Después de una larga jornada de trabajo, regaños de Mori, informes innecesarios y algunos ajustes de cuentas, por fin se pudo dar su merecido descanso a la orilla del mar. El sonido de las olas chocando contra la orilla, la tranquilidad de la ciudad y el ver la playa vacía lo relajaba más que cualquier cosa. Ese día en específico no estaba tan relajado, a decir verdad, su ansiedad estaba a tope, el sentir que pudo haberlo hecho mejor en sus misiones, que pudo ahorrarse regaños, que puedo esforzarse más y no tener que corregir informes lo tenía mal. algunas lágrimas caían por sus mejillas, al no haber nadie en aquella playa se permitía ser frágil, se permitía llorar de impotencia, se permitía ser vulnerable sin problemas. Pero la cosa era que ese día no estaba solo como él pensaba, sintió una mano en su espalda y escuchó a alguien preguntarle "¿estás bien?" giró su cabeza inmediatamente solo se veían sus ojos azules cristalizados que con el reflejo de la luna se asemejaban al mismo océano.
—¿Todo bien? — reiteró la pregunta aquel rubio bastante alto, éste también llevaba una mascarilla, suponía que para el frio. En su tono de voz reflejaba preocupación.
—Si... gracias, es solo... estrés por el trabajo— Si bien en un principio pensó en hablarle mal para que se vaya, después recapacito, no iba a alejar nuevamente a alguien que solo quería ayudar.
—Bien, ¿te molesta si te acompaño un rato? — A Kunikida también se le había hecho raro que hubiese alguien a tales horas de la noche, venía caminando desde el otro extremo de la playa cuando se encontró a alguien en pose fetal sentado sobre la arena.
—Adelante— Aunque hubiese bastante espacio, Chuuya se corrió hacia un lado para que Kunikida se pudiese sentar.
Ninguno sabia de que hablar, estuvieron unos diez minutos sentados admirando al océano hasta que Chuuya decidió preguntar.
—¿Qué haces aquí tan tarde? No muchas personas vienen aquí a estas horas—
—Yo estoy aquí por recomendación de mi terapeuta y pues, este horario es el que más se acomoda a mi agenda, aunque... podría preguntarte lo mismo a ti—
—Bueno... Yo estoy en mi descanso por así decirlo, me escapo del trabajo todos los días para venir aquí—
—¿Escaparte del trabajo? ¿tienes turno nocturno? —
—Si... podría decirse que sí, venir aquí me ayuda a liberar el estrés del trabajo —
—Y... ¿en qué trabajas? — Kunikida quería relajar un poco el ambiente y aprovechar de conocerse más, pero Chuuya arruinaría sus planes.
—Bueno... no me siento muy cómodo diciendo eso... Perdón— Chuuya realmente no quería compartir mucha información, al ser un ejecutivo de la mafia tenía que ser cuidadoso con eso.
—No hay problemas, es totalmente valido que no quieras compartirlo, si quieres mejor mantengámonos en el anonimato con esas cosas, pero podrías decirme, ¿cuál es tu color preferido? —
—Gracias... creo que el azul es bonito, igual que el turquesa, ¿cuál es el tuyo? —
—El lila es lindo, al igual que el anaranjado... cuéntame ¿te gustan los animales? —
— No sé si todos los animales en general... pero me gustan los perros, son hermosos... Todos. ¿A ti te gustan los perros? —
—Son animales Leales y simples, me parecen muy llamativos, el cómo te aman incondicionalmente sin importar que, es impresionante. Aunque yo soy más de aves. —
—Ya veo... ¿Qué tipo de ave te gustan? —
—Bueno... todas me parecen impresionantes, me gustan los colibrís, pero en mi hogar tengo un loro.
Así estuvieron hasta más o menos las 1:30 de la mañana hablando, la hora se les pasó volando Kunikida al fin se pudo sincerar con alguien y Chuuya sonreía sin parar, cuando Chuuya recibió un llamado de Mori fue cuando realmente se dio cuenta de la hora.
—Si, perdón jefe, enseguida estaré ahí, si, gracias...—
—Supongo que ahora volverás al trabajo ¿no? —
—Si... eso parece, muchas gracias por todo, disfrute hablar contigo —
—No es nada, puedo decir lo mismo, eres muy agradable —
Sin nada más que decir, Chuuya se fue, Kunikida se sorprendió de sí mismo, siempre tiene muy presentes sus horarios, pero ahora no solo dejo de tomar en cuenta el tiempo, si no que se pasó por una hora completa de su horario establecido, no tiene idea que pudo haber sido, pero no se sentía mal por eso. Estaba alegre, al parecer aquella persona con quien se encontró le hizo sentir seguro y en confianza, cuando no sabía ni siquiera su nombre. Al otro día Kunikida despertó a la misma hora de siempre, aunque esta vez con una hora menos de sueño. no se notaba cansado así que no le dio mucha importancia, al llegar a la agencia se dio cuenta de que, aunque llegara un poco más tarde de lo usual, que son diez minutos antes de la hora de entrada y hoy llego 7 minutos con 23 segundos antes de la hora de entrada. nadie estaba ahí, sin importar que tan temprano llegaba, siempre era el primero en llegar. Como todos los días, se sentó en su escritorio y comenzó a leer los casos que estaban pendientes. De a poco todos comenzaban a llegar a la agencia y sorprendentemente Dazai Osamu estaba entre ellos, no le tomó importancia, ya que de seguro solo iría a holgazanear como siempre. No se dio cuenta, pero cuando comenzó a leer el caso de un perrito perdido no pudo evitar recordar a aquel desconocido se la noche anterior, inconscientemente comenzó a sonreír y no fue hasta que Dazai le hablara que se dio cuenta de que estaba sonriendo.
—Que pasa Kunikida-kun~ estas sonriendo mucho mientras ves eso~ ¿qué es? —
—No te incumbe intento de papel higiénico, es solo un caso de un perro perdido. —
—¿Entonces? ¿por qué sonríes tanto? tú eres un amargadito Kunikida-kun, casi nunca sonríes
—¿Amargado? mira quien habla de amargosidad*, aunque, de cualquier modo, ¡¿tú ahora no deberías estar trabajando?! —
—Claro, claro, como digas, bueno iré a hacer mi trabajo, que ese es buscar a una linda señorita para hacer un doble suicidio~— dicho esto Dazai salió rápidamente de la agencia dejando a Kunikida pensando, ¿de verdad estaba sonriendo?
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*: para los que me digan que esa palabra no existe, es una referencia a Shrek, no puse la frase completa porque me iba a quedar medio incoherente con la perso de Kunikida.
Bueno aquí está el primer cap, no sé si les guste, espero que si porque me esforcé mucho haciéndolo y me gustaría que estos dos tuvieran un romance muy lindo, pero con mis ideas es probable que uno al final termine automoriendoce o algo, esperemos que no se me ocurra nada de eso.
bye bye, nos vemos en el cap 2
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Olas nocturnas (Kunichuu)
FanfictionQue pasaría si dos completos "desconocidos" se juntaran todas las noches a apreciar el océano, pero que más allá de eso no saben nada el uno del otro. Ese fue el caso de Chuuya y Kunikida 🛑 La portada no es mía, créditos a su respectivo autor/a🛑