By Bill
Esto parecía un sueño.
Después de que mi chico se fuera me quedé a solas con Emily en la sala.
Hace tanto tiempo que no la veía, ella sigue igual de hermosa que antes, como si el tiempo no hubiera pasado en ella.
-¿Cómo has estado?- pregunte para romper el silencio.
-Bien ¿Y tú?
-Bien.- ninguno de los dos parecía querer conversar así que cuidadosamente me levanté para abandonar el lugar, pero su dulce voz me estuvo.
-Pequeño...- cerré los ojos evadiendo todos los recuerdos sobre ese apodo.
-Emily...
-Necesitamos hablar.- me voltee y volví a mi lugar inicial.
-Si, necesitamos.
-Primero...- respiro hondo.- Te ofrezco una disculpa por haberte dejado de esa manera.- la mire con una ceja alzasa indicando que siguiera.- No era mi intención hacer eso.
-¿Algo más?- algo dentro de mi decía que no le creyera, pues estaba usando un tono de voz demasiado dulce, el cuál al mismo tiempo me dejaba rendió ante ella.
-Bill...no me hable así querido, yo no no quería irme...
-Pero te fuiste.
-No tenía otra opción.
-¿Por qué?- ella frunció los labios y negó con la cabeza.
-No puedo decírtelo.
La mire un poco decepcionado, sin más que decir me retire de allí dejándola sola y yo...con el corazón confundido.
Al cabo de unos días la estancia de Emily aquí era cada vez menos tensa, ya conversábamos con más naturalidad e incluso creo que ha intentado coquetearme.
En este tiempo e visto a Tom únicamente dos veces y cada encuentro es sumamente dulce, me habla con palabras bonitas, me toma la mano en público, me abraza y besa mis labios todo el tiempo.
Cuando salimos a la ciudad, él conduce mi auto y toca mis muslos de vez en cuando con la mano que no está ocupada en el volante. Yo no soy hombre de piedra, ante sus caricias solo podía contestar con leves jadeos.-Hola Sadie.- saludo a la pelirroja que me esperaba en el bosque de la mansión. Me había citado de emergencia, se encontraba tan nerviosa que no dude ni un segundo en aceptar su invitación.
-Bill...tengo un problema muy fuerte.- su ropa estaba desalineada y su rostro tenia rastro de que no había dormido en días.
-¿Estás bien?- pregunto preocupado.
-No... creo que estoy embarazada.- la noticia llegó a mi como un balde de agua fría, me quedé un momento en shock.- ¿Qué hago?¡Mis padres me van a matar!
Sacudí la cabeza con preocupación y me acerque a ella masajeando sus hombros para intentar tranquilizarla.
La llegada de un bebé por parte de Sadie ahora sería genial si no fuera tan joven, sin embargo eso no quita que yo me sienta feliz por ella.-Felicidades...¿Ya se lo contaste a Georg?- mire como sus ojos comenzaban a llenarse de lágrimas y soltaba un sollozo que hizo mi corazón trisas.
-Ya, pero el lo tomo de maravilla...me beso y me cargó en el aire... después...
-¿Qué pasó después?
-Él me propuso matrimonio ayer, dijo que quería que esté bebé llegara en nuestros brazos, siendo un matrimonio.- me enseñó sus dedos y pude apreciar sus perfectas uñas al estilo francés junto a un enorme anillo de oro blanco y diamante a su alrededor.
-Sad, eso es fantástico querida.- la abrace fuertemente, intentando transmitirle tranquilidad y estabilidad, felicidad y amor también para el nuevo pequeñin.- Estoy muy feliz por ustedes...- pensé un poco.- necesito, en ese caso, hablar con tus padres y cancelar el matrimonio falso.
-Ellos me odiarán Bill...me odiarán y a él o ella también.- toco su vientre plano con suma tristeza.
No es que lo padres de Sadie fueran personas que odiarán a los niños, es más, entre ellos y mi madre fueron los primeros en comentarnos que tan pronto estuvieramos casados comenzaríamos a pensar en los hijos. Ellos quieren un "heredero", y por supuesto que recibirían al niño o niña con los brazos abiertos...si solo Sadie no fuera tan joven...
-No lo harán.- negue con la cabeza y tome sus manos, sus ojos cristalinos me miraron.- Sabes que ellos quieren un nieto, solo dales la noticia y si ellos no te aceptan puedes venir a vivir conmigo hasta que nazca mi sobrino.
Sus ojos brillaron con esperanza.
-¿De verdad?- pregunto.
Asentí y bese sus manos en las mías.
-Yo...lo siento por arruinar los del matrimonio...
Negue.- Está bien, yo lo iba a hacer de cualquier modo.- me miró intrigada, instantáneamente una sonrisa enamorada se formó en mi rostro.- Yo tengo novio... él y mi madre no se llevan bien, terminé interviniendo y le dije con voz firme que acabaría con lo nuestro, por supuesto no lo acepto pero no importa, con el tiempo lo asimilara.
-Wow...Simone ha de estar enojadisima...y dime...¿Quién es el afortunado?
Él dueño de mis sonrisas,de mis pensamientos, de mi suspiros, de mis jadeos,de mi...
Solo es él.
-Tom.- suspiré de forma enamorada.- Tom el estuvo en el baile de cortejo y...
-Oh ¿Él que te siguió cuando saliste corriendo?
-Si.- murmuré con las mejillas rojas.
-Que bueno Billy.
Platicamos de nuestros intereses amorosos, acordamos que en dos días iría a su mansión para que platicaramos con sus padres sobre el bebé y el matrimonio. Ella me pidió estar ahí para darle apoyo cuando se lo diga a sus padres.
Subimos a mi auto para llevarla a su mansión, cuando la deje note su cambio de ánimo, ya se veía más feliz y tranquila.Cuando llegue a la mansión escuché gritos. Me acerque sin hacer mucho ruido, temiendo que fuera un ladrón.
Sin embargo, fue su voz la que me confundió.
-¡Eres una maldita zorra!
Sin pensarlo, me salí de mi escondite al escuchar la voz furiosa de mi novio.
-¡Déjala!
Fue Tom quien empujó a Emily bruscamente contra el suelo, sin piedad, con odio y repulsión.
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Fuego En La Sangre [Toll] (Twc NR)
RandomTom Trümper se quiere vengar de los Kaulitz enamorando al hijo de ellos, Bill Kaulitz, pero en el proceso el se enamora de el. ....... Actualizaciones lentas