Una Sultana Especial

capitulo 14

-Sultana yo estaba en el jardín porque no podía dormir, solo era eso

-¿Y Mustafa que hacía contigo?

-Honestamente no sé porque el principe apareció en el jardín pero yo solo fui por falta de sueño

-Alev, se sincera, que si descubro algo equivocado entonces no importará que seas una Sultana, lo pagarás con tu vida

-Hablo con toda la honestidad del mundo, Sultána, además creo que al principe ya no importaría tanto

-¿Lo dices por la esclava que mi madre envío?

Efectivamente se sintió traicionada, la Sultána no devia decirle las cosas a Alev pero creyó que la Sultana no sabía y por eso no interfirio en eso, era muy incrédula si pensaba que pondría en primer lugar a una esclava que a su madre pero es que fue su única amiga.

-¿Usted lo sabia?

-Claro, mi madre me lo comentó y hace apenas unas horas me enteré

-Sultana usted me entenderá, el dolor que siento ahora es grande y yo..

-Alev, asi es el harén, no puedes simplemente evitar eso, así es como funciona y debes respetar sus reglas

-Pero es que yo-

-Alev, es necesario que sepas que así son las cosas, no puedes prohibirle al principe tener más concubinas, el trono necesita herederos y esa es la función de un harén

-Lamento mucho molestarla con esos temas, Sultána

-Esta Bien querida, mientras sigas las reglas del harén todo estará bien -la Sultána le sonrió- Ahora debes ir a empacar tus cosas que volverás a Manisa mañana por la tarde

-El príncipe no hablo sobre viajar..

-Es porque solamente tu regresaras, el Sultán tiene una campaña y se llevará a Mehmet junto con Mustafa y mi madre cree que es mejor que regreses a la provincia

-Claro.. como usted diga Sultána, solo una cosa antes de retirarme

-Dime, en qué te puedo ayudar

-Más que todo quería saber si usted me acompañaría a un paseo mañana por la mañana, para desayunar junto con los niños y estar en el aire fresco

-Sería una maravillosa idea, mañana por la mañana desayunaremos que también quiero ver a mis sobrinos

-Gracias por aceptar mi invitación Sultána, compermiso -antes de irse hizo una reverencia-

Al salir de sus aposentos canino unos instantes y durante los pasillos se encontró con una mujer que a pesar de ya ser algo mayor seguía una sonrisa muy hermosa, la Sultána Fátima.

-Sultana -hace una reverencia-

-¿Tu eres la mujer que llevo la Sultána Mihrimah a Amasia?

-Si, ¿Necesita algo de mi?

-No solamente que Cihan me habló mucho de ti y de su desayuno con la Sultana Mahidevran

Eso fue un recuerdo no muy apreciados por Alev, ya que tan solo recordarlo era saber que la madre del principe mayor del sultán era algo... Problemática

-Veo que ya recuerdas, fuiste muy irrespetuosa con una Sultana y madre del futuro Sultán

-Sultana, aún nada es seguro, el Sultán se prepara para campaña y eso solo demuestra que el es aún fuerte, además el orden de los príncipes no es importante, ya que solo llega el más fuerte

-Señorita.. ¡¿Que insolencia fue esa!?

Ante ese grito Alev no podia responder, seria castigada pero como que si fuera una salvación, los agas anunciaron a la Sultana Hürrem. Alev hizo una reverencia y vio como es que la pelirroja le ordenaba que se fuera del lugar, ella le hizo caso y se marchó.

Que gran alivio fue que la Sultana que menos esperaba
llegará justo en el momento exacto, pero no negaba que si fue lo único que pudo salvarla en ese momento, se detuvo cerca del pasillo y se notaba la discusión que las dos sultanas tenían.

Pero decidió que lo mejor sería ir a empacar cosas y asi mañana ya se irían más tranquilos a Manisa.

Durante el tiempo Alev preparo y empaco sus cosas, comió junto con sus hijos en sus aposentos y cuando ya era de noche ella leía mientras su hijo durmia y la princesa intentaba peinarse por si misma, cosa que no pudo y Natalia le explicaba como decía hacerlo.

Un Ağa entro a los aposentos de la Sultana y le dejo un papel, ella preguntaba que era pero él dijo que no sabía, diciendo eso se retiró y la rubia leyó lo que tenía.

“el balcón”

—Que..?- se acercó y vio lo mismo de siempre, el jardín a excepción de que se veía una vela con otro papel.

Así que salió de sus aposentos y le pidió a Natalia que cuidara de sus hijos, tenía curiosidad de saber que sucedía y llegó al jardín, vio la vela y luego abrió el papel.

“sigue el camino de rosas”

¿Camino de rosas? Fue lo que pensó y volteando a ver noto un rastro de pétalos de rosas, asi que como designaba el papel ella sigui el camino.

El rastro de pétalos terminó y vio que no habían más papeles tirados así que pensó que era una mala broma, estaba dispuesta a irse hasta que vio a una paloma con otro misterioso papelito enrollado en sus patas.

Se lo quito con cuidado para que no dañará al animal y cuando se lo quito empezó a leer lo que la paloma había traído.

“sigue a la paloma”

Cuando Alev noto vio a la paloma ya en los cielos volando y la siguió, tenía su cabeza hacia arriba para poder ver a donde se dirigía y cuando la paloma ascendía ella también con la mirada, hasta que...

—Auch.. -susurro-  Porque estás ahí para... -ella rubia noto bien a la persona y no era ni más ni menos que el príncipe Mehmet -Principe Mehmet...

—Alev -el puso uno de sus mechones atrás de su oído, observando bien la cara de su amada y mirándola como la obra más hermosa que pudiera existir- ¿no quedamos en que me dirías solamente por el nombre?

—Tiene razón pero..

cuando vio mejor noto una carpa y unas mantas, también había comida y unas cuantas velas, el lugar era presioso y estaba muy bien decorado.

—¿Su alteza..?

—Este día me dijiste lo que quizá nunca ubieras dicho, tu sufrimiento como esclava desde el día en el que te trajeron de muy lejos, yo nunca sufri algo así gracias a Allah y además no solo porque eres la madre de mis hijos te amo, te amo por ser eso, también te amo porque confío en tu lealtad, te amo por tu carisma, te amo porque Alev, tu eres mi sol, la llama que calienta mi corazón y que amo tanto

—Mehmet.. -las lágrimas estaban saliendo poco a poco de los ojos de la chica, esas palabras le recordaban a Manisa-

—Quiero pasar contigo uno de mis últimos momentos antes de que parta a la campaña, quiero que estemos los dos juntos esta noche

Ella sonreía y el la besó, un beso muy tierno y dulce, cenaron y observaron las estrellas, platicaban y luego cuando el cansancio llegó ni se dieron cuenta cuando ya estaban durmiendo y amanecieron en ese jardín.

Cuando despertaron Alev se armó debido al desayuno que tenía planeado con la Sultana Mihrimah, el príncipe rio y la besó para que estuviera más calmada.

—Entonces ve y arreglate, no queremos que mi hermana piense que eres impuntual

—Gracias Mehmet

La Sultana hizo una reverencia y se marchó, sin antes darle un beso al príncipe.

Holaaa! Esta vez sí que actualice más rápido 😅, espero poder tener tiempo para poder seguir actualizar. En fin capítulo 14 completado 🌷.