- Chicas bajen a almorzar algo!
-Gritó mi madre desde el comedor-- Ya vamos má! Corre, hoy hicieron unas deliciosas lasañas te van a encantar. -Cogí a mi amiga de la mano-
- Mmm me encanta ese olor.
-Dije emocionada para sentarme-- Si se ven súper ricas. -Continuó Anthonela-
- Así tal como las ves, es como saben, ya verás, son de Brooklyn.
- Ah, pensé que las habías hecho.
- No tuve tiempo hija, las compré antes del vuelo.
- Hola buenas, que tengan buen provecho. -Habló mi padre-
- Igual gracias señor Hugo.
- Eh pero que te he dicho de señor, no no ya sabes.
- Jaja lo siento tío Hugo.
- Muy bien Atho muy bien... Sabes ahora que te veo, estas grandísima mi niña que rápido pasa el tiempo.
- Si como ves, hace años que no te veía, Sofia los extrañaba mucho a todos.
- Lo sé, me imagino, pero ya estamos aquí; que es lo que importa.
- Si claro, ahora a disfrutar.
- Por supuesto.
- Eh hola, siento la demora, mmm delicioso, menos mal que valió la pena bajar. -Dijo Nic sentándose en la mesa-
- Jaja si está sabroso.
- Oh Anthonela no te vi, ¿Cómo estás, que tal todo?
- Todo bien Nic ¿Y tú?
- Que bueno, yo estoy bien igual, un poco atareado con las cosas del trabajo y eso pero nada que no se pueda solucionar.
- Así es, mente positiva.
- Si Nicolás siempre a sido un niño positivo y optimista; por eso todo le sale bien, nos hemos cansado ya de decirle lo orgullosos que estamos de él.
-Comenta mi madre antes de meterse otra cucharada en la boca-- Me alegro mucho. -Dije sonriendo-
- Ojalá y se encuentre a una jovencita igual que él, así de bueno.
- Mm si. -Dije sin más-
- Oye y Alexa ¿Dónde está?
- Ya sabes Nicolas, salió con unas amigas. -Respondió mi padre-
- Esa niña nunca está aquí con nosotros, nunca, ve que toda su familia está reunida nuevamente y no, se va por ahí a no sé, divertirse.
- Ya déjala hijo, es una adolescente, tú deberías entender eso. -Argumentó mi madre-
- ¿Te das cuenta que Sofia también es adolescente verdad? Bueno hasta yo, y no hacemos nada de eso. Lo único que yo entiendo es que deberían de ponerle más régimen a esa niña, no se alguna responsabilidad que se yo, pero no puede ser que malgaste todo su tiempo en tonterías. -Se levantó de un impulso de la mesa-
- ¿Hijo?
- Ya déjame. -Dió un tirón a la puerta de su habitación-
- Suspiró- No son fáciles estos muchachos de ahora.
- Nicolás se cierra madre, pero tiene toda la razón.
- Ya basta Sofia y termina ya. -Se levanta también de la mesa-
- ¿Tu madre es siempre así?
- ¿Así cómo?
- Defensora pero no de ti sino, de Alexa.
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"Nuestro Destino"
RandomEllos la amaban a pesar de todo...Ella era perfecta en los ojos de ellos.