Podemos ver a un chico rubio de ojos azules de aproximadamente 13 años delante de las gigantes puertas de Konohagakure, "La Aldea de la Hoja", que parecía que se estaba yendo del lugar.
De fondo se podían ver a varias personas entre las cuales solo...
En una mañana como cualquier otra se encontraba un característico niño con cabello rojo bastante peculiar, pero a diferencia de otros niños el no se encontraba con sus padres... Solo estaba sumido en una gran soledad.
Gaara: Hmmm... Y que se supone que voy a hacer hoy...?- Se pregunto a si mismo el pelirrojo viendo como los demás niños estaban emocionados corriendo por las calles gritando que el año por fin acabo.
Esto para el niño no era un problema, después de todo jamás tuvo la oportunidad de celebrar dicha festividad con alguien más.
Gaara: Creo que podría salir a caminar... Pero aún así no creo que eso cambie algo... Porque sigo haciendo esto?- Se pregunto a si mismo el niño.
Esa era la pregunta que frecuentemente se solía hacer.
Gaara: Estoy solo... A mi familia no le importa lo que me pase... A los aldeanos mucho menos y al final del día todos me van a terminar odiando solo por existir...- ...
"Quizás... Después de todo... no soy nadie"
Justo cuando ese pensamiento termino escucho unos pequeños golpeteos en su ventana, esto hizo que el pelirrojo se confundiera y fuera a ver de que se trataba solo para sorprenderse con lo que vio...
"¡Feliz Año Nuevo!"
Eran las palabras escritas en un pastel de dudosa procedencia, pero lo más extraño eran los dibujos que estaban en el pastel. Pues se trataban de un abanico con una luna y para su gusto un especie de títere bastante feo.
Gaara: Supongo que puedo tener un fin de año como el de todos los demas- Dijo para probar el pastel y sonreír de manera leve al sentir el sabor a chocolate entre sus labios.
Tiempo Actual.
Gaara fue sacado de su estado meditativo cuando una mancha blanca con verde se abalanzó hacia el.
Fuu: Vamos Gaara!!!- Grito la peliverde detrás del muro de arena que alcanzo a frenarla.
Gaara: Ya voy... No tienes que gritarme- Hablo con su siempre tono monótono el pelirrojo.
Cuando Gaara se levantó el muro de arena se desvaneció haciendo que la peliverde tuviera una vista más clara del pelirrojo, solo para sorprenderse al ver lo que tenía en las manos.
Fuu: De dónde sacaste eso?!- Pregunto con emoción la peliverde viendo el pastel en manos del pelirrojo.
Gaara: Desde que tengo ocho años siempre en año nuevo un pastel de chocolate aparecía en mi ventana por arte de magia, así que no quería que esté año fuera diferente- Dijo mientras se le dibujaba una sonrisa en el rostro.
Fuu: Hmmm... Y esos dibujos?- Pregunto nuevamente la peliverde al ver el pastel con más detenimiento- El del centro lo puedo entender, pero y esos dos?
Gaara: Son un pequeño recordatorio...
Fuu: De que?
Gaara: De que nunca estuve solo...
Una gigantesca sonrisa apareció en la cara de la peliverde para después tomar la mano del pelirrojo.
Fuu: Así es! Ni antes, ni ahora!- Dijo para que ambos empezarán a caminar.
Al mismo tiempo que se veía en el pastel a un pequeño Mapache de arena sonriente junto con un abanico y una fea marioneta.
Fin Del Omake.
Espero que les haya gustado y espero que de todo corazón estén con sus seres queridos y como es costumbre...
FELIZ AÑO NUEVO!!!
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