BORING MOVIE.

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─bueno pasaron como mil horas de viaje, pero llegué.─me reí cuando me abrió la puerta, el sonrió levemente.─ me recibe este lindo de m... nublado.

─uhm, vete acostumbrando al color gris del lugar.─agregó haciéndose a un lado para dejarme entrar, yo respiré profundamente, comprobando un delicioso olor en el aire.─ estaba cocinando antes, ¿comiste algo?

─no, no comí nada por si alguien me tenía pena y me daba de comer.─argumenté haciendo que volteara a verme con una sonrisa ladeada─ les funciona a los gatos...

el se rió pasando por mi lado hasta la iluminada cocina, que se veía sacada de uno de esos programas de transformación de casas que yo adoraba ver cuando no tenía nada que hacer.

─estoy de hecho bastante sorprendida de que sabes cocinar.─murmuré comenzando a caminar detrás de él, dejando unos cuantos pasos entré el y yo.

él me miró sobre su hombro con una sonrisa ofendida y yo me reí por lo bajo, enfundando mis manos en los bolsillos de mi chaqueta de cuero.

─¿y como crees qué me alimentaba? ¿hm? ─preguntó como si fuera obvio y yo puse uno de mis dedos sobre mi labio, pensando al respecto.

─probablemente como cualquier otro famoso...─murmuré y el se volvió hacía mi con una mirada curiosa─ con una cocinera sexy que les cocina desnuda...

el comenzó a reírse de forma inesperada, haciendo que tuviera que volver la vista hacia la cocina, apagando la olla. él suspiró molesto de mis chistes.

─estoy muy interesado en conocer que clase de famosos conoces.─murmuró volviéndose hasta mi con la olla entre sus manos, obviamente con unos guantes de horno de por medio.

─oh, bueno si yo tuviera más fama que presumir probablemente así lo haria.─murmuré como si fuera bastante claro─ pero no estoy segura de si lo pondría desnudo a trabajar, sería algo descuidado de mi parte... podría desnudarlo después.

el me miró como si todo lo que dijese fuera una completa idiotez trás otra... probablemente cuando estaba cerca de él solo decía lo primero que se me venía al cerebro.

─tengo demasiadas preguntas.─murmuró dejando la olla sobre la mesa con cuidado, haciéndome notar que habia preparado la mesa para dos, de forma bonita.─ y no estoy seguro de querer escuchar las respuestas...

─si, será mejor que no hagas demasiadas preguntas.─concorde con él, sentándome en mi lugar.

una vez terminamos de comer, me dediqué a hablar sin parar hasta que él me ofreció ver una película algo antigua que había descubierto y me había dicho que había amado. yo accedí simplemente porque queria sentarme a su lado en el sofá, pero el me dejó ahí en la sala sentada mientras lavaba los platos con tranquilidad.

yo miré con resentimiento la tele hasta que me dí cuenta que realmente... no estaba prestando atención a la pelicula, así que parpadeé varias veces y preste atención.

una vez pasaron tantas cosas para que mi cerebro se volviese una masa moldeable y enredada, cillian ocupó el asiento de mi lado, dejándome con los brazos cruzados mirando a la pantalla como si ver él final fuera a responder mis preguntas más existencialistas.

de hecho él quiso explicarme algunas cosas pero terminé por colocar una mano sobre sus labios sin siquiera mirarlo, mientras hacía una mueca para callarlo. moví mi vista de un lado a otro buscando por pistas que pudieran ayudarme a entender que sucedía en realidad, pero terminé por suponer que me había perdido de un detalle... o que tal vez no lo mencionaban.

negué con la cabeza mientras los créditos rodaban hacía arriba, y lo miré con un rostro tan asqueado.

─¿que carajo?─susurré y el sólo se rió, volviendo con molestía la mirada a la tele─ cillian, nada de lo que ví tiene sentido.

─¿quieres verla una vez más?─preguntó como si fuera una idea tentadora y yo lo miré molesta, asintiendo.

jamás existió una película que no hubiese entendido, porqué por lo general podía inventar una explicación absurda y las personas asentian como si tuviera razón. pero parecía que nada de lo que acababa de ver tenía una razón o una connotación. no importa que tan absurda mi idea fuera, nada hacía sentido...

cerré los ojos un momento mientras miraba la pelicula, con el cansancio pegándome de lleno de nuevo. esta vez con más fuerza, ya que ahora tenia el estómago lleno y estaba en una casa calentita que olía a una especie de vainilla y canela... eran mis condiciones ideales para soñar una película mucho mejor a la que mirábamos.

HEARTLESS | CILLIAN MURPHY Donde viven las historias. Descúbrelo ahora