3. Clínica Veterinaria
En la mañana, Alex Walter se encontraba fuera de la habitación de la recién llegada. Su madre le habia pedido que la despertara, ya que ella se encargaba del desayuno. El castaño se sentia culpable por su actitud con ella, asi que pensó que seria un buen momento para pedirle perdón.
Ir ahi y plantarse frente a esa puerta marrón fue difícil para Alex, hace meses no cruzaba por ahi. Ahora todo parecia ser un poco más sencillo, y Emm ha llegado apenas ayer.
Tocó la puerta con el puño y al no recibir respuesta. Se tomó el atrevimiento de entrar, dejando una escena un tanto tierna. Casa estaba abrazado a Thor, el perro de los Walter. Alex sonrió al ver eso, acercándose a pasos lentos hacia alli.
—Wow, si que Thor es confianzudo.-Jordan llegó tomándoles una foto a la castaña y al perro.-
Los dos chicos rieron, luego Jordan se fue.
Alex caminó a pasos lentos hacia la cama, pero los ruidos de sus pasos hicieron levantar lentamente a la castaña.
—Alex?-Murmuró bostezando y sin soltar a Thor. El castaño pensó que incluso con todo su pelo lacio alborotado Cassie se veia muy bonita. Ese pensamiento hizo enrojecerlo.
—Ehmm, yo..-balbuceó con sus mejillas coloradas.—Mamá me ha mandado a despertarte, dijo que te llevará a la clinica con ella.
—¡¿Enserio?!—Cass se levantó de inmediato, haciendo que el animal se levante.-
Alex pensó que la gran sonrisa de Emma no tenia comparación, se notaba que le encantaban esos lugares.
—Si, te esperamos abajo.-Alex le dedicó una sonrisa, ella le devolvió el gesto y se fue.-
En la mente de Alex quedó la imágen de Cassie sonriendo.
La jóven bajó al comedor un rato después, ya cambiada y bañada. Vestia un vestido corto color verde liso, junto con unas botas vaqueras de caño corto. Su pelo estaba humedo, ya que recién salia de bañarse.
Alex clavó su mirada en ella, y cuándo pasó por su lado. El olor a su perfume de vainilla invadió sus fosas nasales. Se alejó de ella, frustrado.
—Buenos dias Cass, cómo ha sido tu primer noche?.-Katherine le preguntó mientras mezclaba los huevos en la sarten.-
—Buenos dias Katherine, de maravilla. -Contestó la castaña para luego abrazar a la pelirroja dulcemente, ella se sorprendió por el gesto. Pero se lo siguió.
—Thor la usó de almohada toda la noche.-Habló Alex en un tono gracioso.-
La castaña rió recordando al perro.
—¿Qué?¿Enserio?.-Katherine se sorprendió.—Lo siento Cass, aveces Thor es..
—No te preocupes, me gusta la compañía al dormir. Y más si es de un animal.-Contestó la castaña, acercándose a Alex.-
—Zumo de naranja?.-Ofreció el castaño, ella asintió con una sonrisa.-
Le sirvió el jugo y le Agradeció. Luego se alejó nuevamente, borrando su sonrisa.
Era una situación difícil, no pudo disculparse.
...
Cassie parecia una niña pequeña en el parque, pero era una adolescente en una clínica veterinaria. La castaña trataba a los pacientes con seriedad y amabilidad. Teniendo mucho respeto ante todo. A Katherine le sorprendió que una jovencita de 17 años pueda trabajar tan bien. Los pacientes y dueños de los animales se iban satisfechos con la atención de la ojiazul.
—Toma.-Kathe le dió billetes a Emm. Ya se habia acabado su turno.
—Oh, no. No es necesario.
—Lo es, has hecho un gran trabajo.-Kathe sonrió.-
La castaña aún sin convencer agarró los billetes, sonriéndole a Katherine.
—Nos vemos luego, Kathe.-Cassie se despidió. -
Y justo en ese momento, Cole el mayor de los Walter entró por la puerta. El rubio les dió una sonrisa ladina a su madre y a la castaña a su lado.
—Mamá, Cass.-Las Saludó.-
—¿Qué haces aqui, Cole?.-Pregunto Cassie, confusa.-
—Lo he llamado yo, pensé que seria buena idea que te llevara a casa. Él acaba de terminar de trabajar.-explicó Kathe.—Nos vemos en casa chicos, los quiero.
Katherine besó una mejilla a Cassie y otra a Cole. Ambos jóvenes salieron de la clínica cuándo llamaron a Kathe para la cirugía de una gata.
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𝘿𝘼𝙔𝙇𝙄𝙂𝙃𝙏; 𝘼𝙡𝙚𝙭 𝙒𝙖𝙡𝙩𝙚𝙧
RomanceJackie se largó de Colorado dejando una gran rivalidad y corazones rotos entre los hermanos Cole y Alex. Es por eso que por cosas del destino, Emma llega a la casa de los Walter. Pero no a romper corazones, sino a arreglarlos. Y eso funcionó muy bie...