VII

1.4K 83 203
                                    

Juan estaba en medio del campo junto a un gran lienzo frente suyo, pintando la entrada al bosque en el lienzo blanco

A los pocos segundos se escucha como lo llaman desde lejos, sonrió al ver como la rubia se acercaba con algunas frutas en un plato

A- Toma Juanito, te traje esto para que desayunes, hoy no quisiste comer en la mañana y son como las 11

J- Gracias Ari, no debiste! -Dijo con una sonrisa para luego soltar una risa leve

A- WOW! Tu hiciste eso?? -apunto hacia la pintura con un tono de asombro

J- Oh si, te gusta?

A- Claro! Esta hermosísimo!! -Dijo mientras en sus ojos se notaban llenos de brillos- Dios! ¿Me lo regalas?

Juan frunció el ceño leve.

J- escúchame bien Ari, todos mis logros, no vienen gratis -Dijo en un tono serio- todo mi maldito talento, no crece en los arboles.

A- Pero-

J- tengo que practicar para hacerlo ver facil -Frunció el ceño- mas no lo es

J- Asi prácticamente regalartelo no seria posible, por lo menos no este, podria dibujarte unas rosas para mañana si gustas, sé que son tus flores favoritas

Ari se quedo callado mirando a Juan, asintió con una sonrisa y se dio media vuelta para irse de ahí.

Juan suspiro para que a los pocos segundos vuelva a escuchar su nombre se dicho a lo lejos, se volteó esperando ver a Ari nuevamente más sonrió ampliamente al ver al peli-negro.

J- Spreen! -Dijo con una sonrisa, mirando prácticamente el suelo, no quería ni mirarlo a los ojos.

Spreen noto esto y se noto confundido

S- Todo bien Juan-?

Juan no podía mirar a Spreen a los ojos luego de lo que hizo aquella noche, estaba avergonzado.

J- Si, no te preocupes

S- Seguro? -pregunto, tomando al miope del mentón para obligarlo a verlo

Juan aparto la mirada mientras sus mejillas se ponían de un rosa fuerte, el cual fue notorio para el oji-violeta, quien solto una risa baja

S- Te queda bien el rosa -Hablo el azabache con un tono suave, lo que hizo que Juan apretara sus muslos mientras soltaba una risa leve de nervios- Estas raro hoy, no estaras enfermo o algo?

J- Ah-!? Nonono! Estoy completamente bien Spreen, no debes preocupa-

S- Wow! Eso lo pintaste vos?! -Pregunto con una gran sonrisa, apuntando al lienzo

J- Si, llevo unas cuantas horas hacerlo, solo faltan unos pocos detalles y ya, pero son detalles que casi no se notan por lo que terminado está-...

S- Me lo regálas? Osea- entenderé si no quieres de todas formas -Sonrio

Juan simplemente se quedo callado, a los pocos segundos se dio media vuelta llendo directo hacia el lienzo, lo tomo entre sus manos y se lo entrego a Spreen

J- Ten! -Dijo con un tono amable

A los pocos segundos se escucho un grito fuerte, la voz provenía de una figura femenina de alrededor 25 años, por como grito, se notaba que estaba enfadada

A- JUAN SEBASTIÁN, VUELVE AQUI AHORA!! -Grito la rubia con enfado, lo que hizo que Juan se estremeciera

Spreen solo miro a Juan, estaba confundido.

J- Esperame aquí osito -Dijo antes de empezar a caminar hacia Ari.

El azabache se quedo callado ante el apodo pronunciado por el miope, su cara se puso roja al cabo de los segundos.

Una vez Juan se acerco lo suficiente a Ari, esta lo tomo del pelo fuertemente, haciendo que soltara un quejido fuerte de dolor

A- Quien coño es el?! -Grito la chica- ¿Y porque le diste el cuadro? -Dijo, mientras empezaba a jalar el pelo de Juan con fuerza

J- SUELTAME!! -Grito el de lentes, soltando lagrimas por sus ojos

Ari aparto su mano de forma rápida, mirando atento al castaño quien seco sus lágrimas de forma rápida, pero esto no le servía por completo ya que lagrimas seguian brotando por sus ojos.

Los sollozos eran bajos, mas lo suficientemente sonoros como para que las orejas de Spreen se levantarán de forma rápida, soltando un gruñido al saber que era Juan el que lloraba. Las uñas pintadas de negro de Spreen pasaron de ser lisas y cortas a unas garras filosas.

Comenzo a correr en dirección a donde venían los sollozos, encontrándose con una chica de pelo rubio que le pegaba una cachetada a Juan, frunció el ceño y gruño con fuerza, acercándose peligrosamente hacia la chica, siendo detenido por el miope quien seguía sollozando y se notaba atemorizado

Spreen se preocupo y en vez de atacar a Ari se acerco a Juan, abrazándolo en forma de consuelo

S- Ya ya....esta todo bien -Dijo mientras abrazaba a Juan, acariciando su suave pelo a la vez

Ari miraba la escena con enojo, soltando un quejido de frustración.

A- QUIEN MIERDA ERES TU!? -Pregunto con enojo, tomando a Spreen del pelo y tirándolo hacia atrás

El oji-violeta gruño de dolor y por instinto, aruño a la mujer quien solto un grito de dolor, llamando la atención de unos dos cazadores que pasaban por ahí

Lo hombres se acercaron con rapidez para socorrer a la chica, quien gritaba atemorizada y adolorida mientras de su brazo brotaba sangre por el profundo rasguño que le proporciono Spreen.

Una vez Ari vió a los dos chicos grito por ayuda, mientras lloraba fuertemente.

A- AYÚDENME PORFAVOR!

Los dos cazadores se acercaron y se quedaron sorprendidos unos segundos al ver como habían dos híbrido frente a ellos, cargaron las escopetas y apuntaron a los híbridos

A- NO! NO DISPARE- Tarde. Una bala atravesó el hombro de Juan, lo que hizo que soltara un grito fuerte de dolor- ¡¡JUAN!!

Juan lloro fuertemente mientras veía como la sangre caía por montones a través la herida recien hecha.

Spreen frunció el ceño, desesperado sin saber que hacer, tomo a Juan entre sus brazos mientras cerraba los ojos fuertemente por el sonido de los balazos atormentando sus orejas.

Con Juan en brazos, corrió hacía dentro de bosque, todo eso mientras los cazadores lo seguian

Poco después logro perderlos por completo y aprovecho para ir a su casa

Entro sollozando y respirando profundamente, los jadeos en busca de aire eran ciertamente constantes mientras cerraba sus ojos fuertemente como si de un niño de preparatoria en medio de un tiroteo escolar se tratase.

S- ¡¡PAPÁ!! -Grito con fuerza mientras lloraba.

Spreen no podía creer que tenía a Juan desmayado por la perdida de sangre en sus brazos, claramente esto le dejaría una marca.

Vegetta fue a la sala de forma inmediata una vez escucho el grito de Spreen y se quedo paralizado al ver la escena, se puso palido mientras por otro lado Rubius se acercaba tallando sus ojos con cansancio.

Cuando el chico rubio casi castaño vio la escena y solto un jadeo, acercándose rápidamente a ver si su hijo se encontraba bien, ignorando completamente al chico desmayado en los brazos del menor quien lloraba fuertemente por su amigo.

------------------------

Juan se encontraba acostado en la cama de Spreen recuperándose mientras Spreen almorzaba con sus padres en el comedor, todo estaba en silencio hasta que Vegetta hablo.

V- Nos vas a decir que le paso al chico o no?

Spreen se levantó de la mesa, llendo al baño de forma rápida, una vez ahí se apoyo de los costados del inodoro y vomito.

-----------------------

Aqui termina esto. ^^

Perdón si algo no es de su agrado y cordiales disculpas si hay faltas ortográficas

Palabras: 1237

Híbridos ★spruan★Donde viven las historias. Descúbrelo ahora