"Konig" (+18 sin corregir)

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Subí al escenario, con los nervios primerizos de siempre. Pero con más confianza que la primera vez. El telón se abrió y yo estaba de pie en medio de la plataforma de madera vieja parchada que crujía con cada pisada. Mostré la mejor de mis sonrisas y comencé a presentar mi obra

- Una historia de mi completa autoría, de mi completa experiencia, solo mía y de aquel que habita en mis recuerdos y, muy pronto, en algún rincón de la mente de cada uno de ustedes. Gracias a su encantadora gente por recibirnos esta noche en tan encantadora ciudad. Espero que disfruten, buenas noches.- me incliné sobre estómago y la gente aplaudió. El telón se cerró, volvió a abrise, los actores tomaron posición sobre el escenario y la obra comenzó.》

Por aquellos tiempos yo tenía 23 años, siete años de ellos viviendo en la calle y actuando en obras que carecían de espectadores, pero nos encantaba. Lo hacíamos por vocación, por pura pasión. Un director de teatro nos descubrió y nos ayudó a llegar más lejos de lo pudimos imaginar nunca.
Un primero de noviembre, nos recibió un teatro bajo de la ciudad de París, no era mucho, pero era más de lo que acostumbrábamos.
La tragedia comenzó cuando se me ocurrió salir a fumar un cigarrillo, si en ese entonces no hubiera tenido ese destructivo hábito, no lo habría conocido. Haberlo hecho significó un despliegue enorme en mi carrera cuando lo perdí, años después, así que no me quejo. La parte que me molestó es todo lo que él se llevó consigo. Me dejó sin nada, pero con una historia que haría brillar mi futuro. Él me usó, así que no me molestó para nada usar su nombre para hacer dinero.

Así que esa noche luego de un ensayo salí a fumar un cigarrillo, la parte trasera del teatro daba tanto miedo como podía, no había luz y de vez en cuando pasaban personas sospechosamente encapuchadas.
Prendí el cigarrillo y solté el humo mirando hacia arriba, algo bueno del callejón de detrás del teatro y su ausencia de luz es que la luna y las estrellas se veían hermosas, podría pasar horas viéndolas.
Miré a mi costado y todo mi cuerpo se puso alerta y de punta.
Y ahí estaba él, el responsable de todo lo malo en mi vida, pero también el que la iluminó, es cierto que tapaba las estrellas que brillaban para mí cada noche, pero me enseñó a brillar en su lugar.
Lo único que podías percibir de él eran sus ojos azules, brillantes y característicamente cansados que tanto le favorecían.
Empujó mi cuerpo y cubrió mi boca, casi privandome de respirar correctamente. Se inclinó hacia mí, él era realmente alto, y pidió ayuda en un inglés muy malo.
Mi cuerpo simplemente estaba paralizado, no me atrevia a decir nada. Lentamente saco su mano, y mis ojos estaban tan grandes como la luna esa noche.
Miré al hombre con más detalle y noté que sostenía su costado, respiraba con irregularidad y tenía su mano apenas apoyada sobre un arma que estaba en el estuche de su cinturón.
Finalmente pestañe, mis ojos se habían secado, no sabía cuanto tiempo me le había quedado viendo como idiota. Tragué saliva con dificultad y la verdad no sentía que tenia tantas opciones.
Finalmente, luego de una eternidad donde el tiempo no avanzaba puse mi dedo índice sobre mis labios indicando que no haga ruido y tomé su mano para guiarlo adentro. Nos colamos por la parte trasera del escenario y lo llevé a un pequeño cuarto lleno de moho y suciedad, era horrible, pero sabía que nadie entraba ahí.

Nadie pareció notarnos, ni mi ausencia prolongada. Moví varias cajas e hice lugar en un pequeño banquito de madera, húmedo, para que se se siente.
Obviamente el banquito colapsó debajo de él y yo cubrí mi boca con ambas manos para ahogar mi risa.
El hombre alto y con capucha gruñó y se levantó con dificultad, totalmente cegado de enojo. Le hice una seña para que espere y me fui del pequeño espacio para buscar una silla más resistente y un botiquín.
Cuando volví entré con cautela, vi como se relajó, no del todo, si no hasta que cerré la puerta detrás de mí, acomodó la silla que le traje para sentarse.
Soltó otro gruñido, se quitó la chaqueta y levantó su remera, llevaba pantalones pesados con estampado militar y unas botas borcego que sd veían bastante calurosas.

[one shots] Call of Duty.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora