Capítulo XII

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Jieun suspiró con algo de cansancio al ver la figura del moreno entrar al lugar, que estaba demasiado tranquilo como para que interrumpieran su paz. No, no quiero hablar contigo en este momento.

La chica estaba cansada de escucharlo pedirle que salieran de ese lugar con vida, o al menos ella. No sabía la razón por la que este parecía tan necio con ese tema, pero la estaba frustrando, porque ahora ya ni siquiera sabía si eso iba a poder ser como ella quería, todo estaba haciéndose más difícil.

— Princesa, no se si lo notaste, pero ya casi son las once y tengo cosas que pensar, no eres el centro de mi mundo, ¿sabes? — Este habló, mirándola con una sonrisa sarcástica.

— Actúa como tal entonces. — Esta murmuró bajo, mirada fija en el cielo nocturno antes de escuchar pasos acercarse a ella, cuando su mirada subió, hubiera caído de espaldas de no ser porque las manos de Gyunjoon tomaron su cintura con fuerza, evitando que esta cayera al vacío, porque estaba sentada en la orilla del muro qué separaba la azotea de una muerte segura. — Mierda, no te acerques así.

— Jieun-ah. — Este llamó, su voz era sería a pesar de que ese nombre había sonado como una caricia en su oido. — Déjame preguntarte algo.

— ¿Qué quieres?

— ¿De dónde sacaste ese nombre, "Joonnie"? — El chico preguntó con sincera duda. La chica parpadeó, recordando el momento en el que esta le había dicho eso, no lo sabía, no sabía la razón, solo salió de sus labios, fue tan natural que juró que lo había dicho antes. — Jamás me habías llamado de esa manera, princesa, pero...

— ¿Sientes que lo he hecho antes? — La chica asintió, bajando la mirada de sus bonitos ojos rasgados a sus piernas. — No preocupes, no lo volveré a hacer, es... Ridículo.

El chico la vio desviar su mirada, admirando su perfil tan bonito que esta tenia. Y en ese momento, sintio como si lo hubiera vivido antes, tenerla ahí, frente a él, este entre sus piernas también, estar frente a ella a esa distancia y admirar su perfil, todo eso se sentía tan familiar. — De todas formas me voy a morir.

— Ah, no tengo tiempo para esto. — La chica se quejó, iba otra vez con esas palabras. Empujándolo, esta intento salir de su agarre, no teniendo éxito porque este colocó sus manos en sus piernas, tomando sus muslos para acercarla a él. — Suéltame.

— Yah, yah, no te enojes, preciosa, no dije nada malo.

— Claro que... — Esta se detuvo, mirándolo a los ojos, notando lo cerca que estaban, sus respiraciones se mezclaba.

La joven solo tragó con fuerza antes de echar su cabeza hacia atrás, por alguna razón, su mente parecía no querer aceptar las palabras del chico.

Como decir que ella moriría, no quería aceptarlo, no iba a hacerlo.

— No lo harás.

— ¿Entonces tú lo harás?

— No voy a morir por ti tampoco, imbécil, conoce tus límites. — Esta se quejó, el chico sonrió con diversion, acercándose instintivamente más hacia ella, su nariz se colocó en su cuello, inhalando su olor corporal, sus labios se deslizaron puse su piel, pero no se detuvieron en si gun lado en especifico hasta que llegaron a su oreja.

— ¿No? Porque yo lo haría por ti. — La chica se tensó cuando escuchó eso, el susurro causó un hormigueo en todo su cuerpo. Parpadeando con confusión, esta regreso su cabeza a su posición normal, podía ver la nuca del chico, y sus manos picaron, como si quisiera colocarlas en su cabello y acariciarlo. — Jinnie-yah

𝗚𝗔𝗠𝗘; ᵍᵍʲ 『Spanish Version』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora