Good hands | taekook

O6: Do it

Silencio.

— Ya lo sabía.— mencionó Taehyung luego de haber procesado aquella confesión, aunque por dentro este revuelto de emociones, por fuera se mostraba de los más normal y confiado con su menor.

— ¿Entonces por qué lo dudaste?

— Pues, por nada.— para librarse de aquello, volvió a acariciar las piernas de Jungkook y se fue acercando más a él.

Sus acciones demostraban mucho interés hacia su amigo, quizás ya se haya dado cuenta.

— Te gusta tocarme mucho hyung.— habló Jungkook guardándose una sonrisa.

— Y a ti te gusta que lo haga, aquí ganamos los dos, pequeño.— respondió empezando a bajar el pantalón de Jungkook y este solo se dejó sin rechistar.

Se supone que Jungkook vino aquí por algo en específico y se estaba desviando bastante de su propósito.

Pero no iba a pedir que se detenga.

Es más, con esto también podría comprobar algo, ¿no?

Taehyung pronto se colocó encima de él con cuidado, Jungkook entrecerró los ojos al sentir como su mayor empezaba a besar su cuello con sensualidad y de manera lenta, tan placentera.

Pudo sentir como las manos ajenas iban recorriendo su cintura por debajo de su camiseta, tocando su cálida piel como lo más deseoso que había, sentirse acariciado por Taehyung era como sentirse en el mismo cielo, tan correcto, tan perfecto.

De sus labios solo podían salir jadeos y soniditos cortos de placer, mientras que del contrario se escuchaban chasquidos al retirar sus labios de la piel de Jungkook e ir bajando más.

Contrario a lo que pensó el menor, le fue inesperado sentir unos labios sobre los suyos empezando a moverse, a lo cual a los segundos se acopló al ritmo y continuó con aquel beso.

Su hyung era muy buen besador, de eso no tenía dudas.

Le gustaba sentirse así.

Le gustaba mucho tener toda la atención de Taehyung solo para él.

— ¿Te confieso algo? También me gustas, bonito.— no interrumpió el beso, pues lo dijo en medio de este y luego continuó devorando los labios de Jungkook.

Jeon no podía sentirse más feliz, estaba pasando esto de verdad y no había manera de que este soñando, quería guardar este recuerdo por siempre.

— Taehyungie, eso significa que-

Kim con un "shh" silenció al menor y dio besos de pico acariciando una mejilla de su maknae.

— ¿Duermes conmigo hoy?

Oh.

— Me encantaría.— la sonrisita de Jungkook fue contagiosa, irradiaba demasiada alegría y sus ojitos siendo también congruentes ante sus palabras.

Kim asintió y dejó a Jungkook en la cama, levantándose se fue a un lado de la misma y en la mesa de noche dejó su teléfono para después quitararse sus prendas y colocarse su pijama.

Jeon no tenía ninguna pijama aquí.

— Tendrás que dormir desnudo.— dijo de repente y la expresión de Jungkook fue graciosa para el mayor.

— No dormiré sin ropa, préstame algo hyung.

— Bien.

De su armario sacó unos shorts negros y una camisa blanca, dejándola en la orilla de la cama.

— ¿Puedes darte la vuelta por favor?

— ¿Hm?

— ¿Sí? — insistió.

— No es como si no te hubiera visto ya sin ropa, pero bueno.

Se dio la vuelta y por medio del espejo, siendo astuto, miró a Jungkook desvestirse de la manera más rápida posible -aunque los pantalones ya no los tenía- y también ponerse la ropa que le dio de manera fugaz.

Él era muy gracioso, aquello hizo que Taehyung soltara una risa pequeña.

— Me mandaron aquí para hacerte una pregunta y mira como hemos terminado, espero esta vez no vaya a mi habitación y vea que no estoy.

— No te preocupes por eso, ya sabes algo que antes lo sabías, ¿lo olvidas?

Jungkook sin pedir permiso se metió entre las cobijas y se tapó con ellas, estando a un lado de la cama y dejando el otro para que Taehyung duerma junto a él.

Aunque no parecía tener intenciones de él entrar también.

— Ven hyung, no me digas que harás lo típico de libros y que harás el gran sacrificio de dormir en el piso solo para que yo duerma en tu cama.

Taehyung sonrió, fue a apagar la luz de la habitación para prender su lámpara y sin dudar se echó junto a él.

Tampoco estaba dudando antes, solo estaba admirando a Jungkook tan suelto y confiado con él, en estos momentos era hermoso verlo así de desenvuelto.

Jungkook no lo pensó dos veces cuando abrazó a su hyung y escondió su rostro en el pecho del mayor, no todos los días se dormía con Taehyung así que tenía que disfrutarlo lo más que pueda.

El sueño no le ganaría todavía.

— Me gusta de tu compañía hyung, ojalá la noche se pase lenta para seguir a tu lado.

Que cursilería.

Cursilería que a Taehyung le hizo esbozar una sonrisita leve.

— No lo digo porque me gustes...

O quizás también.

— Realmente me gusta estar contigo, me haces sentir muy seguro aunque no te lo haya dicho.— suspiró y siguió aferrado a Taehyung.

— Me alegra saber eso, pequeño.— Kim levantó una mano para acariciar los cabellos de Jungkook mientras este poco a poco iba cerrando sus ojitos ante lo relajado que era sentir sus caricias.

De amigos.

Por ahora.

Tal vez.

— Descansa.

Dándole un beso en la frente, con la otra mano apagó la lámpara y cerró sus ojos también para buscar su adorado sueño.