┈─ 𝗠𝖠𝖦𝗜𝗖 ?

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Finalmente llegaste a tu casa, abriste la puerta y cambiaste adentro, dándote la vuelta para cerrala, no había nadie, lo cual no te sorprendió mucho, saludaste al gato el cual estaba pacíficamente acostado en el espaldar de las sillas de la sala, luego subiste a tu habitación, el día se estaba haciendo bastante aburrido, así que decidiste buscar entre tus cosas el cuaderno de dibujos de Vance que siempre tenía en tu casa, al encontrarlo te sentaste y empezaste a hojear entre las páginas.

Todo los dibujos eran bastante lindos, detallados y bastante creativos, al menos para tí. Aunque te gustaba más ver los pequeños dibujitos que Vance hacía sobre ustedes dos, Vance te dibujaba comiendo helado con él, bailando, e incluso durmiendo juntos, también habían mini comics de los dos en situaciones chistosas.

Al terminar de ver los dibujos, miraste al rededor de tu habitación, la casa de Griffin quedaba a pocos metros de la tuya, podrías ir caminando tranquilamente, así que eso decidiste hacer.

Agarraste tus llaves, bajaste tu abrigo del perchero y saliste de cada, en dirección a la de Griffin, cuando llegaste pasaste la cerca cuidadosamente y golpeaste suavemente la puerta principal, cuando abrió su madre ella te sonrió muy dulcemente. — Hola, corazón, necesitas algo? —. Preguntó la dulce mujer, era realmente amable, así que respondiste de igual forma. — Estoy buscando a Griffin. — Dijiste sonriendo, ella también, sonrió, notoriamente feliz. — Esta arriba en su habitación, pasa porfavor. —. Dijo, y tu obedeciste, subiste con el plato de galletas que la mujer te dio, en dirección a la habitación de Griffin, y entraste, estaba sentado en el suelo jugando con legos, y cuando te vio, se sorprendió, pero estaba feliz de verte.— ¡_____, hola! —. Dijo, levantándose a ayudarte con el plato, poniéndolo en el escritorio, y se volvió a tí. — Hola Griffin, que tal te ha ido? — Preguntaste mientras te sentabas en su cama con toda la confianza del mundo. — Pues, el día se ha pasado algo lento, y aburrido, y los legos no ayudan mucho. — Dijo Griffin mientras dirigía su mirada a su torre de legos incompleta. — Y si ambos hacemos algo con esos legos? — Sugeriste emocionado, contagiando a Griffin de la emoción, el cual asintió y derrumbó la torre de lego.— Uy, íbamos a necesitar eso. — Dijiste, fingiendo seriedad. — Perdón. — Dijo Griffin. — No te creas, estaba bromeando. — Dijiste, soltando una carcajada.

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Llevabas en la casa de Griffin almenos tres horas, los dos estaban sumamente concentrados en la gran ciudad que tenían entre manos, poniendo cada pieza correctamente en los pequeños edificios de "Theend-ville", nombre el cual sugirió Griffin porque le gustaba El lorax, y a ti también. — Hay más piezas azules? Este edificio está quedando increíble. — dijiste, y Griffin te miro con una mueca. — Todo el edificio es azul, deberías ponerle más colores o se nos acabaran las fichas azules. — Dijo Griffin mirándote a los ojos y luego a tu edificio color azul. — Cállate, es el mejor edificio de toda esta ciudad. — Dijiste cruzando tus brazos por tu pecho, fingiendo estar ofendido, y Griffin hizo algo que jamás creíste que fuera capaz de hacer... empujó tu edificio, haciendo que cayera y se desarmara. — NOOOO, MI SUPERHIPER-MEGADOJO EDIFICIO EMPRESARIAL DONDE EL PATRIARCADO ES DISIMULADO — Dijiste poniendo tus manos a los costados de tu cabeza, fingiendo tragedia y que esto era el fin del mundo, Griffin solo te miro y río, pero su diversión fue interrumpida por la mamá de Griffin tocando la puerta y entrando. — [_____], tus padres están llamando por tí. — Dijo la señora, y te levantaste, despidiendote de Griffin. Luego bajaste las escaleras y respondiste el teléfono, ya te tenías que ir a casa, y apenas eran las tres de la tarde. Aún así hiciste caso, te despediste de la señora Griffin y te fuiste, mientras caminabas por la calle, viste una camioneta negra, la cual parecía tener un logotipo de algo de magia o una cagada así, no hiciste caso y seguiste tu camino, cuando pasaste por el lado de la camioneta sentiste que te observaban, y un escalofrío... Quizá era hora de hacer ejercicio y correr hasta casa. Y eso hiciste, cuando viste la camioneta detenerse ligeramente en una curva, saliste corriendo, pasando rápidamente la calle, llegando en cuestión de minutos a tu casa, entrando desesperadamente, tu corazón latía a mil, miraste por las ventanas, la camioneta negra seguía detenida, luego se fue por la esquina, respiraste con más tranquilidad, y te diste vuelta, encontrandote a tu papá con los brazos cruzados, lo que te hizo saltar del susto. — ¿y el señorito donde estaba? —. Pregunto, y tu tocaste tu pecho que latía  con mucha rapidez, trataste de calmarte y hablar tranquilamente, pero seguias asustado.

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Al día siguiente, te levantaste algo tarde para ir a estudiar, así que tuviste que andar de apurado para todo, no pudiste peinarte bien, ni alcanzaste a desayunar, y a duras penas pudiste cerrar la maleta con todos los cuadernos y libros embutidos, corriente por las calles, y encontraste a Vance y a Robin esperándote, pero no viste a Griffin, y eso que el era el que más cerca vivía tuyo, llegaste y tu novio, caballerosamente, se burló de ti. — ¿Que pasó, bello durmiente? No llegó tu príncipe a besarte para que despertaras? — Dijo Vance burlandose, ganándose un codazo en las costillas tuyo. — Pues parece que mi príncipe no es tan príncipe. — Dijiste, haciendo que el jadeara sorprendido. — Robin, tapate los ojos que me voy a comer a besos a [____] — Dijo Vance, Robin se tapó los ojos y no tuviste tiempo de responder cuando Vance ya te estaba besando ferozmente, con sus manos agarrando firmemente tus caderas, y otra la tenía sobando tu espalda suavemente, sus lenguas bailaron juntas, y cuando se separaron, Vance sonrió victorioso. — ¿Eso te despertó, príncipe? —. Vance se burló, tu simplemente trataste de recuperar el aire que el te robo con tremendo beso, y Robin quito las manos de su cara. — No me sirvió taparme los ojos si pude escuchar todo... — dijo el moreno.

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El camino a el Colegio fue bastante tranquilo, pero aún no había señal de Griffin, ni siquiera lo viste salir de su casa, ahora estaban los cuatro, tu y tu novio, Robin y Finney, Gwen no fue a estudiar porque estaba enferma, y esperabas que Griffin también, porque la bicicleta roja que encontraron tirada se parecía mucho a la de él, lo único que te hacia conservar la calma era que no tenía si clásico cansado, así que algo en ti aún te daba la esperanza de que estaba en su casa, siendo cuidado por su madre. — [____].— llamó Vance, pero estabas demasiado ocupado en tus propios pensamientos de preocupación por el pobre Griffin. — [______]! — Volvió a llamar, lo que te saco de la realidad fue la palmada tan fuerte que te dio Vance en el culo. — ¿¡VANCE, QUE MIERDA?! — No pudiste terminar de hablar, Vance tomó tu mentón y te hizo ver hacia arriba, globos negros. — Es la fiesta de alguien, o algo? — Preguntó Finney con curiosidad, al final no le dieron importancia y llegaron al colegio, cada uno se fue por su camino, tu te fuiste solo, Finney con Vance y Robin también se fue solo, cada uno yendo a sus respectivas clases, llegaste a tu clase de historia, entrando y sentandote al lado de alguien al cual solo podrías describir como "xinito de la xhina.", no diste mucha importancia, simplemente estuviste atento a clases, y a la hora del trabajo en grupos, te tocó con el que estaba a tu lado. — Mi nombre es Bruce Yamada. — Dijo el chinito de la china, tu asentiste. — Mi nombre es [____] Dovian — Dijiste, y así empezaste a hablar con él, no tenían mucho en común, pero los unió su gran pasión por el chisme, y eso fue suficiente para ti para ya considerarlo tu amigo. Después de clases, lo invitaste a tu grupito, aunque se mostró desinteresado al principio, al final término por ceder, y ahora estaban todos en el parque, tu hablando con Robin mientras Vance miraba a Bruce con el ceño fruncido, claramente celoso, y te mantenía contra su pecho, abrazandote posesivamente, mientras Bruce hablaba muy felizmente con Finney, Robin también estaba celoso de que Bruce hablase con Finney, pero prefirió hablar contigo para tratar de calmar los celos.—

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De camino a casa, solo estaban los cuatro, pues Bruce iba por el lado contrario de donde vivían, pasando por una gran cerca marrón, te detuviste en seco, como ibas agarrado de la mano de Vance el también se detuvo, veías con pánico, miedo y shock el cartel de desaparecido con el nombre, foto y datos de Griffin, el Griffin que conoces.
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Perdón por la demora, es que ya me cure de ser un obsesionadito con Wattpad 👁

┈─  𝐇𝐎𝐏𝐏𝐄𝐑'𝐒 𝐁𝐎𝐘 | Vance x m! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora