El Corazón de Camila es destrozado en pleno debut, el príncipe heredero le había prometido amor, pero ha anunciado a otra como su prometida, juliana, la hermana de Camila quien siempre la ha despreciado por ser hija de una concubina. Camila ahora de...
Camila mira a las mujeres y puedes ver qué las otras dos no se ven muy contentas, no le molesta que la Archiquesa tenga concubinas, sería mejor si la desecha y no la mira mas, no quiere saber de amores y menos hombres o mujeres, está tan dolida, fue traicionada por el hombre que amba tanto, confío en el sus palabras, sin embargo, a la hora de la verdad ella era inferior, la desprecio por su origen, no quiere nada después de esto, no perdonará a Nicolás por lo que le hizo, jugaba con ella de la peor forma de la unico que se siente orgullosa es no haberle entregado su pueeza, se habria arrepentido en el alma.
El desayuno fue tranquilo, al menos de apariencia, Anabela era la más conversadora, en cambio, camil y Sofora estaban con cara de limón, miraban a la belleza que tenían en frente y hasta desconfianza en sus miradas, mientras terminaba, una guapa castaña entro al lugar, vio la situación y sonrió y divertida, pareció que había una lucha de Titanes.
- Bueno Días a las concubinas, y buen día a Lady camila, me honra conocer a la prometida de la Archiquesa, espero que la haya recibido bien - dijo educada mientras que camil dió una carajada burlona.
Todos voltearon a verla, camil se limpio la boca de forma elegante, no está contenta con esta situación, sabe que cuando llegue la Archiquesa ellas seras sacadas de la mansión, solo espera que esa niña salga lo más rápido.
- No creo que ella necesite ser bien recibida es solo un acuerdo, pronto saldrá de aquí ademas, sus privilegios se acabarán pronto, no se por que tanto escándalo, las otras no eran tan altaneras - dijo ella para retirarse del lugar sin mostrar ningún respeto por Camila.
Anabela estaba molesta, ella más que nadie pudo ver qué esa niña es especial, no por nada se ha quedado en la mansión, otras prometidas eran llevadas a otras casa mientras partian.
- Camil, ven aquí y disculpate, no puedes tratar así a la prometida de la Al...., Archiquesa - dijo indignada mientras que la sindicada no se digna a voltear y salir del lugar.
Camila dió un largo suspiro, ni bien llega y ya tiene el rechazo de las concubinas parece que tendrá que pedir que la envía a otras casa para tranquila.
La guerra fría se había declarado, Camil y Sofora ignoran a Camila y Ally, ningúna las trataba bien, pero con el personal y María era diferente, las doncellas estaban enamoradas de la gran Duquesa, aunque no se ha casado aun, sabe que ella es la elegida, no ha Sido enviada a ninguna parte, así que la cuida como otro.
Camila y Ally empezaron a estudiar sobre los temas del Archiducado, aunque hay cosas que no entienden, terminos como Mate, Omega, Delta, Gamma, Beta y el que aparecen en todo lado, la palabra Alfa y su Luna, Camila no le tomo atención, le preguntara a la Archiquesa cuando vuelva.
Unos días después, camila debía ir a la ciudad que quedaba cerca, solo unos 5 kilómetros, Anabela quiso acompañarla, pero Camila le dijo que estaría bien, María fue con ella para enseñarle el lugar y debian ir a una de las casas del asilo para niños que habían perdido a sus padres, sería parte de las responsabilidades de Camila la cuál estaba encantada de ayudar, le encantaban los niños, lo cual sería una ventaja para lo que viene.
María estaba feliz, Camila era un ángel, era realmente destacables, si embargo, aun no podía identificar su naturaleza, pero pronto se revelaría la identidad de Camila quien ocultan su esencia totalmente.
Ya había anochecido, María no tenía problema con eso, nadie se acercará al carruaje de la Archiquesa, así que después de que los niños cenaron con Camila la despidieron con besos y abrazos.
Ambas volvieron sonriente y conversando sobre la hermosa tarde con los niños, pero de repente, sintieron como los caballos aumentaron la velocidad de forma abrupta, cuando vieron para afuera, había tres lobos enormes fuera del carruaje asediando a los caballos y sacándolos del camino el cochero trataba de contener a los caballos, pero los lobos tenía dominados por el miedo.
De repente sintieron como todo daba vueltas, el carruaje se había volcado, Camila trato de sujetarse lo más que pudo, cuando todo termino, María tomo a Camila con delicadeza para sacarla del lugar, afuera se escuchaban los gruñidos, María apretó la mandíbula furiosa, estaba realmente molesta, el atrevimiento era demasiado, más ella estaba el cochero malherido entre los matorrales.
- Lady Camila, no se separe de mi, vea lo que vea, no se aleje de mi - dijo María tomándola de la mano, pero lo que vino después.
Unos de los lobos atacó a María por la espalda mientras camila cae hacia un lado, el animal pronto vio a Camila desprotegida y quiso atacar, pero maria en un movimiento rápido sujeto al animal.
- Camila corre, corre a la mansión - dijo tratando de no soltar a la bestia.
Camila corrió lo más rápido que pudo, pero entre tanto revuelo estaba desorientada,no podía encontrar el camino, sentía los pasos de los lobos muy cerca, sus gruñidos eran aterradores, ella llego al pie de un gran árbol, ya no daba más no podía correr más sus lágrimas salía como lluvia así, en medio de la nada siendo devorada por animales salvajes o más bien lobos enormes que parece caballos mas que lobos.
Los animales se acercaron a la niña, quien al verlos se asusta tanto que no podía correr o gritar.
Los animales estaba tan cerca que ella podía ver sus ojos y sus terribles mandibulas, así que Camila se dió la vuelta abrazandose al gran arbol, sus lágrimas mojaron el viejo y arrugado tronco, ella solo pidió desde el fondo de su corazón.
- Ayúdame - susurro en medio de la noche.
Los lobos se acercaron tanto y cuando un lobo café estaba a punto de morder su delicado brazo.
Flazzz.
Una larga y fuerte rama impacto contra el animal enviándolo lejos, otra rama dió en otro de los animales dejandolos adoloridos a ambos, el tercero retrocedió mirando al viejo árbol que crujía y chirrio en medio del silencio del lugar, su crujidos era como una conversación que no tardó en ser respondida por los árboles que estaban a su alrededor.
Los enormes encaliptos y sauces que se encontraban ahi, atacaron con sus largas y viajas ramas a los lobos causándoles heridas en sus pelajes, eran como lastigos que destrozaban su piel al impacto.
Camila al voltear y ver a los animales huyendo se desvaneció desmayandose por lo ocurrido.
Del suelo, entre las hojas, una raíz salió delicadamente acariciando el rostro de la niña, mucha más raices salieron haciendo una pequeña burbuja a su alrededor, como en un pequeño domo, flores salieron del suelo brindado sus pétalos para que la niña descanse mientras es protegida por el viejo árbol que a sus pies ha creado un pequeño fortaleza para que la inocente joven descanse bajo su vigilante cuidado.
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