Quiero decirte pequeño cupido, que tus alas no te pertenecen, de tanto elevar tus flechas, has acabado clavándolas en tus ojos hasta sangrar el amor que profesas. Debo decirte pequeño amigo que todo lo que quieres repartir, no siempre está en el tiempo de ser recibido, la crueldad existe, está presente, el mundo no es el Olimpo que nos mostraron, no es las mariposas del estómago y las cosquillas continuas, hemos cambiado. Hoy estos pequeños humanos venden sus almas por contenido, regalan sexo como si de un mercado se tratase, pierden fidelidad por necesidad, impulsos asesinos de media noche, creyendo que la verdad no está descalza detrás de ellos para que la mentira no la escuche llegar. Hay pequeño niño de pacotilla, temo decirte que no dejaré que vuelvas al cielo, solo quiero que esta vez, tu carcaj de porcelana, no estropee tu hermosa mirada...
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Escritos que refugian el alma
PoetryQuiero aclararles a los lectores que las imágenes que utilizo para reflejar mis escritos no son mías, son tomadas de Pinterest y de la página de Instagram cultura inquieta, mi manera de escribir usualmente es viendo imágenes y trasmitiendo su dolor...