ANNA (El hechizo de sus ojos)

CAPITULO 4

(Z.Z.Z).

Me observé en el espejo,mi rostro cubierto de sangre era lo que podía ver, sonreí,me veía tan jodidamente loco.

Es increíble como engañaría a cualquiera con este rostro.

Esto era enfermo pero lo sentía necesario,al menos para mí,si no hacía eso no me sentía satisfecho.Me aproximé al patio trasero y bajé las escaleras.Entré en aquel sótano,bajando cada escalon cada vez ansiando más llegar al fondo,el corazón me latía con fuerza,no por miedo,no por lo que haría sino por los deseos que yacían en mi e invadían mi mente de hace rato,era oscuro pero aún así pude verla con claridad.

Indefensa, atada a mis cadenas,gordas,grandes y de hierro,pero no solo eso la tenía atada.

Su obsecion por mí la estaba atando.

Porque sabía como se sentía al verme, sabía que a pesar de que su cuerpo temblara de miedo me deseaba,deseaba verme dominándola y no siendo más que una sumisa para mi.Porque eso era lo que me encantaba,ver como jugaba con su mente,luego con su cuerpo y por último,gozaba de su sangre y su sufrimiento,gozaba de sus gritos agonizantes y súplicas por sus vidas.

Sonreí de lado y tomé una vez más aquel bate apoyándolo en mi hombro.La miré ,cada parte de ella, había sido mía.

Vamos,listos para jugar de nuevo.

Encendí la luz dejando que todo se viera a mi al rededor.

Esas máquinas,me encantaban los juegos de tortura con los que había jugado con mis otras víctimas.Tanto juegos de placer como de sangre,gozaba cada uno de los momentos pasados en ese lugar.

Y después de ella tenía una en mi lista y creo que sería mi favorita.

Mi princesa de ojos grises.

Tan hermosa y perfecta,me tenía tan loco como un psicópata,espera ¿Psicópata?jaja si,y yo era el único que sabía sobre eso.Era el tipo de chica que te ponía aquellos límites que no le podías arrebatar y si lo intentabas ella se ponía a la defensiva.Era el tipo de chica que te volvía loco solo porque era diferente al resto.

Lo se,la había estado observando.

Había estado estudiandola para saber como manejarla.

Los ojos de la morena se fruncieron al impacto de la luz.Me encantaba verla así,vulnerable después de aver probado fuerzas conmigo y se lo dije.Le dije que era un monstruo pero no se lo tomó enserio.

O eso era lo que yo quería que creyera.

Manipulación.

Esa era mi palabra clave.

Sangre.

Puede que ese sea mi segundo nombre.

Maldad.

Me describía.

Muerte.

La única escapatoria si te enredas conmigo.

Su cuerpo desnudo se escurrió a un lado de la habitación,no lloraba ,solo mantenía esa mirada fría que tanto me provocaba.A pesar de tenerla con comodidades,se veía un poco descuidada,me había dignado a bajar un colchón para que pudiera dormir bien,o al menos se acostara en algo cómodo,tampoco la haría sufrir de esa manera.

Me aproximé a ella mientras silvaba, dejé caer la colilla al suelo para luego pisarla,cuando estuve a solo unos metros apoyé el bate al suelo y dejé descansar mi mano en este para agacharme y mirar su rostro.