CAPÍTULO 21: Conocer A Tus Suegros Vampíricos

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Cuando desperté sentí unos fuertes brazos abrazandome, me dolía un poco la cabeza, pero era normal, la mordida de un vampiro te deja un tanto aturdido, pero se te pasa con el tiempo. Abrí lentamente mis ojoa dejando ver a un Onán dormido y encantador, me removí un poco hasta quedar sentado en la cama, el se quedó en la cama todavía dormido, tomé mi móvil y le envié un WhatsApp a Judith diciendole que estoy en casa de Onán, por si ella pasa por mi casa para irme a buscar al instituto, al rato ella me respondió diciendo que ya no había más clases hasta dentro de tres semanas, el instituto estaba infectado de bichos y de piojos por lo que me dijo ella, estaban fumigando el centro para no dejar rastro de ningún bicho y de piojos. Cogí mis boxers y me los puse. Me asomé al balcón y el aire frío de la mañana de Noviembre te calaba hasta los huesos, pero es normal estamos en invierno, el jardín de los padres de Onán estaban a salvo, pero la entrada principal no se salvó, estaba llena de nieve. Me quedé un buen rato ahí viendo las calles limpiarse con grandes camiones de los quita-nieves, sentí algo envima de mis hombros, era una manta azul de terciopelo, y detrás vi al vampiro de mis sueños.
-Te vas a enfermar gordi y no quiero que te pase eso - dijo el haciendo puchero inclinadose hacia mi
-Tranquilo, no me va a pasar nada porque.... Achis - estornudé y un moquito líquido me salió de la nariz. Onán cogió un pañuelo y me sonó la nariz como a un niño pequeño
-Ves, te lo dije y tu diciendo que no - dijo Onán un poco enojado, pero le quite importancia
-A.. A.. ACHIS.. ACHIS.. ACHIS - me puse enfermo, que iba a saber yo, pensé que no me iba a pasar nada
-SALUD, DINERO Y AMOR - dijo Onán con una risita
-¡Ja Ja Ja! ¡Qué gracioso estás hoy! - dije yo enojado pero abrazado a él
-¿Quieres desayunar? Porque yo sí - dijo agachandose para besarme ya que yo era seis centímetros más bajo que él, el media 1,70 y yo media 1,64 así que él pobrecito estaría agachandose siempre a no ser que me ponga botas de tacón alto, pero sabemos que eso no va a pasar nunca
-Vale, voy al baño y luego bajo a desayunar ¿si? - dije yo frotando mi nariz con la suya
-Si quieres te hago compañía, no tardaría en desvestirme jajaja - dijo él acercándose más a mi
-No tranquilo yo me baño enseguida, no tardo nada espérame abajo - dije yo. Él me dijo que cogiera alguna de sus ropa si quería. Me duche lo más rápido posible, pero bien aseado no al trancazo, me eche mi desodorante de menta y me peine un poco el tupé, me lo hice hacia atrás con ayuda de la gomina, me puse un suéter blanco con el número 23, me quedaba enorme, ya que Onán tiene más músculo que yo y es más alto, sus pantalones me quedaban ajustados, porque los llenaba con mis inmensas caderas y mi inmenso culito. Me puse los zapatos Nike Force blancas de caña alta y baje hacia la cocina, allí estaba él, de espaldas, esa espalda que por casi no dañe con mis pequeñas uñas, su espalda era fuerte y grande, su cintura era mediana y su trasero... Era tan redondito que se veía desde el salón,sus muslitos eran gorditos y sus piernas eran enteras y gorditas. Cuando se volteó me sonrió con su boca curvada
-¿Cómo me veo? ¿Me hace gordo el pantalón? ¿Me hace mucho culo o mucha cadera? - el se me acercó y se agachó otra vez para besarme, mis manos estaban en sus mejillas y sus fuertes manos posadas en mi culito
-Te ves de maravilla con mi pantalón gordi, te amo - dijo esto y me volvió a besar, quité mis manos de sus mejillas y lo abracé por el cuello atrayendo más esos labios que tanto deseaba
-Gracias mi Oni gordi jajaja - como me gustaba chincharlo con ese nombre
-Jajajaja que te gusta chincharme Gordi morenito - me dijo él de lo más amoroso posible para no mostrar su enojo
-Lo sé jajajaja - dije yo volviéndolo a besar. Terminamos de besarnos y nos sentamos a comer en la barra de granito que había en medio de la gran cocina. Onán me sirvió un plato de huecos fritos, con salchichas y algo de ensalada, con un zumo de plátano y fresa para mojar la comida, él se sirvió un plato de tostadas con mermelada mientras se hacían sus sándwiches mixtos. El desayuno lo pasamos entre risas y besos. En la tarde fuimos a dar un paseo y en la noche conocí a sus padres, eran altos, blancos con ojos marrones rojizos, sus colmillos sobresalían un poco, sus cabellos eran negros azabaches, la madre iba de rojo con negro, la blusa era de tiranted y de escote escaso y el padre iba con un suéter gris y unos pantalones negros, la habitación animaba el ambiente, daba vistas a la ciudad en la que ellos vivían, Onán me había dicho que sus padres son los jefes de la empresa de farmacéuticos más rica del mundo "Cure&company", la habitación tenía una mesita de decoración detrás de los sillones, había un sillón morado con cojines blancos grisáceos como los dos sillones en los que estábamos sentados Onán y yo, detrás de el sillón morado había un estantería llena de libros y con un cuadro blanco con algo de negro para darle algo de elegancia a la sala, era grande y espaciosa, las paredes eran negras y las cortinas grisáceas, esa sala era ka habitación de los padres de Onán, había una cama con el edredón gris y los pies de la cama acababa con una envoltura de cuero y delante de esta un baúl marrón madera, sus padres tenían un buen gusto, de tal palo tal astilla. Empezamos a hablar, me encantó sus padres son muy buenas personas. Ya me tenía que ir así que me despedí de mis futuros suegros y me monte en el auto de Onán. Llegue a mi casa y le di un beso de despedida, mañana lo volvería a ver, le dije te amo y salí de su coche. Entré a mi casa, mi mamá estaba dormida, le plante un beso en la frente y me fui a acostar. Mañana sería otro día con mi vampirito bonito.

IN LOVE WITH THE VAMPIREDonde viven las historias. Descúbrelo ahora