⋆ Capítulo 31 𝟹🥛

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Soobin estacionó el auto en las afueras de la corporación de Si Hyuk, soltando un largo suspiro lleno de resignación. Yeonjun descansaba en la parte trasera del vehículo y él solo intentaba repasar las mil y un razones que le dio Soo Ra para convencerlo de ir, diciéndole que ya habían estado ahí, que no había pasado absolutamente nada malo y que con una máquina mucho más grande, podría observar con mayor detalle el creciendo del pequeño bebé, que ya estaría cumpliendo sus cinco semanas en el vientre del minino.

—A ver, nene, ponte la capucha y vamos ¿Si? Te revisan y de regreso a casa te compro leche con chocolate ¿Te parece?—Yeonjun asintió emocionado, colocándose el sombrero de la capucha, tal como le indicó Soobin, y tomando su mano, saliendo del auto para tocar la gran puerta principal del lugar, siendo
abierta prácticamente al instante por Soo Ra, mostrándoles una gran sonrisa de bienvenida.

—Me alegra mucho que al final hayan decidido venir. Soobin, Yeonjun, adelante.

Soobin se tragó un “Como si hubiéramos tenido otra opción”, sin embargo no lo dijo, dejando que sea Yeonjun quien pase primero y después que Soo Ra se encargue de cerrar la gran y oxidada puerta. Muy al contrario de las veces anteriores, ahora no eran ni las seis de la tarde y ya estaban en tal sitio, así que Yeonjun y Soobin no debieron sorprenderse al observar tanto niño-gato caminando por todas las instalaciones del lugar, desde por el corredor principal hasta sus habitaciones, todas con las puertas abiertas, e incluso Soo Ra les iba informando que los pequeños tenían un patio enorme con pasto artificial donde pasaban sus horas leyendo, conversando o simplemente jugando entre ellos.

Vieron niños de muchos tamaños, algunos se quedaron segundos observando a Soobin, siendo él y el personal del lugar los únicos que no contaban con orejitas y colas largas, cortas, anilladas, bicolores ¡Wow!   Definitivamente una gran variedad de pequeños con los mismos detalles felinos pero agregándoles sus particularidades.

— ¡Hola! —Soobin y Yeonjun se detuvieron cuando justo frente a sus ojos se detuvo un niño, un poco más pequeño que Yeonjun y parecido, aunque sus ojos se veían diferentes. No sabía la razón pero Soobin no encontraba el mismo rastro de inocencia que en su pequeño. Era como una especie de Taehyun, aunque tenía el cabello casi del mismo color que el de su pequeño novio. —¡Me llamo Do Yun! —Meneó sus dos grandes y esponjosas orejas. Se veían bien, el niño era considerablemente adorable o eso creyó Soobin, hasta que sintió como los pequeños brazos de su bebé rodearon su cuerpo y escuchó un sonido diferente a cualquiera que hubiera oído de Yeonjun antes. — Uh, uhm.

Do Yun retrocedió unos pasos, hasta que llegó Soo Ra y, al verla, automáticamente se escondió detrás de la señora, sacando su cabeza e inclinando sus orejas, manteniendo su mirada fija en Yeonjun.

— ¿Qué pasa, nene? —Yeonjun no apartaba la mirada de Do Yun, con sus orejas caídas hacía atrás, gruñendo después de que ese niño-gato desconocido para el volvió a esconder su cabeza detrás de la mujer.

—Está celoso. —Habló la voz dulce de Soo Ra, volteando para dirigirse a Do Yun, colocándose en cuclillas, quedando a una altura más reconfortante para el pequeño. — Do Yun, Soobin es el novio de Yeonjun. Sabes que no debes mirar mucho a los novios de los demás.

—Yo no sabía. —Do Yum movió sus pies como pataleando, recibiendo una caricia sobre sus ondulados cabellos, sonriéndole después a la madura mujer. — ¿Puede decirle que lo siento?

—Él lo sabe. Ahora ve a jugar ¿De acuerdo? Encárgate que nadie mire mucho a Soobin. Se bueno y podrás ver tu programa ese de bichitos raros aunque lo pasen muy tarde.

— ¡Pokémon, Soo Ra! ¡Se llama Pokémon!

Mientras la mujer veía a Do Yun alejarse y cumplir con sus palabras, Soobin bajó la mirada, observando como Yeonjun no lo soltaba a pesar que la “amenaza” ya se había ido; el minino lo miró y le maulló, mostrándole sus ojitos llorosos. Soobin no iba a admitir en ese momento lo adorables que eran los celos de Yeonjun, así que solo se inclinó y besó con mucho cuidado y ternura los deliciosos labios de su pequeño, haciéndolo sonrojar, sabiendo que muchos pares de ojos los estaban observando.

⋆ 🐾◗Neko Corporation ‹𝟹 𝒔𝒐𝒐𝒋𝒖𝒏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora