Slytherin boys [one shots]

Tom Riddle

Me había tocado tom Riddle como compañero de un trabajo en parejas que puso el profesor horace.

Si había conversado un par de veces  con el, pero no eramos amigos, conocidos quedaría mejor.
No entiendo porque el profesor nos puso juntos.
Pero tampoco iba a replicar.

Me quería dar placer a mi misma.
Estaba caliente.
Así que me quite la ropa quedando completamente desnuda.
Me recuesto en la cama, chupo uno de mis dedos y lo empiezo a mover en mi intimidad.
El movimiento qué creo, me hace soltar gemidos.
Total estoy sola en mi habitación.
Sigo con los movimientos.
Estoy tan cerca de llegar a mi extasis.

Tom entro en mi cuarto sin tocar.
Y me vio ahí, mojada, dándome auto placer y escuchando mis gemidos.
Su mirada se volvió oscura, y el solo verme hizo qué creciera un bulto entre sus piernas.

Yo seguía concentrada, dándome placer, no escuche a tom y tenia mi cabeza hacia atrás con los ojos cerrados.

—dios...—gemi algo fuerte.

Tom al escucharme se empezó acercar a mi, estaba tan concentrado admirando mi cuerpo.

—preciosa.. —musita con una sonrisa maliciosa.

Me sobresalto e intento cubrirme con lo primero que encuentro por inercia.

Mierda, olvide que quede con el, para hacer el proyecto.

—no sabia que estudiaríamos anatomía.. —sonríe y se acerca a mi—no te cubras, quiero ver, abre esas lindas piernas para mi.

No me negaría a la ayuda qué esta dando voluntariamente.

Obedezco, y abro mis piernas.
El se agacha quedando a la altura de mi intimidad, introdujo dos dedos en mi. Fue fácil que entrarán, estaba tan mojada.

—mierda tom.. —otro gemido sale de mi boca.

Si eso hace con los dedos, no me imagino que hará con esa lengua.

Introduce 4 dedos en mi, dios se siente tan bien.

Como si el leyera mi mente, entierra su cara en mi intimidad.
Mierda y más mierda.
Se siente tan bien.

Empieza hacer círculos con su lengua, a este paso hará qué me corra antes de tiempo.

Agarro su cabeza y la empujó más hacia mi.

—tom..—ronroneo su nombre

—¿ si? —voltea mientras se relame los labios, limpiando un poco de mis fluidos.

—por favor... Por favor—pido desesperada.

—por favor qué?

—Follame, Follame tan duro que grite tu nombre.

—claro que lo haré, pero primero... —te agarra y te inca.

Se con exactitud que es lo que quiere.
Así que bajo su bóxer y introduzco su miembro erecto en mi boca.
El gruñe en respuesta.

Empiezo a moverme de adelante a tras, repetitiva mente.
Sueltas unas cuantas lagrimas por el dolor que genera por su tamaño

Tom agarra tu cabello en una coleta invisible.
Te empuja hacia el con más fuerza.
Levanta tu mirada haciendo qué lo mires.

Se ve jodidamente sexy y varonil desde donde estoy.

Me acomoda quedando boca abajo en la cama, levanta mi culo, y mi único soporte son mis rodillas y mis codos.

Al parecer le molesta que me apoye en mis codos, así que agarra mis brazos y los agarra con una sola mano en mi espalda baja y ahí los deja.
Empieza la tortura rozando su polla en mi entrada.
Jadeo en respuesta.

—te daré tan duro, que todo mundo escuchara tus gemidos. Y no podrás caminar en una puta semana—eso me ensiende más, sus palabras, la forma en la qué lo dice, me exita.
Y mi forma de responder es un gemido.

—eso te gusta no es asi?, eres una puta—me azota una nalgada.

Eso me genera un leve ardor en mis nalgas.

Introduce su miembro con rudeza en mi, soltamos un gemido a la par.
Empieza a embestidarme con más rapidez, toma mi cabello de nuevo en una coleta y jala hacia atrás.
Mi cuero cabelludo arde, pero es un dolor qué me esta gustando sentir.

—tom... —gimo, pero es casi imposible que escuche, pues mi cara esta contra la cama.

—qué pasa puta?—sigue penetrandome fuerte.

Mis paredes se contraen, se que estoy cerca.
Diablos tom es tan sexy.

Tom me sigue penetrando en esa posicion.
Se me nubla la vista y pierdo fuerza.
Acabo de correrme en tom Riddle.

Pero el aun no acaba.
Me levanta y el se sienta en la orilla de la cama, me pone arriba de el y me empiezo a mover.
Tiene sus manos en mis caderas profundizando cada embestiada qué me da.
Tom acelera sus movientos, hacen qué llegue de nuevo el cosquilleo de que terminare.
Esta ves es más intenso.
Tom me deja caer sobre el con fuerza y así termino haciendo un squirt en el.

A tom no parece importarle qué lo hayas mojado.

Me pone sobre la cama, y sube mis piernas en sus hombros, entra en mi de nuevo.
Mierda se siente más.
Pasan unos cuantos minutos más para que tom salga de mi y se venga en mi cara.

—con gusto seré tu compañero de cualquier proyecto. —sonríe

—tom

—shh, de aquí no saldremos tan rápido nena— me vuelve a poner en la cama con las piernas abiertas.

Parezco una gelatina, de tanto que estoy temblando.