Espero que estés feliz.
Me pregunto si vas a estar feliz también cuando
años después
me intentes llamar para mi cumpleaños
y te deje en tono.
Me pregunto en qué momento de tu vida
te vas a dar cuenta
de que lo único que nos une es una casa,
y que cuando me vaya,
no voy a pensar volver.
No sé si algún día
te vas a dar cuenta
de que me estás perdiendo
para siempre.