La temática de esta triste historia...

El arte de la Psiquiatría

Kaya

Me despierto, ya en casa, una persona me observa sentada a los pies de mi cama, James.

-Hola,princesa. -Dice, pero no con una sonrisa como suele hacer al saludarme, no ahora esta triste. Me siento en la cama y lo miro, él suspira- No quiero que te enojes, yo no tomé la decisión, fueron papá y mamá. -Sus ojos se llenan de lágrimas y se cubre la cara con las manos, me acerco a él.- ¿Qué sucede, James? ¿Qué escogieron? - Él niega con la cabeza.- ¡Un hospital psiquiátrico!¡Te enviarán a un Hospital psiquiátrico! -Exclama y la sangre se me hiela ¿Que? ¿Un hospital psiquiátrico? -

-¿P-porqué lo harán?- pregunto exasperada.

-En serio tengo que recordarte?

-Ah...Por eso...-bajo la cabeza y el me toma de la barbilla, obligándome a mirarlo.

-No te avergüences de lo que hiciste, son marcas de la guerra que libraste.

-¿Con quien?- pregunto con los ojos empañados.

-Contigo misma.-Suspira, y se levanta, luego camina hacia la puerta. Antes de irse, se da la vuelta, me mira y suspira- Empaca tus cosas, princesa.- voltea y se va.

¿Mis cosas? ¿Me dejarán llevar mis cosas a un Hospital psiquiátrico? ¿Porqué? No importa, haré lo que James dijo y las empacaré. Me llevaré todo lo importante. Empaco un poco de ropa, jeans especialmente, también empaco la cajita que me dio James y unas cuantas fotografías de nosotros dos juntos.

-¿Estas lista, Cariño?-No es James, es una voz femenina. Mamá. Me doy la vuelta y le lanzo una mirada desafiante.

-No soy tu cariño.- Digo haciendo comillas con los dedos en ¨cariño¨. Me doy la vuelta, ella se acerca a mi por la espalda y observa las fotografías.

-¿Porqué no tienes una foto de todos juntos? Ya sabes una con nosotros...

-No quiero llevar algo que hará homenaje a quienes solo me quieren destruir...

-¿Dices que nosotros queremos destruirte? Kaya, ¿Nosotros? ¿Porqué dices eso?

-¿No es obvio? Me enviaran a un hospital psiquiátrico, mamá -me doy la vuelta, ella me lanza una mirada asesina- PSI-QUIÁ-TRI-CO.- Grito enojada.

-¡Intentaste suicidarte Kaya! ¿Entiendes? SUI-CI-DAR-TE.-baja la voz y se acerca-

-Sé lo que intenté hacer mamá! ¡Lo se! ¡Y nunca me arrepentiré! ¿Acaso te importa? No ¿verdad? ¡No te importa! ¡Si te importara no me harías esto! -Grito, pero ahora, con lágrimas resbalando por mis mejillas. Pero no con lágrimas de dolor, no, son lágrimas de rabia.

-Cariño... Claro que me importas... ¡Mucho! Por eso hago esto, no quiero que lo vuelvas a intentarlo.-baja la cabeza y al mismo tiempo la voz.- Por favor Kaya, recoge tu maleta y ve al auto. Te espero.- Dice y sale de la habitación. Quito las lágrimas que aún caen por mis mejillas, recojo mi maleta y salgo al porche de casa.

Llego al hospital psiquiátrico, bajo del auto y veo un gran anuncio que dice ¨Hospital Psiquiátrico Shermon Price¨. Entramos al hospital y la chica de la recepción, Cassandra, nos dice que un psiquiatra nos espera para una entrevista en la sala 8-A. Buscando la sala tuvimos que pedirle a tres guardias que nos indicaran por donde era, llegamos a la sala y el doctor le dice a mamá que salga.

-¡Muy bien! Señorita Colton ¿verdad?, soy el doctor Hodgman.

-Hola...Dr. Hodgman.

-Umm... Okay... Kaya, siéntate allí -señala un pequeño sofá de color blanco, me siento en el sofá y él se sienta en un sillón negro de cuero sintético a mi lado.

-Vale, Kaya, te voy a hacer unas cuantas preguntas, responde con toda sinceridad.

-¿Es necesaria la sinceridad?

-Si

-Okay...Comience

-Muy bien...¿Como te sientes hoy? -¿Sinceridad? No puedo ser sincera con estos monstruos.

-Bien. -Él suspira, casi puedo sentir como pierde la paciencia lentamente y sonrio.

-Vale...¿Cuales son los motivos qué tuviste para intentar suicidarte?- Esta vez yo comienzo a perder la paciencia.

-Son privados, no se los diré , ni a usted ni a nadie.

-Vamos, Kaya ayúdame con esto.-su rostro se ilumina y me mira- ¡Si me dices podrás evitar quedarte en este hospital!

-Miente, ¿En serio cree que caeré en su trampa? Le preguntaré algo, ¿Porqué hace esto?

-¿Hacer qué?

-Esto, o sea, ¿Porqué es psiquiatra? ¿Porqué le gusta la psiquiatría?

-¡Oh! ¡eso! Bueno... Es que... Es como un arte -Su rostro se ilumina al encontrar la palabra ¨perfecta¨ para describir la psiquiatría-¡Si! ¡Eso! Es un arte -levanta los brazos escribiendo algo en el aire.- Es el arte de la psiquiatría.

-¿Por qué es un arte? -su rostro vuelve a endurecerse careciendo de expresión alguna.

-Aquí soy yo quien hace las preguntas.-se acomoda de nuevo en sus silla.- Recuéstese de nuevo.

-Okay...- me acomodo en la silla de nuevo con una sonrisa y continua haciéndome preguntas.

Una hora después salimos de la sala, él un tanto decepcionado, yo con una sonrisa falsa. Ambos con ganas de escapar. Me asignan la habitación 318. Es una habitación grande, con paredes tan blancas como un diamante, el suelo es de cuarzo y solo tiene una ventana con barrotes de hierro, una cama semidoble y una mesita de madera de nogal. Pongo mi maleta encima de la cama y comienzo a desempacar todo.