Arlette Chadwick es enviada por sus padres a un pueblo en Colorado para "recapacitar" sobre su mal comportamiento escolar.
~ My life with the Walter boys fanfiction ~
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En el auto, de camino al juego, los hermanos Garcia no dejaban de pelear y pegarse por sobre Arlette, quien parecía ya acostumbrada a eso
—Dejen de atormentar a la pobre Arlette —comento Danny desde los asientos de adelante, lo cual no funcionó mucho, ya que siguieron peleando hasta que llegaron.
Ya afuera del auto, la rubia se veía sorprendida, y lo estaba, si bien en su antigua escuela en Houston, iba a los partidos, el ambiente no era nada comparado con la emoción y apoyo de parte de la gente de Silver Falls.
Había gente con butargas con la camiseta del equipo, personas con carteles de apoyo, otras con la cara pintada e incluso había un chico con la letra del equipo pintado en la panza.
La rubia buscaba a alguien con la mirada, cuando ese alguien llego al lado de ella
—Hola Arley —saludo Grace
—Hola Grace
Se reunieron en un corto abrazo y comenzaron a caminar
—¿Vamos por un batido? —pregunto la de rulos
—Vamos
Se dirigieron al puesto de batidos, cuando la rubia vio a alguien más a lo lejos.
Miraba con detenida atención como el mayor de los Garcia y Olivia se veian muy felices hablando
—Oye Grace —llamo la atención de su amiga— ¿De que hablaran tanto?, ¿Es su novia o que? —siguio hablando cruzándose de brazos
La otra chica trato de buscar con la mirada lo que su amiga estaba viendo, y solto una sonrisa al ver de quienes se trataban
—¿Y esa pregunta Chadwick? —dijo sin dejar de sonreír
Arlette fruncio el ceño levemente al ver como la chica la miraba —Solo una pregunta, curiosidad
—Claro, "curiosidad", pero no, no es su novia. Aunque hace un tiempo hubieron unos rumores
—¿Rumores?, ¿que rumores? —pregunto poniéndose frente a Grace
—¿Eso también es curiosidad?
La rubia volteo los ojos disimuladamente y se dio media vuelta para comprar el batido. Acababa de pagar cuando un castaño de cara conocida llego a un lado de ella
—¿Que tal nueva? —saludo Jake poniendo las manos en sus bolsillos
—Hola —devolvió el saludo sin muchas ganas
—Mhm. Me gustaría hablar contigo, a solas —dijo acentuando la última palabra mirando a Grace
La de rulos lo miro indignada, para después empezar a caminar en otra dirección, dejándolos solos, otra vez.
—Tu y yo teníamos una charla pendiente chica
—¿Sobre qué? —pregunto la rubia alejándose un poco del chico dado a la cercanía que este había tomado
