ESPOSA OLVIDADA

CAPÍTULO 131 AL 140

FELIZ 2024

CAPÍTULO 131: RIENDO COMO BUENOS AMIGOS


Ethan se acercó a Abril y acaricio su cabello, ella se veía exactamente igual a Sophia, excepto por su cabello, él de Sophia era rubio y lacio, el de Abril rojizo y rizado, por eso cuando la había visto en aquel pueblo con el cabello rubio las había confundido.

_En verdad eres su hija.

_Disculpa.

_Eres su vivo retrato, si tu cabello fuera rubio, diría que eres ella.

_En realidad me hace feliz saber que me parezco a mi madre y no a mi padre, bueno, aunque el color de mi cabello lo heredé de él.

Cuando Abril mencionó a su padre la expresión suave y dulce desapareció del rostro de Ethan, cambio por una llena odio y

Rencor; Abril retrocedió alejándose de Ethan, había algo en él que hizo que se asustara.

Cassian había salido a dar un paseo por el jardín cuando a lo lejos vio a Abril que estaba con Ethan, él se apresuró a ir donde ellos se encontraban, preocupado de que pudiera hacerle algo. Al llegar donde ellos se encontraban vio que Abril retrocedía, ella se veía un poco asustada.

_Aléjate de ella.

Ethan retrocedió unos cuantos pasos, levantó sus manos en alto y le dijo.

_No le he hecho nada, solo estábamos hablando.

Cassian se puso en medio de ellos cubriendo a Abril con su cuerpo y le dijo.

_No tienes permitido estar aquí.

_ ¿No tengo permiso?, ¿Acaso soy un prisionero? Ethan se río con sarcasmo y le dijo.

_No te olvides que soy un aliado, no tienes ningún derecho sobre mí, iré donde me apetezca.

_ Esta no es tu casa, no puedes hacer lo que te dé la gana. Ethan empezó a alejarse y le dijo.

_ Deberías tratar mejor a tus aliados, no vaya a ser que se conviertan en enemigos.

Cuando Ethan se había alejado lo suficiente Cassian le preguntó a Abril.

_ ¿Cómo estas?, ¿Te ha hecho algo? Abril negó con la cabeza y respondió.

_Solo hablábamos.

_ ¿Sobre qué?

_Sobre mi madre, ellos eran amigos así que le pregunté cómo era ella, yo no la conocí, sentía curiosidad.

_Pero hace un momento parecías asustada.

_He mencionado a mi padre, su expresión cambió por completo, me asusto un poco, pero no fue grosero, así que tú tampoco deberías de serlo con él.

_No me agrada, no puedo ser amable con quien no me agrada.

_ ¿Por qué no te agrada?, A mí me pareció muy amable.

_Por la obsesión que tiene contigo, es rara.

_En realidad yo lo entiendo perfectamente, me dijo que ama a mi madre, que aun si está muerta, ella será la única para él; yo me parezco mucho a mi madre, creo que cuando me ve, la añora.

_Aun así, no deberías acercarte mucho a él y sobre todo no le menciones a Alessandro que has hablado con él, mi hermano es muy celoso, se pondrá furioso si se llega a enterar de que estuvieron hablando los dos solos.

_De acuerdo, no le diré nada.

Abril se dio cuenta que desde que habían regresado del viaje ellos apenas y se veían durante las comidas ya que todos parecían estar muy ocupados, así que le dijo.

_Hace mucho que no damos un paseo, ¿Quieres pasear conmigo?

_Por supuesto.

Mientras caminaban Abril preguntó.

_ ¿Maya aún no ha regresado?

_No y si te soy sincero ya me está preocupando, dijo que estaría de vuelta en tres días, pero ya ha pasado una semana y aún no ha regresado.

_Quizás tuvo algún inconveniente, seguro que pronto estará de regreso.

_Eso espero.

Abril había visto que Maya y Cassian eran muy cercanos, y sobre todo había escuchado a los sirvientes hablar de ellos, decían que eran más que amigos ya que dormían juntos, ella no pudo seguir ocultando su curiosidad y le preguntó.

_ ¿Estás enamorado de Maya?

La pregunta sorprendió mucho a Cassian, él no pudo evitar que se reflejará en su rostro.

_ ¿Por qué preguntas eso?

_Es que los sirvientes han estado hablando mucho sobre vosotros, dicen que lo más seguro es que ella se convertirá en tu esposa.

Cassian se sentía un poco incómodo hablando de ese tema con Abril ya que ella había sido su primer amor y aún tenía sentimientos por ella, pero ella la veía con ojos expectantes, así que solo respondió sin dar muchos detalles.

_Eso no pasará.

_ ¿Por qué no?

_Ella ha dicho que no puede casarse, no me ha dicho la razón.

_ ¿Eso significa que se lo has pedido?

Él no respondió. Pero no fue necesario Cassian era como un libro abierto, en su rostro aparecían todas sus respuestas, Abril se río y le dijo.

_Tu cara dice que, si se lo pediste, aunque al parecer te rechazó.

_Así es, me han rechazado, así que no hablemos de eso, siento como si clavarás una daga en mi corazón cuando alguien más lo dice.

_De acuerdo no hablaré más de cómo te han rechazado.

_Dices que lo harás, pero no paras de repetirlo.

_ Lo siento, a veces soy un poco lenta con algunas cosas.

_ ¿Un poco?, a veces demasiado.

Ambos reían suavemente, del modo en que lo hacen las personas que simplemente se alegran de estar juntas. Abril le dijo.

_Hace mucho que no pasábamos un rato juntos.

_Es verdad, creo que desde que regresamos no casi no nos hemos visto.

_Así es, Alessandro me ha dicho que te iras del palacio después de la ceremonia de nombramiento, eres mi primer amigo, te añorare.

_Yo también te añorare.

_Este lugar será muy solitario cuando ya no estés.

Cassian al ver la expresión de tristeza en el rostro de Abril le dijo.

_Vamos, hay un lugar que quiero mostrarte.

Abril lo siguió hasta un pequeño jardín que quedaba oculto detrás de unos arbustos, aunque quedaba escondido se veían muy bien cuidado, Cassian le dijo.

_Este es uno de mis lugares favoritos, solía venir a pensar aquí cuando era pequeño o cuando me sentía solo.

_ ¿Cuándo te sentías solo?

_Si, sé que parece que me contradigo, pero es así, mi madre me enseñó este lugar una vez que estábamos jugando a las escondidas con Alessandro, recuerdo que los dos nos escondimos durante horas aquí mientras nos reíamos imaginando cuanto tardaría Lessan en encontrarnos, es uno de mis mejores recuerdos, por eso cuando vengo aquí por extraño que parezca no me siento solo, a veces siento que aun puedo escuchar la risa de mi madre.

Abril no tenía recuerdos con su madre, en realidad no tenía ni un solo recuerdo bueno de cuando ella había sido una niña, ella le dijo.

_A mí me hubiera gustado tener algún recuerdo así, creo que si lo hubiera tenido no me hubiera sentido tan sola.

_Pero ahora ya no lo estas, tienes a mi hermano y aunque sea lejos, tienes personas que te quieren.

_Lo sé.


CAPÍTULO 132: ERES LA ÚNICA MUJER CON LA QUE HE ESTADO


Cuando el sol se ocultó por completo Cassian le dijo.

_Creo que será mejor que volvamos, si Alessandro va primero al comedor comenzará a preguntarse dónde estás.

_ ¿Puedo venir aquí cuando necesite pensar o me sienta sola?

_Por supuesto, puedes venir siempre que lo desees.

Abril y Cassian se dirigían al palacio cuando uno de los sirvientes se acercó a toda prisa.

_Príncipe Cassian.

_ ¿Qué pasa?, ¿Por qué te ves tan agitado?

_Me dijo que le avisara cuando la señorita Maya regresara.

_ ¿Ella está aquí?

_Si, acaba de llegar hace un momento.

_ ¿Ella está bien?

_Sí, parecía estar bien.

Cassian se sintió aliviado al saber que Maya se encontraba bien, él había estado muy preocupado ya que ella había tardado más de lo que había dicho. Abril puso su mano en su hombro y le dijo.

_Vez, no tenías nada de qué preocuparte, ella está bien.

_Si, tenías razón.

_Debes estar ansioso por verla.

_Eso no es verdad.

_A mí me parece que sí lo es, así que por qué no vas a verla.

_Te acompañare hasta el comedor.

_No tienes por qué, ya conozco el camino.

_Acompáñala.

Le ordenó Cassian al sirviente, después se despidió de Abril y se fue a buscar a Maya. Ella estaba en su habitación, él entró sin tocar la puerta y la vio sin ropa.

Cassian se le quedó mirando fijamente, ella se cubrió con una bata y le dijo.

_Deberías tocar la puerta antes de entrar, aunque no es que me molestes que me veas sin ropa.

_Tardaste mucho, dijiste que volverías en tres días.

Maya avanzó unos cuantos pasos acortando la distancia que había entre ellos y le dijo.

_ ¿Tanto me extrañaste?

_Estaba preocupado, creí que te había pasado algo.

_Lo siento, tuve algunas cosas que hacer antes de regresar.

_ ¿Qué cosas?

_Cosas.

_No piensas decírmelo.

_Yo también tengo una vida, sabes, no puedo contarte todo, aunque en realidad no es nada importante, solo hice unos encargos para mi padre.

_Sobre la historia de las llaves del hades, ¿Pudiste averiguar dónde está la primera llave?

_Bueno en realidad no es que tenga mucho sentido la historia, te lo contaré después, ahora quiero darme un baño, ¿me lo permites?

_Si, por supuesto.

Maya caminó hacia el baño y le dijo.

_Puedes esperar a que termine de bañarme o si quieres puedes acompañarme, no me molestaría que me acompañaras.

Cassian se vio tentado a acompañarla, pero se negó, no quería dejarse llevar por sus pasiones.

_Te esperaré aquí.

_Puede que tarde un poco. ¿Estás seguro que no quieres acompañarme?

_No tengo prisa, te esperaré aquí.

_Dejaré la puerta abierta por si quieres venir.

Cassian se quedó de pie esperando a que Maya saliera del baño, aunque no fue tanto tiempo, el poco tiempo que espero le pareció eterno, cuando ella salió llevaba el cabello húmedo, mientras caminaba hacia él, le pareció que se veía increíblemente sexy, él tragó saliva con fuerza; sabía que ese no era el momento para dejarse llevar por sus pasiones, por sus deseos que lo impulsaban a querer tocarle. Maya pudo ver deseo en los ojos de Cassian, era como si estuviese viendo un suculento postre, ella se acercó un poco más, en realidad ella también lo deseaba, quería sentir sus manos recorriendo su cuerpo, sus labios húmedos contra los de ella, quería sentir el calor de su cuerpo y perder la cabeza mientras la hacía suya.

Él extendió su mano en su dirección; Maya llevaba el cabello suelto y él cogió un mechón se lo puso detrás de la oreja, en una caricia terriblemente tierna.

Sus labios húmedos le parecieron apetecibles, quiso probarlos.

_Tengo que saberlo. Dijo.

_Necesito saber si puedo besarte y todo estará bien.

Maya se quedó sin habla; asintió y él le hundió las manos en el cabello húmedo y le dijo.

_Tienes el cabello húmedo, podrías enfermarte si no lo secas correctamente.

_No enfermo tan fácilmente, pero quieres hacerlo por mí.

_Si.

Cassian tomó una toalla que Maya llevaba en la mano, comenzó a secar su cabello y al terminar le alzó un puñado de mechones y se los besó.

_Tu cabello es hermoso.

_Solo mi cabello.

_No, todo de ti es hermoso.

_Ah sí.

_Si.

Cassian dejó de hablar cuando ella se puso de puntillas y le robó un beso, él se quedó mirándola por un momento y luego se inclinó sobre ella arrebatando sus labios, los cuales a su parecer eran más dulces que la misma miel.

Después de varios besos ambos se tumbaron sobre la cama, la cual ninguno de los dos recordaba cómo habían llegado hasta ahí.

Estaban entrelazados; él le pasaba las manos por el cabello. Su boca era cálida sobre la de ella y luego ardiente, y la suavidad desapareció, reemplazada por una feroz intensidad. Era como una maravillosa caída, Maya estaba debajo de él, su cuerpo amoldándose en la cama, y acaricio todo lo que siempre había deseado acariciarle: pelo, el arco de la espalda, los hombros.

Maya deslizó sus manos debajo de su camisa y empezó a quitarla, los dos estaban disfrutando de las caricias que le daba el otro, en pocos minutos la ropa desapareció por completo, sus cuerpos desnudos, se entrelazaron y se hicieron uno solo, los gemidos resonaron en la habitación, se escucharon sonidos obscenos por la fricción de sus cuerpos en cada embestida.

Después de varias rondas los dos quedaron agotados y sudorosos, Maya descansaba sobre su pecho mientras él le acariciaba la espalda.

_Parece que me extrañaste Bastante. Dijo Maya mientras se reía.

_ ¿Eso crees?

_Si, eso me pareció, aunque si te soy sincera me ha encantado, no me digas que has estado practicando con alguien más en mi ausencia.

_Por supuesto que no, eres la única mujer con la que he estado. Respondió Cassian mientras las mejillas se le ponían coloradas de la vergüenza.


CAPÍTULO 133: LA HISTORIA DE UN GRAN AMOR


Mientras le acariciaba la espalda con ternura Cassian preguntó.

_ ¿Sabes dónde están las llaves del Hades?

Maya guardó silencio un momento, luego respondió.

_Te dije que era solo una historia que mencionaba donde estaba una de las llaves del Hades, no sé si sea cierto o no.

_ ¿Me cuentas la historia?

Maya se levantó de la cama mostrando su desnudez sin ningún pudor, ella fue hasta una mesa en la que tenía su bolsa de viaje, de ahí sacó un viejo libro enfundado en cuero, ella volvió a la cama y le dijo.

_Mi padre me ha dado el libro de donde saco la historia.

_ ¿Y tu padre que dice?, ¿la historia es real o ficticia?

_Mi padre siempre dice que todas las historias guardan algo de verdad.

Maya abrió el libro y busco entre sus páginas,

Cassian podía ver sus pechos descubiertos, eso lo llevaba a tener pensamientos impuros, él la cubrió con la sábana, ella extrañada preguntó.

_ ¿Qué estás haciendo?

_Si no te cubres no podré concentrarme en lo que dices. Maya sonrió con picardía y le preguntó.

_ ¿Acaso nublo tu mente?

_Por supuesto, no soy de piedra, mis ojos se desvían sin querer.

_ ¿Entonces no quieres verme?

_ ¡Yo no he dicho eso!

Maya se río al verlo tan nervioso y le dijo.

_Solo me estaba burlando de ti, ahora me tapare.

Después de cubrirse Maya siguió buscando entre las páginas de aquel libro, ella lo hacía con mucho cuidado para evitar romperlas ya que las páginas parecían muy desgastadas.

Cassian le echó una mirada al libro, estaba en un idioma extraño, parecían simples garabatos.

¿En qué idioma está escrito este libro?

Maya evitó la pregunta, al encontrar la historia comenzó a leerla:

_Había una vez, un rey el cual amaba profundamente a su esposa, ella era todo para él, pero un día ella enfermó, su vida se fue agotando lentamente, él al ver cómo su vida se iba apagando día a día hizo todo lo que pudo para poder salvarla, busco a los mejores magos y hechiceros, pero ninguno pudo sanar la enfermedad de su amada.

_ ¿Es una historia de amor?

Pregunto Cassian ya que la historia se le hizo parecida a las historias que leía Abril en sus ratos libres.

_Tu solo calla y escucha hasta el final.

_Lo siento por interrumpirte, continua.

_Cuando ella murió, él cayó en la más profunda desesperación, no podía vivir en un mundo en el que su amada no existiera, así que busco la manera de revivirla, después de mucho buscar encontró un libro que relataba

Cómo traer a los muertos a la vida, para lograrlo él necesitaría una de las llaves del Hades, él dedicó varios años en buscarla, hasta que por fin pudo lograrlo, encontró una de las llaves y después fue hasta las puertas del Hades, ahí usó una de las llaves y entró en el Hades, él busco el alma de su amada y cuando por fin pudo encontrarla se dio cuenta de que no podía llevarla de regreso al mundo de los vivos, ella ya no poseía un cuerpo al cual volver, su cuerpo se había consumido hacía mucho tiempo.

Si no podía llevarla de regreso, él prefería quedarse en el Hades junto a ella, pero eso tampoco le fue posible, un humano no podía quedarse en el mundo de los muertos, él fue expulsado y devuelto al mundo de los vivos, al volver al mundo de los vivos, con el corazón roto viajo sin rumbo, hasta llegar al reino de las hadas.

_ ¿Las hadas existen?

_iMe dejas terminar!

_Lo siento continua.

_Ahí encontró a un hada que se parecía a su esposa quien había muerto, él quiso llevarla con él, pero las hadas tenían rotundamente prohibido dejar su reino, pero él no quiso irse sin ella, así que hizo un trato con el rey de las hadas, él le daría la llave del Hades que poseía si l dejaba que se llevara aquella hada con él, el rey de las hadas aceptó el trato, él le entregó la llave y dejó la tierra de las hadas junto aquella hada.

Maya cerró el libro y le dijo.

_Y así termina la historia.

_ ¿La llave está en el reino de las hadas?

_Según la historia sí.

_ ¿Entonces las hadas existen?

_Eso creo, aunque nunca he visto una.

_ ¿Y cómo hacemos para llegar al reino de las hadas?

_Había pensado en preguntarle a los elfos, ellos provienen de un linaje antiguo, si alguien sabe dónde encontrarlos serán ellos.

_Tienes razón, les preguntaremos mañana.

Maya puso a un lado el libro, se acomodó en el pecho de Cassian y le dijo.

_Espero que podamos encontrar la llave.

_Seguro que así será.

Alessandro había ido a su oficina después de cenar ya que tenía bastante trabajo atrasado. Alguien toco la puerta de su oficina, era Gabriel que preguntaba si podía pasar.

_Adelante.

_Su majestad hay algo que me gustaría informarle.

_ ¿Qué pasa?

Pregunto Alessandro sin levantar su mirada de los papeles que tenía enfrente.

_Es sobre su esposa.

Inmediatamente Alessandro levantó su mirada.

_ ¿Qué pasa con mi esposa?

_Ella me pidió que no se lo dijera, pero creo que debería de saberlo.

_Habla Gabriel, deja de dar tantos rodeos, ¿Qué pasa con Abril?

_Ella tiene varios días en los que no se encuentra muy bien de salud, ha estado sintiendo mareos, náuseas y dolor de cabeza. Alessandro se puso en pie muy alterado.

_ ¿Está enferma?, ¿Por qué no me lo has dicho antes?

_Ella me prohibió que se lo dijera, dijo que no era nada, pero ya ha pasado una semana y los síntomas no parecen haber arremetido.

_Manda a llamar un médico inmediatamente, que vaya mis aposentos. Alessandro se dirigió a la puerta, justo antes de cruzar el umbral de la puerta Gabriel dijo.

_Su majestad, no estoy muy seguro de esto, pero, mi esposa presentaba los mismos síntomas no hace poco.

_ ¿Qué enfermedad tenía tu esposa?

_Mi esposa no estaba enferma, estaba embarazada, quizás la reina también lo esté.

Alessandro se quedó helado, la madre de Abril le había dicho que lo mejor era que no tuvieran hijos por el momento y en realidad él también creía que eso era lo mejor ya que pronto se desataría una guerra, él se sostuvo en el umbral de la puerta, empezó a sentirse mareado.

_ ¿Embarazada?

_Creo que es lo más posible. Alessandro le dijo.

_Dile al médico que venga mañana temprano.

_Como ordene su majestad.

Alessandro fue directamente a su habitación dejando su trabajo atrás, Abril ya estaba acostada en la cama, ella dormía profundamente. Él se acercó a ella y le acarició la mejilla.

_Aby despierta.

Abril sentía sus párpados pesados, desde que había abierto el segundo sello se sentía cansada y mareada todo el tiempo, ella se forzó a abrir los ojos y preguntó.

_ ¿Qué pasa Lessan?

_ ¿Por qué no me dijiste que no te sentías bien? Abril se despejo, se sentó en la cama y al ver a Alessandro tan preocupado le acarició la mejilla y respondió.

_No quería hacer que te preocuparas.

_Gabriel me ha dicho que te has estado sintiendo mareada y con náuseas, ¿Es verdad?

_Si, pero pronto me sentiré mejor, solo necesito descansar. Alessandro apartó un mechón de cabello del rostro de Abril y le dijo.

_Gabriel piensa que quizás estes embarazada ya que su esposa tenía los mismos síntomas cuando salió embarazada.

Abril no le había querido contar a Alessandro que había roto un segundo sello ya que él tenía muchas otras cosas de las cuales ocuparse, si él se hubiera enterado seguro habría dejado todo para estar con ella.

_No creo que sea eso Lessan, en realidad he roto otro de los sellos que mantiene sellada mi magia.

_ ¿Qué?, ¿Cuándo fue eso?

_Hace una semana, lo siento, no quise preocuparte por eso no te dije nada.

_Abril, soy tu esposo, estoy aquí para ti, este tipo de cosas debes contármelas, no debes cargar con todo tu sola.

_Lo siento, la próxima vez te lo diré.

Mande llamar al médico, él te revisará mañana.

_Estaré bien en unos días.

_Aun así me quedare más tranquilo si te revisa, también le diré a Sirius que te revise, que compruebe que todo estará bien con tu magia.

_De acuerdo.

Alessandro la abrazó, dio un suspiro de alivio y de decepción a la vez.

_Me alegra saber que no estás enferma, me asusté mucho cuando Gabriel me lo dijo.

_ ¿Hubieras odiado el que estuviera embarazada?

Alessandro se separó un poco para ver directamente el rostro de Abril y le dijo.

_Claro que no, solo sentí un poco de miedo ya que pronto iniciará la guerra y por qué tu madre dijo que lo mejor era evitar tener hijos por los momentos.

Él le acarició el cabello dando y respondió.

_Pero si te soy sincero al imaginar que quizás estés embarazada me hizo feliz.

_ ¿Y si no lo estoy?

_No importa, porque algún día lo estarás y nuestra familia crecerá, así que no te preocupes por eso.


CAPÍTULO 134: EL REINO DE LAS HADAS


A primera hora de la mañana el médico toco la puerta de la habitación, era el médico, Alessandro despertó a Abril y le dijo.

_Aby despierta, el médico está aquí. Abril se incorporó y le dijo.

_No hace falta que me revisen, estoy bien.

_Me quedare más tranquilo si lo hacen.

_De acuerdo.

Alessandro abrió la puerta, el médico hizo una reverencia y dio sus saludos a pareja real, mientras el médico revisaba a Abril, Alessandro no le quito la mirada ni un solo momento, el médico se sintió muy nervioso, era como si un animal salvaje lo estuviera acechando, él no encontraba la hora de salir de esa habitación.

_ ¿Está bien, está embarazada? Gruño Alessandro. Con gran temor el médico le contestó.

_No su majestad, ella no está embarazada, lo lamento.

Él no pudo ocultar la decepción en su rostro, pero aquello sólo duró una fracción de segundo, inmediatamente volvió a cambiar la expresión de su rostro por una serena.

_ ¿Qué tiene?

_Solo parece ser fatiga, con unos días de descanso estará bien. El médico recogió sus cosas, se despidió y salió de la habitación. Abril se veía decaída, Alessandro se sentó a su lado y le preguntó.

_ ¿Qué pasa Aby?, ¿Por qué estas tan decaída?

_En verdad deseabas que estuviera embarazada, ¿No?

_Claro que no.

Alessandro tomó el rostro de Abril entre sus manos y le dijo.

_He, es verdad que quiero tener un hijo contigo, pero sé que este no es el mejor momento, esperaremos hasta que sea el momento adecuado, ahí es cuando tendremos muchos hijos.

_ ¿Y si yo no pudiera tener hijos ¿, ¿Seguirás amándome?

_Por supuesto que sí, te amo Aby y aunque quisiera tener hijos, si no se puede no pasa nada, porque te tengo a ti.

_Me prometes que no tomaras otra esposa.

_ ¿Por supuesto que no?, Jamás haría algo así, eres y siempre serás la única para mí.

Cassian y Maya se dirigían al comedor cuando vieron salir al médico de la habitación de Alessandro y Abril. Cassian se apresuró hacia la puerta y preguntó.

_ ¿Puedo pasar?

_Pasa.

Al abrir la puerta y cruzar el umbral de la puerta, Cassian preguntó con gran preocupación.

_ ¿Qué hacía el médico aquí?

_No era nada.

_ ¿Seguros?

_Sí, seguro.

_Maya ya está de regreso, después de desayunar iremos a ver a los elfos, ¿Nos quieres acompañar?

_No, aún tengo trabajo pendiente, vayan ustedes y cuéntame cómo les ha ido.

_De acuerdo, entonces los vere después.

Cuando Cassian salió de la habitación, Maya le preguntó.

_ ¿Todo bien?

_Parece que sí, ¿Vamos a desayunar?

_Si, muero de hambre, ayer no me dejaste cenar.

_ ¿Eso no es verdad!

_Entraste a mi habitación a pocos minutos de que llegara, después de eso no me dejaste salir de la cama, ¿Quieres que te cuente los detalles para refrescar tu memoria?

Cassian se sonrojo y le dijo.

_No sigas, lo recuerdo.

Maya entrelazo su brazo con el de Cassian y le dijo.

_Entonces vamos a desayunar, o pueda que termine atacándote.

_Vamos.

Después de desayunar ambos se dirigieron al ala norte en la que se encontraban los elfos. Ambos estaban frente a la puerta de la habitación, Maya iba a tocar la puerta, pero Cassian la detuvo y le preguntó.

_ ¿Crees que ellos nos ayuden?

_Ahora lo veremos.

Maya abrió la puerta, los dos elfos llevaron las manos a sus armas, ella les dijo.

_No me ataquen, vengo en son de paz. Ethan se acercó y saludo.

_Hola Maya.

_Se donde esta una de las llaves del Hades, pero necesitare vuestra ayuda para encontrarla.

_ ¿Dónde está?

_Está en el reino de las hadas, en manos del rey de las hadas,

¿Sabes cómo llegar hasta ellos?

_ ¿El reino de las hadas?, ¿Cómo sabes que está ahí? Cassian no pudo evitar preguntar.

_ ¿Entonces si existe?

Ethan respondió con una cara seria.

_Si, pero no es un lugar al que quieras ir.

_ ¿Por qué no?

_Las hadas no suelen ser muy amigables y menos con los humanos.

_Ustedes tampoco y aquí están. Dantriel respondió.

_Si crees que nosotros no somos amigables, es porque aún no los han conocido, las hadas detestan a los humanos.

_Pero esta guerra nos compete a todos, ellos también tendrían que ayudar.

Dantriel se río.

_ Ellos preferirían morir que colaborar con los humanos.

_Supongo que en verdad nos odian.

_Si, así de grande es el odio que les tienen, si ellos tienen una de las llaves del Hades, no creo que nos la den.

_Aun así debemos intentarlo. Dijo Maya.

_No podemos rendirnos sin siquiera haberlo intentado. Cassian la apoyo.

_Yo pienso lo mismo, si saben cómo llegar al reino de las hadas dígannoslo, nosotros iremos.

Dantriel y Ethan se voltearon a ver.

_Está bien, los llevaremos a la tierra de las hadas.

_Gracias. Ethan dijo.

_No nos lo agradezcas, te arrepentirás cuando te llevemos ahí.

_Aun así gracias, ¿Cuándo podremos partir?

_Tendrán que esperar unos días, debemos ir al reino de los elfos a buscar algo para poder entrar en el reino de las hadas.

_ ¿Qué cosa?

_El tiempo en el reino de las hadas transcurre de manera diferente, lo que a veces puede parecer un día, a veces son años, por eso necesitamos unos medallones que nos ayudarán para que el tiempo no nos afecte y podamos regresar a tiempo, de lo contrario podríamos regresar cuando fuera demasiado tarde.

Cassian tenía la ceremonia de nombramiento en una semana, eso fue conveniente para él.

_Me parece bien.

_Entonces nos iremos inmediatamente, volveremos en unos días.

_Ya que van al reino de los elfos, podrían traer refuerzos, ¿No creen?

_No es necesario, cuando sea el momento los haré venir, pero les diré que estén atentos a nuestra llamada.

Cassian sabía que no lograría obtener nada más, él le agradeció y se despidieron, él y Maya se dirigían de regreso al palacio principal cuando ella le dijo.

_Tengo que ir a la ciudad ya que tengo algunos recados que hacer, te vere después.

_Deja que te acompañe.

_ ¿No estas ocupado?

_Si, pero…

_Entonces no es necesario, puedo ir sola, te veré en la noche.

_Pediré que te acompañen dos guardias.

No hace falta, no me perderé.

_Pero…

_Estaré bien Cassian, así que no te preocupes. Maya empezó a alejarse y le dijo.

_Regresaré a tiempo para la cena, hasta pronto.

_Ten cuidado.

_Yo siempre lo tengo.

Maya rasgo un pergamino mágico y desapareció en el aire. Cuando llegó a la ciudad fue a una taberna, ahí se encontró con su hermano Barto.

_Por qué has tardado tanto Maya?

_No regresare.

_ ¿Qué?

_He dicho que no pienso regresar contigo, cuando regreses quiero que se lo digas a padre.

_Él ordenó que volvieras.

_Lo sé, pero tengo hacer esto hermano.

_Tú no tienes ninguna obligación con nadie Maya. Barto estiró su mano hacia Barto y le dijo.

_Vamos, hay que volver a casa.

Maya ignoró la mano de su hermano, se dirigió a la puerta, antes de cruzar el umbral Barto tomo su mano y le dijo.

_Sabes que no puedes ir al reino de las hadas, si lo haces puede que jamás regreses, es demasiado peligroso.

_Aun así pienso ir, nada de lo que digas hará que cambie de opinión.


CAPÍTULO 135: NO SOY UN TIRANO


Abril iba a levantarse de la cama, pero Alessandro la detuvo.

_ ¿A dónde crees que vas?

_Hoy tengo clases de baile y también clases con sir Gabriel.

_El médico dijo que debías descansar.

_Estoy bien, además el baile será dentro de pocos días, no quiero ser avergonzada cuando llegue el día del baile por no saber bailar.

_Eso no pasará, ese día tú serás la mujer más deslumbrante y hermosa del lugar, todos estarán tan absortos por tu belleza que, aunque te equivoques no se darán cuenta.

_Aun así yo quiero hacerlo perfecto, quiero que todos vean que soy digna de estar a tu lado.

_Eso no es así, en realidad soy yo el que no es digno de estar a tu lado.

Abril se levantó y le dijo.

_Aun así no quiero que los demás hablen de mí.

_Si alguno lo hace cortaré su lengua, así no volverá a decirlo.

_ ¡no!

Alessandro al ver la reacción de Abril se río y le dijo.

_Era una broma, no pienso hacer eso, no soy un tirano. Ella puso una mano en el pecho de Alessandro y le dijo.

_Estoy bien, deja que realice mis deberes, si me encuentro mal prometo descansar.

Alessandro le acarició el cabello y respondió.

_De acuerdo, pero prométeme que no vas a excederte.

_No te preocupes, no lo haré.

Alessandro al ver a Abril tan decidida no siguió insistiendo para que se quedará descansando, él le dio un beso en la frente, se despidió de ella y se fue a su oficina.

A media mañana Cassian fue a su oficina y reportó todo lo que había acontecido cuando habían ido a ver a los elfos. Cuando Cassian terminó de hablar Alessandro guardó silencio durante un momento, cuando por fin habló le dijo.

_Al parecer en este mundo hay más razas de las que me imaginaba.

_Si te soy sincero yo aun no me lo creo, hadas, elfos, criaturas nacidas de la oscuridad, creo que estábamos mejor cuando solo teníamos que pelear con bandidos y ejércitos humanos.

Cassian se asomó al ventanal que había a espaldas de Alessandro y le dijo.

_A veces siento que no estamos preparados para esta nueva guerra que se nos avecina.

_No eres el único que se siente de esta manera, yo también me siento igual, pero, aunque nuestro futuro sea incierto y se presente oscuro, no me rendiré, lucharé por mi reino y por todo lo que amo hasta mi último aliento.

_Y yo estaré a tu lado, protegiendo tu espalda, como en los viejos tiempos.

_Hace tiempo que no practicamos, ¿quieres que choquemos espadas?

_ ¿No tienes trabajo pendiente?

_Siempre tengo trabajo pendiente, es un sinfín, así que por qué no vamos y entrenamos un poco, necesito despejarme, después continuaré con mi trabajo.

_Entonces vamos.

Alessandro y Cassian fueron a la sala de

Entrenamiento, todos los guardias y caballeros se mostraron muy sorprendidos al ver a Cassian que caminaba sin que la pierna le flaqueara.

Cassian al notar que todas las miradas se centraban en él dijo.

_Todos me ven.

_Deben de estar sorprendidos, hacía mucho que no venías aquí.

_Si, espero dar la talla en este entrenamiento.

_Tú siempre has sido un genio con la espada, estoy seguro de que lo harás bien.

_No creo ser un genio, solo me esfuerzo más que los demás, aunque últimamente no suelo hacerlo.

Cada uno escogió una espada y empezaron el entrenamiento, mientras sus espadas chocaban Alessandro preguntó.

_ ¿Cómo van las cosas entre tu y esa muchacha Maya?

_Bien, supongo.

_Vaya respuesta más atípica.

_Ella me ha dejado en claro que nuestra relación no avanzara.

_Entonces has que cambie de opinión.

_Lo dices como si fuera algo fácil de hacer.

_Quizás no sea fácil, pero tampoco es imposible, así que inténtalo, si es que en verdad la quieres.

Cassian no estaba muy seguro de cuáles eran realmente sus sentimientos por Maya, como no quería contarle eso a su hermano cambió de tema.

_Iré con Maya a buscar la llave del Hades.

_ ¿Qué?

_Tú no podrás ir y no me fio de que ella vaya sola con los elfos, aun no tienen mi confianza.

_La mía tampoco, aunque nos están ayudando siento que tienen intenciones ocultas, no nos dicen toda la verdad.

_Yo pienso igual.

Alessandro dio una estocada con su espada mandando a volar la espada de Cassian lejos, él le dijo.

_Creo que estoy algo oxidado.

_Si, deberías practicar un poco más. Gabriel apareció, Alessandro al verlo dijo.

_Al parecer mi tiempo libre se acabó.

_Su majestad, le recuerdo que aún tiene algunos asuntos que atender.

_Si, si, ya lo sé, siempre hay algo que atender y asuntos que tratar, me pregunto cuándo será el día en el que tendré algo de tiempo para mí.

Gabriel respondió sin tapujos.

_Cuando se muera podrá descansar eternamente, ahora cumpla con sus obligaciones su majestad, ya que cuando no lo hace mi trabajo no para de aumentar, a veces no puedo ni volver a casa.

_Ya entendí, deja de quejarte, nos veremos después Cas. Mientras caminaban por los pasillos de regreso a la oficina, Alessandro y Gabriel se encontraron con el duque Alfonso Vampel, él se veía furioso, hizo una reverencia un tanto brusca frente a Alessandro y dijo.

_Saludos a su majestad el rey.

_Saludos duque Vampel.

_Su majestad me podría conceder una audiencia.

_En estos momentos estoy muy ocupado duque Vampel, quizás en otra ocasión.

_Por favor su majestad, no le quitaré mucho tiempo.

_Lo siento, pero…

_Por favor su majestad, hágalo por los lazos que nos unieron durante tantos años.

Alessandro no quería tratar con el duque Vampel, él era un viejo zorro que lo único que daban eran problemas, así que acepto a darle una audiencia antes de que hiciera algo peor.

_ Está bien, vamos a mi oficina, aunque debe de ser breve como sabrá soy un hombre ocupado.

_Lo sé y seré breve.

El duque lo siguió hasta la oficina, al entrar Alessandro se sentó en la silla de detrás del escritorio y dijo.

_ ¿Qué es lo que quiere el duque para insistir tanto por una audiencia?

_Es sobre mi hija Victoria, escuche que le han prohibido la entrada al palacio, ¿Quisiera saber por qué?

_ ¿En verdad no lo sabe duque?

_Victoria dijo que había sido por un pequeño malentendido.

_ ¿Un pequeño malentendido?, ella puso espías en mi palacio e intentó atacar a mi esposa, si su castigo ha sido tan débil es gracias a la amabilidad de mi esposa, pero yo no soy tan amable como ella así que no me tientes.


CAPÍTULO 136: PRÍNCIPE DE LA OSCURIDAD


Alfonso apretó sus manos en un puño, estaba furioso, pero tuvo que controlar su ira y agachar la cabeza, hizo una reverencia y dijo.

_Agradezco la amabilidad de su majestad, lamento haberlo interrumpido, ya no le quitaré más su tiempo, me retiro.

Antes de que Alfonso se retirara Alessandro le advirtió.

_Duque, espero que mantenga a su hija bajo control, aunque ella fue mi prometida alguna vez, Abril es mi esposa y mi reina, una ofensa contra ella la tomaré como una ofensa contra mi persona y ya sabe cuál es el precio a pagar por traición.

_Lo sé su majestad, prometo que mi hija no volverá cometer tal impertinencia con su reina.

_Eso espero.

Después de que Alfonso saliera de la oficina, Gabriel dijo.

_Me parece que el duque puede llegar a dar problemas en un futuro, ha acumulado demasiado poder y se cree superior a todos, solo agacho su cabeza por prudencia, pero no le extrañe una traición por su parte.

_ Eso ya lo sé, en realidad él nunca me apoyó para ser rey, él apoyaba a Cassian, pero las cosas cambiaron cuando sufrió la lesión en su pierna.

_Por eso la apresurada ceremonia de nombramiento de título del príncipe Cassian.

_Así es.

_Deberíamos mantenerlo bajo vigilancia.

_Si, envía hombres a que lo vigilen y procura que no se dé cuenta, no quiero ponerlo en sobre aviso, cuando termine todo esto de la guerra, me ocuparé personalmente de él.

Alfonso salió de la oficina del rey hecho una furia, estaba tan molesto que hubiera destrozado todo a su paso si no siguiera en el palacio real. Él había caminado sin sentido, nublado por la ira y no se dio cuenta que se había desviado del camino, él iba a dar media vuelta y regresar cuando de pronto vio a la princesa del reino de Laios, al verla él sintió como si algo en él le gritara que debía huir, como no tenía tiempo de hacerlo se escondió detrás de un pilar cubierto de enredaderas que lo dejaban a cubierto. Cuando ella pasó todo su cuerpo se estremeció y por poco cae al suelo.

Mientras caminaba por el pasillo Abril se detuvo un momento en el pasillo, sintió como si su magia de luz se activará ante un peligro, ella miró a izquierda y derecha, pero en el pasillo solo estaba la sirvienta que la

Acompañaba, ella pensó que quizás era su imaginación que le estaba jugando una broma y continuó su camino.

Alfonso no salió de su escondite hasta que Abril desapareció al doblar en una esquina, aunque ella se había alejado, él siguió sintiéndose mal y se apresuró a llegar a su carruaje que lo estaba esperando en la entrada, al entrar a su carruaje uno de los sirvientes que lo acompañaba al verlo sudoroso y tembloroso preguntó.

_Duque, ¿Se encuentra bien?

_Sácame de este lugar.

Al llegar a su mansión y bajar del carruaje, Victoria se acercó a él, le estaba esperando, quería saber cómo le había ido, si la restricción que le habían puesto de entrar al palacio había sido revocada.

_Padre, ¿Cómo te fue?, ¿Alessandro revocó mi castigo?, ¿Podré asistir al baile que se realizará en unos días?

Alfonso sentía que la cabeza le zumbaba, él le gritó muy enfadado.

_Cállate, no me encuentro bien.

_ ¿Quieres que mande a llamar a un médico?

_No, solo quiero que me dejen solo, que nadie se atreva a interrumpirme o cortaré su cuello.

Victoria quedó muy sorprendida ya que su padre siempre había sido muy complaciente y amable con ella, él nunca le había gritado antes, no importaba en qué lío se metiera, él nunca elevaba su voz.

Alfonso fue hasta su despacho dando trompicones, al cruzar el umbral de la puerta él cerró la puerta de golpe. Solo en su despacho una sombra tan espesa como la tinta salió de él, aquella sombra se retorcía como si algo le doliera, Alfonso no entendía qué era lo que estaba pasando, de pronto se abrió una puerta que apareció de la nada de una pared y de ella salió un chico joven de algunos 18 años, él miró con desdén la sombra que yacía a sus pies retorciéndose y le dijo con una expresión impasible en su rostro.

El rostro de aquel muchacho apuesto de pelo rojizo era una máscara indescifrable, cuando por fin articuló palabra su voz fue fría como hielo haciendo que Alfonso temblara.

_ ¿Qué es esto?, ¿Qué le has hecho a la oscuridad?

Alfonso postró su rostro al suelo y con la voz temblorosa respondió.

_Yo no he hecho nada su majestad príncipe Enzo, solo fui al palacio y cuando la princesa Abril pasó a mi lado la oscuridad dentro de mí se estremeció, era como si le temiera.

_ ¿Por qué la oscuridad se estremecería al ver a esa perra inútil?

_No lo sé su majestad.

Enzo usó una botellita y selló la oscuridad dentro de ella, lo guardó en su bolsa y le lanzó otro pequeño frasco que contenía unas piedras negras.

_Te daré esto, pero más te vale que esto no se repita, mi padre no se complacerá si esto vuelve a suceder una segunda vez.

Alfonso sacó las pequeñas piedras negras de la botellita y las apretó con fuerza, de ellas salió una oscuridad espesa que lo envolvió por completo, Alfonso se sintió renovado, todo dolor parecía haber desaparecido por completo. Él se inclinó ante Enzo y le dijo.

_Muchas gracias su majestad, príncipe Enzo.

_Que esto no vuelva a repetirse o lo pagarás muy caro.

Enzo regresó por la puerta que había entrado y desapareció de la habitación. El apareció en la sala del trono donde su padre Vritra Venobich se encontraba y le dijo.

_Padre, he visitado al duque Alfonso Vampel del reino de Cosset, la oscuridad que había dentro de él fue expulsada de su cuerpo.

_Eso no puede ser posible.

_Si no hubiera visto la oscuridad retorciéndose a sus pies yo tampoco lo hubiera creído, él dijo que la oscuridad dentro de él empezó a retorcerse después de toparse con mi hermana mayor en el palacio real.

_ ¿Acaso esa perra aún sigue con vida?

_Eso parece y por lo visto, se ha ganado el favor del rey.

_Escuche que pronto tendrán un baile, envíales un pequeño regalo y observa todo lo que acontezca.

_Como desees padre.

_Vigila a esa perra de cerca, asegúrate de ver que es lo que hace, ella no poseía ningún poder, me gustaría volver a comprobar algo, que los regalos que envíes vayan directamente hacia ella cuando sean liberados.

Con una gran sonrisa dibujada en su rostro, Enzo respondió.

_Así lo haré padre.