"No es solo una pintura"
Lee Minho, un chico que usa el arte para expresar sus sentimientos, decide pintar el retrato de un chico que lo visita en sus sueños sin saber lo que ocurriria despues...
Bang Chan, un australiano decide recoger en su casa...
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Minho se tomo un momento y hablo. - Yo... Desde muy pequeño sufrí problemas para expresarme...
Jisung quería acercarse pero su madre no lo dejo.
- Yo... Es cierto Jisung... Te hice daño cuando eras pequeño... Pero no sabia... No sabia que eras tú
>>Desde pequeño comencé a tratar mal... Yo... Expresaba mi rabia a golpees y gritos... No lo podía controlar...
- ¿Y como se que ahora no lo harás?
- ¡Mamá basta! -grito algo fuerte Jisung. -Deja de termine de explicar.
- No lo defiendas hijo él...
- Él me ha cuidado, ha estado para y es la persona que amo, así que te pido que seas más consiente con él
El mayor sonrió levemente por las palabras de su novio, eso le dio la fuerza de seguir.
- Logre controlarlo gracias a mi madre, ella me enseño a expresarme a través de pinturas...
- ¿Y crees que con esa excusa voy a confiar en ti?
- ¡Ma!
- ¡Hijo entiende! El esta mal de la cabeza
- ¡No lo esta! Deja que termine
El mayor no sabia que más hacer para que le podía mostrarle para que Le creyera... Su foco se encendió.
- Sígame. -dijo guiándola a su cuarto.
Los Han lo siguieron y entraron a su cuarto.
Minho abrió su baúl y saco las pinturas dentro de ella.
- Estas son la mayoria de pinturas que llevo a lo largo de mi vida. - tomo una con un gran girasol y leyó lo que escribió atrás. - Hoy estoy muy feliz por que pase los exámenes y mis esfuerzos valieron la pena.
Tomo otra, esa tenia a dos chicos degoñados y leyó. -Hoy me tope con los brabucones que me caen mal, me siento con mucha rabia, por eso dibuje esto, pero prometo no llegar a hacerlo realidad.
Y así siguió con otras pinturas hasta que vio la cara de la mujer sumida en vergüenza, él chico le revelaba algo propio de él con tal que le creyera.
Ella sabia un poco sobre que la madre de Minho se comprometió a que no sucedería algo con el chico otra vez.
Se sentía horrible, en acto a su desesperación, crítico y culpo a alguien que sin saber como era, solo por su pasado que ni del todo conocía.
