Mi tentación

Capítulo 1

**Arriba les dejo a Jared Whitlockita.

Por Dios, que alguien calle al gilipollas que no me deja dormir... Mi cabeza va a estallar no puedo más. ¿Quién diablos habrá entrado en mi dormitorio?

- SILENCIO - Sin abrir los ojos grito con todas mis fuerzas. De entre las sombras de mi mente se oye la respuesta a mi grito.

- A callad, que no estáis en vuestra casa- Tras la respuesta, se oye un ruido ensordecedor, con él abro los ojos y me doy cuenta de que no estoy en la casa de la manada, sino que estoy en una celda... Otra vez.

Me dispongo a examinar mi alrededor y veo que tengo dos compañeros inesperados de "habitación", un yonkie que permanece desmoronado sobre los bancos que componen el mobiliario de la celda, aunque no creo que su mente siga en este mundo. El otro compañero es un tipo probablemente el más estrafalario de los que haya visto a lo largo de mi vida... melena larga y rosa fucsia, su cuerpo claramente masculino está enfundado en un apretado vestido de licra naranja, además de unas plataformas de unos 15 cms de color verde neón.

Me acerco a los barrotes y observo que estamos en una comisaria que cuenta con unas cinco celdas, pero parece que la nuestra es la única que está ocupada. Al fondo se encuentra el escritorio tras el que está el policía que antes me habló. Como esta situación me es muy familiar decido esperar hasta que Owen, el abogado de la manada llegue y me saque de aquí, para llegar cuanto antes a mi cama.

- Whitlocka, arriba ha llegado su abogado.

Obedezco de forma inmediata, esperando encontrarme con la nada amigable mirada reprobatoria de Owen, pero en vez de ello me encuentro con una mujer que parece salida de mis más calientes sueños, solo que con más ropa, estoy seguro de que en mis sueños no había nada que me impidiera admirar el glorioso templo que era su cuerpo, ese cuerpo que desde este momento es MÍO y eso es lo que grita mi lobo interior. El agente de policía pasa demasiado cerca de ella, cuando abre la celda y gruño por lo bajo, intentando contenerme para no lanzarme hacia él y destrozarlo por atreverse a intentar rozarla, a ella, a mi diosa.

Los sigo hasta la sala en la que me entrevistaré con ella a solas, ya que según lo que dijo el policía es mi abogada, pero nada de eso dura más de dos segundos en mi mente y es que estoy demasiado concentrado siguiendo el bamboleo de sus caderas y admirando ese culo tan perfecto que parece irreal.

El agente se marcha dejándonos solos y cerrando la puerta tras de si. Antes de marcharse me ha dejado sentado en una de las sillas que acompañan a la mesa y esposado a esta última, por lo que mi movimiento es muy reducido, aunque si ella sigue contoneándose de esa forma delante de mi, juro que voy a romper esas malditas esposas.

- Buenos días, mi nombre es Helena Gilyard soy abogada de oficio y su caso me ha sido asignado. El chico con el que se peleó anoche en el club nocturno "Paradise" aún no ha presentado cargos, pese a que terminó la noche en urgencias con el tabique nasal desviado, cinco costillas magulladas y una pierna rota. Por lo que dé gracias de no estar camino de prisión. Ya puede salir un tal Klaus ha pagado su fianza. Quedamos a la espera de que llegue el informe del hospital y ver si finalmente se presentan cargos contra usted, en ese caso me comunicaré con usted, de no ser así un placer.

Cuando ella se disponía a recoger sus cosas para marcharse, traté de incorporarme para cogerla del brazo y retenerla. Ella se me quedó mirando a los ojos y yo sentí como una descarga me recorría entero para acabar en mi entrepierna, lo que hizo que de mi escapara un gruñido bajo.

- Señor Whitlockita por favor tengo que marcharme ¿tiene alguna duda?

- Sí, ¿me podría dar su número? por si tengo que ponerme en contacto con usted.

- Sí claro perdone el despiste, aquí lo tiene. Ahora sí, me marcho que tenga un buen día y espero no tener que volver a vernos en una situación así.

- Espere la acompaño a la salida- ¿De verdad Jared? ¿Eres gilipollas? ¡Estás detenido! Aunque Klaus haya pagado la fianza aún tienen que quitarte las esposas y tienes que recuperar tus cosas. Ella no pudo aguantar la risa y su máscara de profesionalidad cayó, la mujer de hielo se transformó en una alegre ninfa.

- Ahora si lo puedo decir con sinceridad, ha sido un placer conocerlo y puedo decirle que ha conseguido que continúe el día con una sonrisa, cuando hoy había empezado siendo un día nefasto. Bueno tengo que marcharme Señor Whitlockita

- Jared

- ¿Cómo dices?- preguntó ella con confusión en su mirada

- Quiero decir me gustaría que me llamaras por mi nombre de pila, de hecho estoy seguro de que no soy mucho mayor que tú, así que por lo que a mi respecta yo soy Jared y tú eres Helena ¿te parece bien?

- Sí por qué no, pero dudo que nos volvamos a ver

- Eso habrá que verlo- creía que lo había pensado pero no mi bocaza lo tuvo que decir- Perdona no quería ofenderte...

- Buenos días Jared- Y así fue como acabé intentando girar sobre mí mismo para no perderme como esa divina mujer desaparecía de mi vista, que fue ocupada por la figura del agente que malhumorado que me quitó las esposas a la vez que tiraba sobre la mesa una bolsa transparente con mi reloj, mi cartera y las llaves de mi coche. Saqué las cosas, me las guardé en los vaqueros y salí de la comisaría, para encontrarme con mi beta, Klaus.

- Joder Klaus ¿cómo cojones acabé ayer aquí?

- ¿No te acuerdas? Ayer nos encontramos con Xavier en Paradise y nos amenazó, nos dijo que como Alpha tenía que defender a sus hembras...

- ¿Quién se ha metido con sus hembras?

- Joder, Jared no te acuerdas que en la fiesta de hermanamiento de manadas, Nick encontró a su compañera entre las hembras de la manada de Xavier, creo que se llama Annie. Nick la marcó el día de la fiesta y no esperó a que arregláramos el asunto nosotros para que no hubiera problemas entre manadas. Después de marcarla se la llevó con él sin posibilidad de que ella se despidiera, la chica es feliz con Nick pero aún así creó un conflicto y tú ayer te diste de hostias con el beta de Xavier, Vincent, cuando fue a por Nick. Realmente estabas fuera de ti...

- Sí joder no se qué me pasó pero mi lobo interior estaba a flor de piel...

- Bueno venga ¿vamos a casa?

- Sí, claro vayámonos, pero antes tengo que ir por mi coche al club...

**** Chicas espero que sean comprensivas, esta es mi primera obra y aquí les dejo el primer capítulo espero que les guste... Prometo que en el próximo capítulo habrá más líos entre Helena y Jared, este sólo ha sido introductorio, el siguiente será más caliente.