"Pasajeros con destino a Santa Bárbara, favor de abordar por el tren 2".
Era lo que sonaba en la estación de trenes, al parecer el castaño saldría de viaje, y claramente le tenía que llamar a su amigo.
— ¿Cómo estas Aquinin? - Dijo el más bajo al otro lado la línea tomando un café.
— ¿Estás ahí?
— Diablos, no.
— ¿Cómo que "diablos, no"?
— No haré eso.
— Claro que sí.
— Claro que no Diego, allí solo habrá gente vieja.
— Sí pero tú dijiste que ibas a ir y por eso yo voy a ir.
— Es por eso que yo llame con anticipación diciendo que tenía diarrea y no iría.
— Duxo no me estés jodiendo, no conozco a nadie en ese lugar.
— Mejor para ti, sirve que conoces a una abuelita ardiente como la de Locochon.
— Voy a colgarte.
— Diviértete. - Dijo burlón para luego escuchar el típico sonido de cuando cuelgan la llamada.
Aquino buscaba el asiento que le asignaba su boleto y lo encontró, pero no solo encontró su asiento, también se encontró al chico que varias veces le hizo sentir amor y miseria. Según Aquino le miraba de forma disimulada, que claramente era 0 disimulación y por ser indiscreto el azabache lo miro. El castaño entro en pánico internamente y se hizo como el que no vio nada; el azabache por su parte se quito los audífonos y fue a saludar a su amigo.
— Aquino, ¡hola!
— Hola Nat... que gran sorpresa verte aquí, ¿También vas a la fiesta de Rivers?
— Si, trabajamos juntos la mayor parte del tiempo, me ofendería si no lo hubiera hecho, esa chica es tan dulce me encanta como es.
— La verdad si lo es.
— ¿Y cómo has estado? Te escribí y nunca recibí una repuesta tuya.
— Perdón, es que pasaron varias cosas y había mucho trabajo.
— Entiendo, bueno iba a conseguir un café no se si quieras venir.
El resto del camino se la pasaron hablando como si nada hubiera pasado, Aquino se volvía a sentir lleno de vida cuando estaba con Natalan. Le llego a odiar muchas veces pero sabía que su odio no era verdad, amaba al chico frente a él y amaba todo del contrario.La tarde fue entretenida, el ambiente de la boda fue agradable para todos, en especial para Aquino ya que su felicidad había vuelto, pasaron un rato hablando, jugando con los niños de la boda, hasta que llego el momento de atrapar el ramo, el cual cayo en las manos del azabache, Aquino al verlo con el ramo se imagino de nuevo una vida con él. Las horas pasaban y llego el momento de regresar a sus casas, el castaño no se puso triste por dejar de ver a Nat, pues esté lo invito a una fiesta en su nuevo apartamento y claro que iría.
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𝟓𝟎𝟎 𝐃𝐀𝐘𝐒 𝐎𝐅 𝐍𝐀𝐓𝐀𝐋𝐀𝐍 // 𝘈𝘲𝘶𝘪𝘯𝘰 𝘹 𝘕𝘢𝘵𝘢𝘭𝘢𝘯
Fanfiction"Esta es la historia de un chico que conoce a otro chico. Pero no supongan nada, esta no es una historia de amor." Aquino es un escritor de tarjetas de felicitación, se sorprende totalmente cuando su novio, Natalan, repentinamente lo abandona. Él an...