¿Te quedarás ahí y me verás arder?
Bueno, está bien porque me gusta cómo duele.
¿Te quedarás ahí y me escucharás llorar?
Bueno, eso está bien porque me encanta la forma en que mientes.
Después de un año de introspección y tratamiento en el hospital psiquiátrico, finalmente puedo decir que soy un hombre nuevo. El día de mi salida es un momento emocionante y liberador. Al abrir la puerta del hospital, me encuentro con una sorpresa maravillosa. Los dreamies, mis amigos y hermanos, me esperan con globos de colores y un pastel de cumpleaños. Me siento abrumado por la emoción y les doy la sonrisa más sincera que he podido esbozar desde hace mucho tiempo.La sonrisa es un reflejo de la paz y la felicidad que siento en este momento. Es hora de dejar atrás el pasado y empezar una nueva vida, una vida llena de esperanza y posibilidades. Los dreamies me abrazan y me felicitan por mi nueva etapa. Me siento agradecido por su apoyo y amor incondicional.Mientras celebro mi salida del hospital con mis amigos, no puedo evitar pensar en lo que me depara el futuro. Estoy listo para enfrentar nuevos desafíos y vivir una vida plena y feliz. La sonrisa que les doy a los dreamies es un símbolo de mi determinación y entusiasmo por empezar de nuevo. Es hora de tener una buena vida, una vida que valga la pena vivir.
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Diez años después.
Donghyuck's pov:
Diez años después de mi salida del hospital, mi vida ha cambiado por completo. Ahora soy padre de una hermosa niña llamada Verónica, a quien amo con todo mi corazón. Estamos en un parque, disfrutando de un día soleado, y ella corre descalza, con sus coletas bailando al viento. Me siento orgulloso de ser su padre y de haber podido darle una vida feliz
-Nini, mi amor, vamos es hora de ir a casa.-le aviso a la nena que corretea descalza, si, esa niña odia los zapatos, estoy seguro.
-Papi Dong, otro ratito, ¿Si?- me hace ese puchero que me derrite y me rindo.
-5 minutos más, ¿Ok? Tenemos que ir a preparar la cena y darle de comer a Lion.- me mira y sonríe enorme.
-¡Si papi!- y sigue correteando por todo el parque.
-¿Donghyuck?- Reconozco esa voz inmediatamente, siento un escalofrío recorrer todo mi cuerpo y levanto la mirada, ahí, justo al frente de la banca en la que estoy sentado, está el amor de mi vida, Mark Lee.
-Hola Mark.- Sonrió y él hace lo mismo, lo invito a tomar asiento a mi lado. - cuentame, ¿Que tal ha ido todo?-
-Pues, no voy a mentir, al principio fue una total tortura, fue muy difícil, pero pudimos seguir adelante, tome un hiatus de 8 meses, dónde fui con psicóloga, me interne durante 6 meses y pues, ya luego de tanto tiempo, los miembros y yo decidimos no renovar contrato, ya estamos muy cansados y viejos todos como para seguir en la industria.- Mark evita mi mirada y puedo ver una cosa que hace mi corazón latir como una cabra loca, lleva nuestros anillos de promesa juntos en un collar contra su pecho.
-Me alegra mucho que les haya ido bien a todos, yo sigo en contacto con cada uno de ellos, a veces nos reunimos y tomamos un café, del único que no había sabido mucho era de ti.- Mark me observa con esos preciosos ojos chocolate que me enloquecen de la misma manera como cuando lo ví por primera vez.
-Pensé que me odiabas, así que preferí tomar distancia y sanar.- Lo miró extrañado, ¿Yo?, ¿Odiar a Mark Lee? Me tiene que estar jodiendo.
-Melt, nunca te he odiado, como odiar al chico que tanto ame y aún...-
-¡PAPI DONG!- Fui interrumpido por este pequeño monstruito.
-¿Qué pasa, Nini?- Ella se acerca a mi oído y me dice que tiene muchas ganas de hacer pipí, así que listo, está es la señal para irnos de forma urgente.
-Mark, me agrado mucho poder hablar nuevamente contigo, espero verte pronto.- Tomó los zapatos de Verónica y le indico que se subiera al auto.
-Dame tu número.- Es lo único que sale de la boca de Mark, que está pálido.
-¿Ah? Ah, Sisi claro, es 323 *** **** me escribes con tu nombre, pero ahora sí me voy, mi princesa me necesita.- Me despido rápidamente y subo al auto, menos mal llegamos a tiempo para que Verónica usará el retrete.
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Mark's pov:
Me quedo sentado en la banca, pensando en lo que acaba de pasar. Me doy cuenta de que Donghyuck tiene una hija. Me siento un poco triste, pero también me siento feliz de saber que él es feliz. Me pregunto si él ya me ha olvidado, si ha encontrado a alguien más, me cae una gotita de lluvia en la cabeza y salgo de mis pensamientos, me doy cuenta que me había quedado pensando, tanto, que ya había anochecido.
Cuando llegue a casa, decido escribirle a Donghyuck para darle las buenas noches y él me responde de inmediato. Me dice que fue agradable volver a verme y me saca una sonrisa. Beso los anillos que llevo contra mi pecho, recordando los momentos que compartimos juntos. Me doy cuenta de que todavía lo amo y que me gustaría intentarlo de nuevo.
