Capítulo 6
Lobo entre corderos.
-Sahib. –Una mano cálida toca mi frente, al abrir los ojos me encuentro primero con la mujer alfa parada a mitad del estrecho pasillo del avión. Quien me acaba de despertares es Anton, en algún momento termine durmiendo en su hombro.- Nos trajeron ropa para cambiarnos. –Hilda nos dejó la ropa en el asiento que antes ocupe.
-Yo bajo con los demás, cuando terminen bajen también. –Tras esas palabras, ella también se dirigió a la puerta y bajo del avión.
-¿Llegamos?
-Puede que sea solo un tramo más del viaje.-Comenta tras mirar por la ventana y luego baja cortina de la ventanilla para darnos privacidad.
...
Es un barco.
Tras bajar entendí a que se refería con solo era otro tramo del viaje. Una persona uniformada nos esperaba a solo unos pasos. Me abrace y camine tras Anton, lo suficiente cerca de él para poder resguardarme en su espalda. Hay muchos soldados alfas presentes, supongo que puedo arrojarme al agua si alguno intenta algo. La ropa que me consiguieron me queda algo grande, incluso el calzado baila un poco en mis pies. No puedo ponerme en exquisito, dado que sé que intentaron conseguir lo más adecuado para mí.
Aun así, si es posible solo quiero que se me acerque Anton y no esos alfas desconocidos. Conocí mucho lobos en ese lugar, ahora estoy en un barco lleno de potenciales lobos que se harán pasar por corderos.
Enfermería.
Solo porque la doctora era una mujer beta y Anton acepto estar presente, es que deje que esa mujer me revisara. Mientras luego era el turno de Anton, estuve todo el tiempo sentado en la cama observando como la mujer lo atendía a él. Cada tanto mis ojos iban al suelo que estaba conectado por un tubo y aguja a mi brazo.
-Si sienten dolor, notifíquenmelo y ajustare la dosis. –Dijo al fin, tras terminar el ultimo vendaje y colocar el mismo suero en Anton.- Tengo entendido que vendrás otros chicos, puede que tus amigos estén en ese grupo. –Me miro con una sonrisa, pobre ingenua... Si eran acompañantes como yo, ninguno consideraría al otro como su amigo.- ¿Quieres que te avise?
-No son amigos. –La sonrisa se borró por un momento y luego realizo otra llena de vergüenza.
-Bueno, los dejare descansar. –Si, creo que después de mi incomoda respuesta quiere evitarme por un buen tiempo.
-Si te vas a dormir, evita aplastar tu brazo. –Anton se recostó y miro el techo.- Me dijeron que debo esperar a que lleguen todos para hablar con mi familia...
-¿Tu familia? -¿No dijo que su esposo está muerto?
-Tengo dos hijos, Sahib... y tengo también padres... -Dejo salir un suspiro agotado.- El pequeño, tiene 3 y el mayor 6... -dejo salir una risa triste- El mayor fue un pequeño descuido de año nuevo, casi me sacan del ejercito...
-¿Si tienes hijos porque eres soldado? –Dio a luz hijos y está peleando en el campo de batalla ¿Acaso está loco? Debería estar en su hogar cuidando a sus hijos para su esposo alfa.
-Por qué es mi sueño, Sahib, siempre fue mi sueño ser soldado. –Me miro y me dedico una triste sonrisa- ¿Cuál es tu sueño?
-No tengo, no lo necesito.
-Todos necesitamos sueños, Sahib... -Cerro los ojos y luego se acostó de lado.- Voy a dormir un poco, necesito dormir... Deberías hacer lo mismo.
En algún momento, capaz por lo que sea que me están metiendo a través del suero, también termine acostando. Observe el pecho que subía y baja, Anton debió de estar despierto todo el viaje. Yo dormí, pero aun así tenia sueño y quería dormir.
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Sahib: se mi compañero
RomanceEn un lugar donde ser un omega "inutil" puede ser garantia de terminar en un lugar peor. Sahib, se las ingenia para sobrevivir y siempre tener contento a su dueño. Ya rendido y limitandose a existir, Sahib perdio toda esperanza de escapar. Hasta q...