- 𝘽𝙪𝙩𝙩𝙚𝙧𝙛𝙡𝙮 𝙚𝙛𝙛𝙚𝙘𝙩 -
Donde Kaitlyn Burnett, quien es considerada la mejor piloto de su generación y Jedi de apenas 23 años, decide ayudar a su maestro Obi-wan Kenobi en la búsqueda de su antiguo padawan y mejor amigo, entrando de en...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—𝐂𝐡𝐚𝐩𝐭𝐞𝐫 𝐭𝐰𝐨
POV; Kaitlyn
ME SUBO A MI NAVE NO SIN ANTES lanzarles un beso a las dos personas más importantes de mi vida en este momento. Sin duda esta misión será complicada, no solo tendría que infiltrarme y hacerne pasar por la "nueva" piloto, y vivir el aquel espantoso lugar, sino que también tendría que seguir cada movimiento de Darth Vader, sería casi imposible que no se dé cuenta de mis intensiones y del porqué estoy ahí, de igual forma y sabiendo todos los riesgos que correré, cumpliré con mi cometido, no pienso regresar sin él, será dificil, pero lo haré.
Luego de despedirme, me adentro en la nave para ir a sentarme del lado del piloto, enciendo los motores, presiono algunos botones y preparo las coordenadas para luego entrar al hiper-espacio e ir hacia la estrella de la muerte.
Suspiro con pesar.— Si que será un viaje largo.— digo para mí misma.
Tras haber viajado durante aproximadamente 5 horas, veo en el holo-mapa que ya estoy llegando a mi destino, y automáticamente mi nave sale del hiperespacio, a lo lejos puedo puedo observar a la tan famosa estrella de la muerte, no imaginé que fuera tan inmensa, tiene casi el tamaño de una estrella. Su nombre lo justifica todo. Suelto una pequeña risa al tener ese pensamiento tan obvio.
A medida que mi nave se va acercando cáda vez más a la estrella de la muerte, mis nervios empiezan a florecer, siento los latidos martillando en mis oídos, el corazón en la garganta y que mi estómago me saldrá por trasero en cualquier momento. Dirijo mi nave a la entrada del hangar y hago que aterrize, me levanto del asiento del piloto, agarro mi bolso para colgarlo en mi hombro, en el cual ahí estaba mi sable de luz, ropa y productos de higiene personal. Cruzo la puerta de mi nave para pisar el suelo del que ahora sería mi nuevo hogar.
Al salir de ella, se me acerca un grupo de Stormtroopers, quienes estaban apuntándome tiernamente con sus hermosas armas, obviamente estaban haciendo su trabajo, ¡Pero que groseros!.
—¿Quién eres? ¡identifícate!, seguro eres parte de esas escorias rebeldes, ¿verdad?—uno de los Stormtroopers levantó su arma apuntando a mi rostro, lo cual levanto los brazos a los costados de mi cabeza.
Maldito arrogante, ¿quién se cree que és?
—¡Oye! ¡¿esa es la manera de recibir a nuevos empleados?!—hago una mueca ofendida.
—¡¿De qué carajos estás hablando, niña?!—parecía confundido y fuera de lugar
—¿En serio no les dijeron?—enarqué una ceja preguntando obvia.—Soy la nueva piloto,—chasqueo la lengua— la mejor de la galaxia de hecho, soy Kaitlyn Burnett.— dije de forma arrogante y con una sonrisa socarrona.— Asi que caballeros, si me disculpan tengo que reportarme con el comandante Piett.—doy un paso, pero uno de ellos se me adelanta.
