasar pena.
— Y que, no es como si mi vieja nos fuera a ver — El azabache suspiró — Pero si Robleis,idiota — Si bien, ya estaba totalmente arrepentido de haber aceptado ir con Carre, sus ocurrencias lo empeoraban — Andá, ya nos tenemos que ir.
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El inquietante sonido de las manecillas del reloj de mano de Robleis incomodaban un poco el ambiente, nadie decía nada, Carre simplemente evitaba cruzar la mirada con el castaño completamente sonrojado, al igual que Spreen con el de bandana por vergüenza de acompañar a Carrera.
¿Que van a pedir?— La mesera Mayichi cortó el inquietante momento, cosa que Juan agradecía profundamente — Un mate, por favor — Pidió el oso educadamente, prefería guardar el perfil bajo — Que sean dos — Complementó el oji-miel con una pequeña sonrisa.
— Dos órdenes de hot cakes con dulce de leche, porfavor — Indicó el castaño — En serio, ¿Van a comer hot cakes? — Cuestionó el de lentes extrañado, no era común cenar hot cakes — No tenemos hambre, esos van a ser para ustedes — Admitió el híbrido de gato levantándose de su asiento y ofreciéndole su mano a Robleis — Vamos a un lugar un poco más privado ¿si? — El antes mencionado tomó la mano del híbrido y salieron a la parte trasera del restaurante, dejando completamente solos a Juan y Spreen.
— Hijos de puta — Se quejó el oji-miel cubriéndose el rostro con ambas manos — No hay porque estresarse, bonito. . . . . . . . . . . . . . . -ju4n1t0
