Misión: divorcio ; kookmin au.

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Jimin se removió un poco tras sentir unas patadas en su vientre. Abrió los ojos poco a poco hasta que una risita salió de sus labios porque su bebé había despertado muy activo esa mañana. Jimin podía sentir a su hijo con mucha más transparencia que antes, por lo que no pudo evitar acariciar su vientre un par de veces, intentando calmarlo.

—Estás muy entusiasmado hoy, ¿no es así, cariño? —murmuró—. ¿Es por el cumpleaños del tío Jin? ¿Es eso?

El bebé pareció calmarse tras escuchar su voz, por lo que Jimin solo pudo mantener su risa. Se acomodó en la cama antes de tomar asiento. Su acción alertó a Jungkook, quien hasta entonces había estado durmiendo a su lado, causando que comenzara a despertar poco a poco.

—¿Ocurre algo, amor mío? —preguntó, mientras se acomodaba en la cama también para tomar asiento—. ¿Por qué te has levantado tan temprano? No parece ser más de las ocho de la mañana.

—Nuestro bebé pateó —respondió Jimin, señalando su vientre—. Está entusiasmado el día de hoy.

—¿Será que ya se acostumbró a la presencia de todos y por eso quiere estar cerca de ellos otra vez?

—Puede ser por esa razón —comentó el omega, al mismo tiempo que Jungkook se acercaba para acariciar su vientre—. O puede ser que está entusiasmado por el cumpleaños de Seokjin. Es hoy, ¿recuerdas?

Jungkook compartió su sonrisa durante un buen tiempo. Antes se hubiese sentido triste por la alegría de su amado, conociendo el destino de Seokjin. Pero tras hablar con Taehyung, esa idea se había desvanecido. Porque el alfa se encontraba vivo y a salvo.

—No hemos podido contactar con él para invitarlo a almorzar, pero sé que estará feliz con lo que desees hacer para él.

—Seokjin era el más entusiasmado con nuestro bebé, Kook —le dijo—. Así que espero pueda venir a visitarnos antes de que dé a luz. Sería bueno si está con nosotros en un momento así.

—Por supuesto que sí, cariño. —Jungkook besó su frente con dulzura, antes de ponerse de pie para ayudar al omega a salir de la cama—. Pero, antes de pensar en eso, deberíamos alistarnos para desayunar. Porque estoy seguro de que Taehyung no estará muy contento con nosotros si tardamos más de lo debido.

—Tae está tomándose el papel de anfitrión muy en serio —comentó Jimin, riendo—. Aún cuando es nuestro invitado.

—Bueno, mientras tengamos a tus hermanos quedándose con nosotros en esta casa, Taehyung tomará las riendas por completo. Así que solo debemos obedecerlo.

Jimin asintió a sus palabras antes de ser llevado al baño por el mayor. Entre risas y conversaciones se asearon para bajar al primer piso, donde todos los esperaban.