Capitulo 7

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-Acciones-
*pensamientos*
(Aclaraciones mias)
~susurros~
"Leyendo o Algo entre comillas"
_Traducciones_
Así hablan en otro idioma

5 de septiembre de 1526

Narra Nahid

Los días han sido bastante tranquilos, no he recibido, ataques, amenazas o nada de eso pero... Lo que siento... Es que es la calma antes de la tormenta, se que algo malo vendrá... Y viene junto a la campaña del sultán

Suleiman: Qué te atormenta mi amada flor?

- Temo por usted su majestad, serán muchos días en los que estará en campaña...

Suleiman: dudas de mi Nahid?

- Para nada, se que usted es capaz de pelear contra mil ejércitos... Aún así no está de más pensar en todo el tiempo que pasará...

Suleiman: Mi hermosa flor -beso mi frente- Te escribiré todos los días que pueda, así siempre sabrás de mi

- Por favor, se que recibiré sus cartas con aprecio

Suleiman: Entonces así se hará mi bella rosa, y tú siempre responde mis cartas, así sabré que estás bien

Yo sonreí ante sus palabras y me retire ya que debía ir a una junta, empecé a caminar cuando me encontré al Şehzade Mustafa, el es el hijo mayor del sultán y la verdad es muy agradable, he hablado con el en pocas ocasiones pero siempre ha sido muy amable

- Şehzade -hice una reverencia-

Mustafa: Señorita Nahid, sabe si mi padre está disponible?

- Me parece que se preparaba para una junta, seguro tiene tiempo para usted

Mustafa: Prefiero no interrumpirlo... Señorita... Usted sabe latín?

- Si, por qué pregunta?

Mustafa: Me podría ayudar a traducir unos textos

- Con mucho gusto

El principe me llevo a su habitación donde me mostró unos libros en esta lengua, los empecé a traducir para el, yo hablaba y el Şehzade los escribía, pase tecnicamente mi tarde ayudándolo. Al acabar hice una reverencia y fui al harem

Firial: Dónde estabas niña?

- Con el Şehzade Mustafa, me pidió que tradujera algo para el

Firial: Tu serías una buena madre, eres paciente y con un corazón grande

- Todo depende de la educación del niño pero... El Şehzadees bastante amable

Firial: Hoy no tienes tareas así que puedes descansar

- Firial... Crees que me puedan enviar unos lokmas a mi habitación

Firial: uh? Está bien no veo por qué no

Me dirigí al cuarto que me dieron Para recostarme un poco, ese día me había sentido algo mareada pero nada que no supiera manejar, cuando llegaron los lokmas me quitaron esa extraña sensación dejando solo su dulzura en el paladar

Firial: Tranquila, come despacio, no van a escapar de tu plato

- Por favor Firial, acompáñame, no me gusta comer sola

Firial: Tengo trabajo Nahid, solo traía esto para saber que estabas bien

-Por qué preguntas eso?

Firial: Últimamente has tenido mareos, solo me preocupe un poco... Bien creo que lo mejor es que siga con mi trabajo, no te llenes de tantos dulces o no podrás comer luego

Al final del día ya estaba comiendo por quinta vez, incluso ella lo desconocía de si misma, normalmente llegaba a sobrar comida, no era alguien de un apetito grande, era de las placas veces que pedía repetir alimentos

Firial: O enserio tienes hambre... O estás embarazada

- Tu crees? Pero es muy pronto

Firial: Nunca dudes de los designios de Al-lāh

- Bien hablaré luego con la doctora, tal vez solo tengo mucha hambre

Firial: A pesar de todo sigues siendo una niña, una pequeña niña

- Vamos a empezar con sentimentalismos?

Firial: No es tan así... Solo... Tu actitud es como una pequeña niña... Eres eso

- Bueno ya no tanto... -mire la mesa y tome algo de comida- por favor come conmigo, Firial me siento mal de que estes solo viendo

Firial: Si te incomoda puedo irme

- No no no no por favor quédate, eres mi única amiga... Solo... Solo confío en ti... No tengo más en el mundo

Firial: Bien... Me quedaré contigo

Esa noche hablé casi todo el tiempo con firial pero llegó el momento de la despedida, estaba con las demás sultanas para despedir al Sultán, el estaba hablando con su madre mientras yo estaba a la cola de todas la verdad dudo que yo contará como una pareja pero el me había mandado a llamar, se fue despidiendo en orden de jerarquía y cuando llegó a mi note un brillo distinto en sus ojos, me arrodille, bese su mano para después llevarla a mi frente y me levanté

Suleiman: No olvides lo que te dije mi amada flor

- No lo haré su majestad

Suleiman: Odio dejarte, pero prometo que volveré, no olvides dónde está mi corazón

- Confío en su valor majestad y que sabes proteger el imperio, cuando regrese lo estaré esperando, no hace falta una despedida cuando se que su regreso será glorioso

Sulienan: Eres especial mi bella flor -dio un beso en mi frente-

Y sin más partió, sentía algo en mi corazón, sentís preocupación, jamás me había preocupado por alguien ajeno a mi familia, me preocupaba el sultán pero no comprendía por qué.

Cuando el se fue regrese a mis aposentos y me quedé ahí el resto de la tarde, salía para comer o hacer mis deberes pero prefería estar adentro, dónde me sentía a salvó, no confiaba mucho en las demás personas del harem así que por eso evitaba la conversación, admití que mi carácter tampoco ayuda en el proceso de hacer amistades pero ellas tampoco cooperan.

Narra la autora

Flashback

Una joven de 13 años corría por los delicados prados de su propiedad siendo seguida por su madre la cual ya estaba bastante cansada como para seguirle el paso

Ophelia: Cordelia por favor espera, que dirán los hombres si te ven

Cordelia/Nahid: que soy una alegre hija llendo a recibir a su padre

Cordelia/Nahid: que soy una alegre hija llendo a recibir a su padre

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Ophelia: Correr así no es de una dama por favor Cordelia

Cordelia/Nahid: Si debo llevarle la contraria para ir con mi padre está bien -se calmó un poco- No soy una dama!!

Grito mientras corría a la entrada de la propiedad con un bello ramo de flores, aún era una niña, una pequeña planta que necesitaba mucho para crecer pero ya se veía en ella su delicadeza y elegancia

La flor del imperio (Suleiman y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora