𝚂𝚊𝚕𝚒𝚛 𝚍𝚎𝚕 𝚌𝚕𝚘𝚜𝚎𝚝

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El día estaba caluroso, como habían estado todos en el mes de Enero.

Rodrigo junto a su hermano, Lucas y algunos amigos, se habían juntado en su casa por dos razones:
Uno, tenía pileta
Dos, el día anterior había sido el cumpleaños de Lucas y decidieron que sería buena idea hacer una pequeña juntada.

Rodrigo y Lucas se llevaban solo un año y siempre fueron muy unidos. No eran los típicos hermanos que peleaban por todo, al contrario, no lo hacían casi nunca. Se podía decir que aparte de hermanos eran mejores amigos.

—¡¿Quien quiere la última cerveza?!—. Grito Ivan tomando una de las latas que había dentro de la heladera.

—Guardamela, no llegue a tomar ninguna—. Decía Lucas mientras salía de la pileta.

—Mentiroso, te tomaste una botella entera—. Dijo Rodrigo sentado en el borde de la pileta metiendo asi solo sus pies en esta.—Yo no tome ninguna posta—. Dijo levantándose de su lugar.

—Vos cállate que te tomaste una botella de vodka, si te llegas a poner en pedo mamá me mata.

Dicho eso Lucas salió por completo y se dirigio al rincón donde estaba la heladera.

—Toma—. Dijo Ivan abriendo la lata y entregándosela.

—¿Vos podes tomar?—. Pregunto Lucas agarrando la lata y apoyándose en la pared de la casa.

La música estaba fuerte, por lo tanto debían elevar el tono de voz si querían mantener una conversación minimamente normal.

—Es la primera que tomo, una no va a afectar mi rendimiento—. Dijo Ivan haciendo un ademán con la mano. Lucas lo miro y asintió.

Ivan era patinador de alto rendimiento. Era múltiples veces campeón nacional y pertenecía a la selección Argentina de patinaje. Uno de sus mayores logros había sido obtener medalla de bronce en los juegos olímpicos. Era considerado uno de los mejores en Argentina, por ende debía mantener una dieta estricta, en la cual tenía determinadamente prohibido consumir alcohol y otras sustancias.

—¿No te vas a meter al agua?—. Pregunto Lucas dándole otro sorbo a su lata.

El pelinegro simplemente negó y se fue para adentro de la casa.

Lucas e Ivan eran amigos desde los 7 años. Por ende se conocían perfectamente, sabían cuando algo estaba mal con el otro. Y en este caso, Lucas sabía que a Ivan le estaba pasando algo.

—¿Problemas en la pareja?—. Dijo Rodrigo en forma de burla. Como respuesta por parte de su hermano obtuvo un golpe en la cabeza.

Para cuando se hicieron las 21:00, los invitados ya se habían ido. Sólo quedaban Rodrigo, Lucas, Ivan y Angie, la mejor amiga de Rodrigo.

—Hace tres horas que te metiste a bañar ¡¿Qué mierda estas haciendo?!—. Grito Rodrigo en la puerta del baño de su habitación.

—Apúrate Angie que el enano se caga—. Dijo también Lucas.

La chica salió del baño secándose el pelo.

—Una no se puede bañar en paz.

—Salí que me cago—. Dijo Rodrigo entrando al cuarto y en su camino empujando levemente Angie.

Los chicos empezaron a reír cuando escucharon un golpe en la puerta.

—Hijo soy yo, ¿puedo pasar?—. Dijo Cintia, la madre de los carrera golpeando la puerta de la habitación.

—Rodrigo esta en el baño, pasa—. Dijo Lucas. Cintia entró y le dio una rápida vista a la habitación.

—No sabia que estaban acá—. Dijo saludando con la mano a los otros chicos.—Era para avisarles que habíamos llegado y que dentro de un rato ya va a estar lista la cena. Si quieren se pueden quedar, pero Angie, si después vas a bajar, ponete algo más de ropa.

¿𝚈 𝚂𝚒 𝙵𝚒𝚗𝚓𝚒𝚖𝚘𝚜? || ʳᵒᵈʳⁱᵛᵃⁿDonde viven las historias. Descúbrelo ahora