𝐄𝐱𝐭𝐫𝐚 𝟏

151 26 1
                                    

¿Saben cómo era sentir que estaban en una montaña rusa de emociones tan distintas a la misma vez?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¿Saben cómo era sentir que estaban en una montaña rusa de emociones tan distintas a la misma vez?

¿No?

Pues era justo como Dong Min se sentía en ese preciso momento.

Hoy se había llevado a cabo la boda con el amor de su vida, todo fue tan magnífico que no tenía palabras para describir como se sentía ser Lee Dong Min de Moon o mejor dicho Moon Dong Min.

Todo había sido mejor de lo que alguna vez soñó, y ahí estaba frente a su habitación admirandose como por doceava vez en el espejo, su traje blanco haciéndole notar sus espectaculares curvas, mostraba sus marcadas clavícula. Él mismo se sorprendía de la belleza pura y sensual que poseía por naturalidad.

Era su noche de bodas ¿Saben lo que significaba? Por su puesto, les tocaba consumar su matrimonio y era la manera más pura en la que podían demostrar lealtad a las palabras dichas frente al juez en el registro civil. No podían demostrar de manera más perfecta y personal, el amor que se tenían el uno al otro que haciendo el amor.

Bin quién lo observaba con total admiración desde la orilla de la cama, dijo: -Bebé, te estoy esperando— Dong Min asintió y se giró en sus talones haciendo el amago de empezar a deshabrochar los botones de su saco pero su esposo se lo impidió levantándose y quitando sus manos de sí mismo.

-¿Qué ocurre?- preguntó dudoso.

-Quiero hacerlo yo. Quiero que tú solo disfrutes y me dejes demostrarte que todo lo que yo siento por ti es lo más puro y sincero que he sentido alguna vez. Déjame por favor ser quien esté a cargo al menos por hoy.

Al castaño no le faltó asentir porque el azabache ya estaba por desabrochar el último de los botones del saco para continuar con la camisa manga larga. Las prendas superiores las deslizaba suavemente por la tersa piel de su pareja como si fuera una reliquia que con un mínimo esfuerzo se podría romper y él no quería eso.

Le incitó que se recostara en la cama gigante detrás de ellos y así lo hizo, ambos estaban un poco nerviosos pero no era la primera vez que lo harían, eso estaba más que claro. Cuando Dong Min ya se encontraba acostado, Bin se quitó su saco oscuro junto con su camisa de tonos más claras y zapatos conjunto con sus medias y se posicionó encima del castaño rozando sus pechos descubiertos sin causarle mayor peso.

Empezó dejando un camino de besos húmedos desde sus labios, bajando por su marcada mandíbula, cuello y se detuvo en su pecho al hacer mínimo contacto con uno de los botones de gomita de su precioso, sabía que ese era uno de sus tantos puntos débiles y lo aprovecharía al máximo.

Absorbió el izquierdo y empezó a otorgarle leves lamidas a la vez que lo succionaba y jugaban con el otro con ayuda de sus dedos. La mano que tenía desocupada se encargaba de masajearle suavemente los huesos de la cadera, aveces haciendo el amago de introducir sus dedos por el borde del pantalón de vestir que cargaba.

obssesivo |✾| Binwoo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora