¿Vida social activa?

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Me he concentrado en estos capítulos en hablar solamente de las condiciones económicas y materiales, de lo que quiero y lo que considero para mí una necesidad. Sin embargo hay otras cosas en la vida más que esto, por ejemplo está la familia.

La mejor sensación del mundo es llegar a casa y tener la oportunidad de una vez más poder sentarte en la mesa con los tuyos y finalizar la noche con unas risas entre familia, no todos han tenido el placer de experimentar tal dicha pero sin dudas es un sentimiento reconfortante

En uno de los capítulos iniciales escribí que a parte del esfuerzo, el sacrificio y otros factores que harían posible el éxito en la vida lo más importante era saber que nos tenemos a nosotros, que contamos con nosotros y no me equivoqué pero como todo hay momentos débiles y negativos y en esos sombríos momentos necesitamos una palabra, una frase motivadoras, tal vez solo baste con una sonrisa, el caso es que puede ser bastante desestresante tener a alguien con quién hablarno significa que sea una necesidad, ni dependencia pero realmente es relajante conversar con una de esas personas que llegas y le cuentas la primera cosa que se te viene a la cabeza sin miedo a si pueda gustarle o no, decir o hacer algo sin temor a la insuficiencia de nuestra parte es una sensación cómoda y no hablo solo de diálogos entre consanguíneos sino todo tipo de relación que podamos establecer con una persona que nos resulte agradable.

No cuento con una vida social activa pero a menos que sea ese nuestro objetivo: escondernos de la sociedad - y lo digo sin cuestionar esas tendencias antisociales - estamos obligados a socializar y hablo de obligación refiriéndome a que las situaciones de la vida de una forma u otra nos llevan a tener que intercambiar palabra con alguna persona y de la más inesperada frase surgen las más sólidas relaciones





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