The Song of a Siren

Un canto de sirena

A la luz de la luna que brilla en el cielo, sin obstáculos,

Escucho su zumbido y vibración, la voz que me llama a las aguas.

En mi barco donde todo está seguro, solo estoy yo,

Remando hacia el ojo reflejado de la noche,

Atraído por su voz que hace vibrar mi corazón.

Ella me llama y me consuela,

Ella me susurra y suspira,

Ella llora y se ríe de mí,Me habla y me derrite.

¿Dónde es? ¿Por qué no puedo verlo? ¿Me quedé ciego?

Debe estar frente a mí, puedo oírlo y sentirlo,

Como un toque húmedo en la piel de mi brazo,

Cada vez que el agua toca la madera de mi barco.

Me hace feliz y triste,Me repele y me atrae.

Ella me dice que me quiere y que yo soy para ella,

Quienes sean y lo que quieran.

Solo escucho las frecuencias altas y empiezo a temblar,

Quiero verla y tocarla.Me siento atraído como un imán de metal,

Un metal precioso que para mí sonaba como un arpa de oro.

Un golpe más de remos y estoy más cerca,

Miro profundamente en el agua y algo se mueve, es un fantasma,

Una figura tan perfecta mece mi barco,

Huelo su perfume salado, que me hipnotiza como una flauta encantada,

Me parece verla sentada en una roca a lo lejos,

Su cabello es largo y negro y cubre su pecho curvado.

Su forma de avispa me llama a fusionarse conmigo.

Me acerco a ella y escucho mejor su voz, su tarareo me agota.

Y me hace sentir necesitado, querido,

Con solo mirarla a los ojos mi alma queda asombrada.

Él extiende su mano y me llama con palabras melodiosas,

Siento que me olvido de quién soy, no tengo nombre ni personalidad,

Soy sólo de ella y quiero irme con ella.

Me levanto y parezco levitar,

Sonrío y un toque me atrevo,

Caigo en el agua fría y nado hacia ella,

Beso sus caderas mojadas y luego me siento a su lado.

Sus ojos son del color de las algas y el viento le mueve el pelo.

Con un zumbido final toma mi cara entre sus manos.

Son tan fríos, pero nunca había sentido una piel más caliente.

Envuelvo mis labios alrededor de los de ella y se me eriza el pelo.

Mi cuerpo parece convertirse en su altavoz,

Irradio como un faro iluminado que guía a los barcos.

Luego soy arrastrado suavemente hacia las profundidades en un beso que me une a ella.

Ella me atrae a su mundo, pero todavía puedo escuchar su canción.

Su cabello me envuelve como un capullo y puedo respirar.

Sus ojos brillan como dos velas,

Lo siento sonreír y tocar mi pecho, duele.

Nuestros cuerpos nos separan, quiero fusionarme con ella,

Con mi sirena hermosa, con este hada de las aguas.

Seamos un solo cuerpo y disfrutemos de su calidez.

Vengo a su mundo, estoy asentado en tierra firme,

Ya no hay agua a mi alrededor y el aire me inunda.

La veo sentada a mi lado,

Su cuerpo se vuelve humano y sus piernas crecen de la nada.

Está desnuda y su piel se está poniendo pálida por el frío.

La cubro con mi ropa y besos.

Me vuelve a cantar y solo quiero llorar,

Ella me vuelve a cantar y yo solo quiero reír,

Ella me está cantando otra vez y yo sólo quiero gritar.

Él me estaba cantando otra vez y yo sólo quiero cantar.

¿Hay algo más bonito?¿Hay algo más doloroso?¿Hay algo más pecaminoso?

¿Hay algo que pueda provocar tal adicción?

¡Canta mi sirena! ¡Canta para mi!

Mis oídos serán tus fieles esclavos,

Y mis ojos los más dignos espectadores.

Y luego cuando termines de cantar, voy a pedir un BIS,

Porque no soy suficiente, me tienes adicto a todo lo que eres.

Eres como una droga rara, como un gran regalo,

Me destruiste en minutos, este marine quiere besarte.

Me acerco a ella para darle un largo beso, pero ella desaparece en la niebla.

Incluso en mis brazos se evapora,

Y luego solo veo una cascada de estrellas en el cielo oscuro,

Dejándome sola, mojada, sabiendo que ella se ha ido.

Pero las noches son innumerables y todavía me siento y escucho,

Espero escuchar mi hermoso Canto de Sirena,

Llámame de nuevo y guarda mis mejores recuerdos como regalo.

Siempre estaré a la orilla del agua, esperando un zumbido.

Un canto armonioso, una luz de tus ojos,

O verte a la orilla del agua mientras me llamas hacia ti.

Sólo canta para mí otra vez, dame lo mejor,

Hazme verte más claramente.

Deja que tu canción llene este reino,

Lleno de impotencia y libertinaje,

Que se escuche sobre montañas y valles,

Para llenar las almas de los hombres y hacerlos como nosotros.

Sonríe hasta que el hielo se derrita y las paredes caigan al suelo,

Déjame volver a ti, ahí es donde pertenezco,

En tus caricias y besos que me hicieron olvidar quién soy.

Estamos tan bajos, estamos en el suelo,

Sólo tu canción puede darnos fuerzas y mantenernos en pie.