Prologo

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¿Que la Bella y la Bestia termino en un final feliz? ja su estupidez me da risa, ¿Cómo pueden pensar eso? si ese animal aunque parezca príncipe nunca dejó de ser una bestia...

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Mi mami siempre esta hermosa, cada vez que la miro me muestra una sonrisa muy alegre, le encantan los vestidos así que está usando uno tan hermoso como ella.

Mi papá entra al jardín, saluda a mami con un beso en la boca ugh que asco, ellos ríen divertidos ¿qué es lo gracioso?; luego fuimos a un restaurante, vamos a celebrar mi cumpleaños y estoy muy entusiasmado, hace mucho tiempo que no estamos todos juntos, después de la cena fuimos al cine y luego al parque, aquí llamaron a mi papá.

- Amor ya deja el celular, es el cumpleaños de nuestro hijo.

- Es importante, tengo que volver.

- ¿más importante que nosotros?

-Deja de alegar mujer, a veces te pones tan insoportable.

- P-pero...

- ¡Ya cállate! - y se fue dejándonos solos, ¿Cómo es que una llamada puede cambiar todo? ella me miró y dijo.

- Tranquilo... ¿quieres que te compre churros? - mi rostro se ilumino y asentí con la cabeza; después de todo mi cumpleaños número 5 no fue tan malo...

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Estamos en una de esas cenas de negocios que tanto odio, mi mamá esta aguantando el disgusto que siente y regalándole sonrisas a todos, su fuerza es impresionante incluso con las miradas de esos pervertidos que no disimulan su interés; el golpe por parte de mi mamá hacia la mesa, provocó que tomará  atención a la conversación.

- ¡No lo permitiré! - ¿de qué me perdí?

- No es de tu incumbencia.

- Se trata de mi hijo.

- Él no se ha opuesto al matrimonio - ¡¿Qué?! , cuando iba a replicar mi padre me lanzó una mirada aterradora.

- ¡Solo tiene 12 años!

- ¿Y?, solo son unos años para que cumpla su mayoría de edad y ya cállate que esa decisión la tomó yo, así que ¡cierra tu boca inmediatamente!

Mi mamá le hizo caso y los demás retomaron su conversación. Al llegar a la casa, mi padre la golpeó por su intromisión y según él, yo tuve que presenciar eso, para aprender la lección; lo odio, por todo lo que le ha hecho a esa maravillosa mujer...

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- Mamá no puedes seguir aguantando sus abusos y traiciones, vámonos de aquí.

- No puedo...

-No me digas que lo sigues amando...

- No, hijo ya no siento nada por él y no es que no quiera, es que no puedo, antes que ustedes nacieran he incluso después intente escaparme, pero él siempre me encuentra y al volver lo paso aún peor, es mejor mantenerse así.

- Mami...- esta vez habló mi hermanita - si no puedes irte porque yo estoy enferma...en verdad lo siento.

- Nada que ver mi hermosa Daria - mi mamá se acercó a la cama donde está recostada mi hermana y se sentó junto a ella.

- Vladimir acompáñame - me levanté y lo seguí por el largo pasillo hasta su despacho.

-¿Que necesita?

- Siéntate - le obedecí - bueno en primer lugar quiero que de ahora en adelante me acompañes a todas las reuniones de negocios y sociales, segundo quiero que mañana vayas a la casa de Annie, es la hija de un importante médico y toda su familia también ejerce esa profesión.

- NO - su cara llena de confusión es muy divertida y se me escapa una sonrisa.

- Eres igual que tu madre...- mi sonrisa se borró cuando su puño impacto contra mi cara - ¿ya no es tan divertido cierto?, aún eres un niño de 15 años y demasiado frágil para ser mi hijo.

- Gracias pero no quiero ser una bestia como tú, viejo de mierda - escupí la sangre y caminé hacia la puerta.

- ¿a dónde crees que vas? Niñato insolente - me agarró el pelo y me arrastro de vuelta por el pasillo mientras habla con alguien por teléfono y cada vez que intentaba levantarme, tiraba más fuerte, hasta derribarme otra vez, intente no llorar pero no solo me dolía el pelo, durante el camino me hacía chocar contra todo lo que podía, en las vueltas
me azotaba contra las paredes y no es como si mi débil cuerpo servía de algo, finalmente se detuvo, abrió una puerta y me arrojo dentro.

- Te enseñare a no insultar a tu padre - sacó su cinturón del pantalón y con eso comenzó a golpearme, cada parte en que chocaba contra mi cuerpo ardía, brazos, piernas, abdomen, pecho, pies y cara, la hebilla impacto contra mi nariz, por el ruido y el dolor seguramente se rompió ¿tanto se enojó por mi insulto?, después de unos minutos todo mi cuerpo dolía, no sé cuánto tiempo pasó hasta que se aburrió... cerro la puerta y me hizo pasar 4 semanas dentro de esa habitación oscura, solo de vez en cuando venía únicamente para golpearme...

- Ya sal de aquí y súbete al auto - mi mamá gritaba desesperada, pero yo me encontraba tan débil que no le entendía palabra alguna, me subí al auto como pude sin saber que esa sería la última vez que vería a mi mamá y a mi hermana...

Amor retorcido [D.M.C.H.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora