Cap 11

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En la habitación estaba Inumaki y Megumi conversando mientras que la pequeña Gojo ya hacia dormida desde hace unos minutos en los brazos del peliblanco quien estaba sentado en una reposera que se columpiaba. El chico bajo cuidadosamente a la niña en su cuna y dio una señal que iría a cambiarse para poder pasar la noche, el peli azul lo miro con una sonrisa y asintió alegremente.

Al entrar a su habitación su corazón estaba muy acelerado, en su mente solo vino una imagen mental de lo lindo que sería tener una familia con la señorita Gojo y que sus hijos se parezcan a ella. En su rostro se formó una gran sonrisa mientras se ponía el pijama. Aprovecho al volver de llevar agua caliente en termo para poder calentar la leche por si se despertaba.

-Te dejo a cargo un momento.

-Shake.

-Cualquier cosa solo llámame y vendré rápido a ayudarte.

Dijo el peli azul para luego desaparecer de la vista de Toge quién se recostó en la cama a un lado de la niña, aprovecho que aún faltaban tres horas para que se vuelva a despertar y cerró sus ojos quedando dormido abrazando a la bebé,pero no duraría mucho ya que unos llantos lo alertaron y se levantó rápidamente miró la hora y aún no habían pasados ni dos horas que la niña había tomado su leche. La cargo y empezó a pasearse por toda la habitación pero ella seguía llorando, de pronto pensó y se acordó del pañal, este reviso y efectivamente el pañal estaba lleno. Mientras la tenía en brazos busco las toallitas y pañal, también una pijama más cómoda y una crema para paspaduras. Cuando tuvo todo a su alcance fue por un recipiente con agua tibia y empezó a cambiar el pañal, para luego enjuagarla con agua y vestirla. Está lucía un hermoso pijama de dinosaurios con su respectiva gorrita. Luego de guardar todo, la tomo en brazos mesiendola de nuevo pero no dormía. Llegó Megumi y ayudo a dormirla cosa que fue todo un desafío con ella.

-Ya quisiera ver cómo será cuando sepa gatear.

Hablo Megumi con la niña en brazos mirándolo con el seño fruncido, Toge empezó a reír cosa que hizo que lo mirarán un poco extrañado, este negó con la cabeza y escribió en su celular que se había imaginado toda la escuela con protectores de enchufes y más.

1:30 am.

Luego de tanto lloriqueo al fin se había quedado dormida, ahora eran los dos chicos quiéned discituan de quien se dormiría y quien haría la guardia pero fue todo en vano, porque aunque Megumi hubiera ganado, al final terminaron dormidos los dos. Por suerte Toge tenía el sueño ligero por lo que no se preocupo tanto si algo pasaba, el siempre lo escuchaba o veía.
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Shoko azotó la puerta encontrándose a los tres dormidos, la niña con su peluche de dinosaurio y los dos muchachos abrazados, Megumi tenía la pierna arriba del abdomen de Toge mientras esté abrazaba por la cintura al otro, no perdió tiempo y les tomo varias fotos. Luego de reírse un poco fue por un poco de ropa y leche y cargo todas las cosas en una pañalera. Al tenerla lista cargo a la niña aún dormida en brazos y cerro la puerta con agresividad, sin antes dejar un mensaje a ambos chicos dándoles las gracias por su ayuda y dejándole un pequeño recuerdo.

Buenos días Itadori. Ya tenemos trabajo!

-Buenos días Shoko..

Decía aún un adormilado pelirosa quién salía de su cueva, se notaba que se habia duchado lo mad rápido posible ya que tenia los shorts al revés. La chica solo rió y no dijo nada, dirigiéndose así al con consultorio donde Shoko debía ordenar algunos expedientes y revisar un cuerpo.

-Ire a preparar la leche, cuida bien de Gabi si?

-Esta bien, mientras yo preparare su ropa para el baño.

-Muy bien pensado Itadori. Iré a venir..

La chica salió tranquilamente a calentar la leche, no se preocupo si está estaba muy caliente ya que primero la bañarian por lo que se enfriaria. Mientras el pelirosa sacaba un vestido mini de color blanco con monos rojos en las mangas y unas calcetitas a juego, una vez echo esto, la bebé empezó a llorar al no ver a nadie ya que la dejaron sola en el despacho. Itadori corrió hacia ella y en un abrir y cerrar de ojos Sukuna se había apoderado de su cuerpo.

-Tranquila niña. Ya tu padre favorito está aquí.

Cargandola en sus brazos mientras Shoko reía desde la puerta, si Satoru llegaba a escuchar eso seguro lo decapitaria. La bañaron entre risitas y llantos para luego dejarla bien bañada en brazos de Sukuna mientras le daba su leche.

-Ya debes dejar salir al joven..Yaga está muy cerca.

-Si,si lo que digas. Solo le daré todo el biberón y luego volveré a desaparecer.

-Dime. Cómo te sientes?

-Que?  No entiendo tu pregunta.

-Pues si, como te sientes al ver de nuevo a tu bebé, a tu sangre, a tu carne, a tu clon?

-Oh ya veo por donde vas, la verdad que siento como si aún viviéramos en Brasil. Aunque los altos mandos nunca supieron yo estuve en carne propia hasta unas semanas antes que todo el clan sano fuera masacrado, ya que mi idea era usarla como contenedor...para volver a la vida y crear el caos.

- Y tu mujer lo sabía?

-No, nunca le comenté sobre eso, la noticia de su embarazo fue una sorpresa, hasta que pensé que sería buena idea de tener como contenedor a aquel engendro, imaginé que sería niño y de ser así me hubiera transpasado a los 3 meses de nacido, pero al ver que era una niña debia esperar 3 meses más ya que debia asegurarme que tuviera energia maldita, ya sabes, cuando una maldición y un hechicero se juntan muchas veces los hijos no presentan energia maldita y si no era asi no podia transpasarme.

-Que te hizo cambiar de opinión?

Se levantó poniéndole seguro a la puerta, está reparación de maldición le estaba siendo muy entretenido.

-Ella! -señalo a la niña que estaba profundamente dormida de nuevo- imagínate estar seis meses con tu familia, ver cómo cada día tu hija aprende cosas nuevas, como sus olluelitos se marcaban cada vez que sonreía. Al llegar el día del transpaso me arrepentí, yo realmente le agarre cariño a mi hija. Por lo que decí sacar el dedo del contenedor donde me encontraba y se lo puse a ella, así dando por vencido.. claro hasta que esté mocoso sirvió de contenedor.

Comentó con un tono burlesco dejando salir a Yuuji quién se asustó al sentir algo en brazos casi dejándola caer, Shoko le tiro un libro agarrándola, el azabache se quejó del dolor pidiendo disculpas, su mañana fue un tanto productiva ya que la niña presentaba cólicos que hacía que llore hasta más no poder, se asustaron al ver que trago aire y no lo soltaba más, empezó a ponerse morada cuando el chico la cargo y le soplo haciendo que le vuelva el aire, almorzaron por turnos mientras caminaban ya que recorrieron toda la escuela para que la niña se tranquilizara. Hasta que al fin dieron las 12:00pm.

-Donde está la niña más linda del mun..

-Tomala!

-Te la regalo!

-Llevatela.

Decían la señora y el muchacho extendiéndole la pañalera y a la bebé en cuestión. Ya era hora de que las chicas sufrieran.

𓂀𝕁𝕦𝕤𝕥𝕖 𝕡𝕠𝕦𝕣 𝕥𝕠𝕚𓂀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora