Década

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En el umbral de la memoria, una puerta se abre,
rechinando sus bisagras, como un suspiro que se escapa.
Un mundo de recuerdos, dormido durante años,
despierta con fuerza, como un río que desborda.

En el laberinto de la nostalgia, me pierdo,
buscando el hilo de Ariadna, que me guíe a través del dolor.
Pero el laberinto es un espejo, que refleja mi alma,
y en su profundidad, encuentro un vacío que no se llena.

En la penumbra de la ausencia, una figura se esconde,
un fantasma que me acecha, con ojos que me observan.
Pero cuando intento tocarlo, se desvanece en el aire,
dejándome con la sensación de que nunca estuvo allí.

Y sin embargo, siento su presencia,
un eco que late en mi corazón, como un tambor que no cesa.
Un recuerdo que no se borra, una huella que no se efface,
un tributo a aquel que se fue, pero que sigue vivo en mi memoria.

Abuelo, tu recuerdo vive en mí.
2024

poemas al viento vol.2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora