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El alboroto fuera de la casa Jeon estuvo así hasta la noche, cuando un auto se hizo presente afuera y todos sabian de quien se trataba.
El padre de familia, la cabeza de esa casa. Habia llegado.
Taehyung lo había visto desde las cámaras. Entonces subio rápidamente donde Jungkook para rectificar que estuviera despierto.

Al abrir la puerta se sorprendió al no verlo recostado, entro por completo cerrando la puerta detras de el y busco por los lados más escondidos de su cuarto.
Pero nada, hasta que le dio curiosidad un pequeño armario de abrigos. Lo abrió.

Ahí estaba, hecho bolita.

— llegó tu padre. — se levanto de inmediato para abrazarlo. Cosa que lo dejo un poco sorprendido por sus repentinos cambios de actitud.
Pero lloraba, y eso lo inquieto.

— Por favor...—  suplicaba. — No dejes que me hagan daño...—  sentía como temblaba con miedo, no entendía esa actitud. Pero poco fue lo que pudo pensar en eso cuando recibio una llamada con una orden que dejo helado a Jungkook.

"Deben bajar"

Deben, entonces me incluia a mi. Pensó.

Eso no le agradaba. Algo le decia que no debían moverse de ahí. Pero las llamadas se hicieron constantes y no pudo ignorarlo.

— Debemos bajar, ven. — tomo sus dos manos y lo guió. Jungkook estaba descalzo y un poco despeinado. No podia imaginar que podia pasar para que el miedo fuera reflejado en sus ojos.

El camino se hizo corto debido al ambiente, entonces el pequeño paso enfrente, Tae lo seguía. Entonces lo vieron ahí.
Jeon Seung, el tan aclamado Seung.

El silencio invadió la habitación, Seokjin y su hermana también estaban ahi. Hoseok vio de reojo a Kim dándole un asentimiento.
Y no logró entenderlo hasta que el menor intento acercarse a su padre y por respuesta recibio una cachetada que lo tiro al piso.
El sonido invadio el lugar y Tae no supo como reaccionar, sin darse cuenta que se habia asustado por lo duro que había sido.
Jeon tomo a su hijo del brazo para levantarlo de forma brusca.

— ¡¿Qué mierda te pasa por la cabeza, eh?!—  lo avento nuevamente para que este cayera de cara. La sangre se le subio a la cabeza a Tae. No podia creer como es que todos alrededor miraran como maltrataban al mas joven sin hacer nada.
Lo estaban dañando.

Impotencia, eso es lo que sentía al no poder moverse.
Entonces las incontables suplicas de Jungkook fueron motivo para recibir mas golpes.

-- ¡Por tu culpa todo esto sucedio! ¡Pequeña mierda!-- grito dandole otro golpe. Jungkook estaba con sangre saliendo de su boca y nariz. Y nuevamente otra cachetada. Lo tomo del cabello y tiro de el para levantarlo.
Pero el pequeño apenas tenia fuerza.

-- Espero que aprendas de esto-- le susurró para aventarlo. -- Llevenselo. -- dijo viendo a Tae para darse la vuelta. -- Seokjin, espero me tengas buenas noticias. No quiero más putas sorpresas.-- el mencionado se acerco estando un poco en shock.

—  Si, papá.—  dijo viendo como Tae levantaba a su hermano menor. Aunque no podia hacer nada sus ojos se miraban tristes.
Ver los moretones y la sangre emanar del rostro de su pequeño hermano le causaban impotencia. Pero no podria decir nada.
Aún no podía.

Tae cargo a Jungkook y lo saco de la habitación, este mantenia la vista en el mayor, con lagrimas en los ojos.

—  Te pedí... Que no dejarás que me lastimara. —  sollozo sin fuerzas. -- Por favor.... -- al estar en la planta de arriba lo bajo despacio. Pero el menor reacciono empujándolo mientras lloraba.— ¡Tú no me cuidas! ¡Te odio, te odio!— gritaba con tristeza y enojo mezclados. — ¡Vete de aquí! ¡Vete, te odio! —  El mas grande intentaba explicarle alguna cosa, no sabia que. Pero le pedia disculpas de algo que el no habia hecho.
Porque verlo en el suelo con sangre habia sido la peor escena que pudo presenciar en esa casa.
O eso creía.

𝔇𝔬𝔩𝔩𝔥𝔬𝔲𝔰𝔢 -- ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora