Cuando Seokjin no encontró a RJ en su cama esa misma tarde, asumió que su recuerdo de llevarlo a su habitación había sido falso, y se dedicó a buscarlo por toda la casa. Excepto, obviamente, por las habitaciones de los demás.
Sin embargo, no tuvo éxito. No pudo encontrarlo ni en la cocina, ni en la sala, en ninguno de los baños ni en el lavadero*. Extrañamente ese simple hecho sólo lo frustró más y se terminó de acumular con las tensiones que habían surgido en el día. Seguía sintiéndose mal por las miradas que les dieron los bailarines.
Entonces se preguntó qué carajos había hecho con el peluche. No podía habérselo olvidado en la empresa, recordaba perfectamente haber cenado con eso la noche anterior. Recordaba haberlo agarrado y estaba seguro que lo llevó a su cama después de comer.
Por un momento suspiró enfurruñado, primero el terrible día de ensayo que terminó como la mierda, y ahora esto.
Estaba volviendo a su habitación, cuando pasó por la habitación de JungKook. El conejo rosado, el alíen con cabeza de corazón y su RJ estaban allí. Y aunque se preguntó por qué demonios JungKook tomaría su peluche, no se paró a pensar que eso era casi imposible. Jungkook no tenía motivo para entrar a su cuarto. Pero SeokJin ya estaba furioso metiéndose en la habitación del menor para agarrar su peluche.
En el momento exacto en que lo levantó, Jungkook se paró en la puerta con el cabello húmedo y una toalla colgándose del cuello.
―¿Qué haces en mi habitación?
Jin dio un salto del susto pero luego frunció el ceño y levantó el peluche para mostrárselo al menor. ―¿Por qué agarraste mi RJ? ¿En qué momento entraste a mi habitación?
―Yo no agarré tu estúpido peluche y mucho menos entre a tu habitación.
―¿Cómo no? Estaba aquí, en tu cuarto. ¿Por qué lo tomaste? Ni siquiera te gustan.
―Exactamente, ¿Por qué lo tomaría si no me interesa? Son peluches ―se defendió el maknae, como si eso explicara todo. ―Y son feos.
―Ya we, te pasas cabrón. ¿¡Que no viste tu fea cara!?
Seokjin se paralizó mirando a Jungkook. Y este abrió los ojos como platos. Ninguno de los dos había abierto la boca.
―¡Ven y dímelo mirándome a los ojos, niñito!
―Pffff jajajajaja.
Extrañados, ambos miraron al suelo, donde se suponía estaban los dos peluches y de donde venían las voces.
Y sí, los peluches estaban allí, solo que se movían de manera muy realista y hablaban con voces que se escuchaban muy humanas.
―Déjame ir, Tata, le voy calzar un guantazo ―Cooky se retorcía intentando alcanzar a Jungkook estirando sus pequeños brazos inútilmente. Tata por otro lado sólo se reía y negaba con la cabeza con sus extremadamente largos brazos envueltos en el cuerpo rosado del conejo, sin dejarlo ir.
―Eres un peluche, Cooky. Tus golpes hacen cosquillas
Al oír una tercera voz, Jin y Kook miraron al peluche blanco entre las manos del mayor.
―Lamento la presentación, Cooky es muy impulsivo—, dijo el peluche blanco tranquilamente.
―AAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHH.
Jin soltó el peluche de inmediato y corrió hasta la puerta donde Jungkook seguía gritando y señalando el peluche con el dedo como si eso pudiera evitar que el peluche hablara.
―Auch ―RJ se levantó del suelo haciendo su mejor esfuerzo por acariciarle la frente golpeada con sus cortos brazos. ―Eso fue descortés.
―¡HABLAN! ―gritó Jungkook. Y Seokjin detrás de él volvió a chillar.
―¡QUÉ ES ESO!
Aunque ambos escucharon el golpeteo de pasos ninguno le prestó atención, ambos miraron a la miniatura rosada que seguía tirando golpes al aire.
―Pues si wey, no mames. ¿Qué creíste? ¿Que era la voz de tu conciencia?
―Les juro que solo usa esas expresiones cuando se enoja. Luego habla normal ―explicó Tata.
―Bueno casi ―agregó RJ.
―¿¡Qué ocurre!? ―Taehyun apareció en el pasillo, y miró a los otros dos chicos parados en la puerta. ―Escuché gritos, ¿Qué pasó? ―preguntó, pero no esperó respuesta, se acercó a la habitación y se metió sin siquiera considerar un posible peligro.
Fue entonces que vio a los tres peluches. Cooky se quedó quieto mirándolo con sospecha, RJ movió su mano a modo de saludo y a Tata le brillaron los ojos.
―Tete ―dijo sonriendo.
Taehyung los miró estupefacto, la boca abierta casi hasta el piso, absolutamente confundido y cuando su peluche lo llamó, sólo pudo decir estúpidamente ―¿Tata?
Entonces el peluche se le acercó y empezó a estirar sus brazos hasta alcanzar el cuello de Tae, del cual se colgó para darle un abrazo. Taehyung no se movió.
―No entiendo nada ―dijo.
―Bienvenido al club ―le contestó el conejo.
―Tampoco sabemos qué está pasando ―acotó RJ.
Tata solo dijo: ―Tete.
―Taehyung quítate esa cosa del cuello, no sabemos qué es ―dijo Jungkook. A lo que Cooky de nuevo intentó irse a las piñas pero RJ lo detuvo.
―Es un peluche, Jungkook ―dijo SeokJin, a lo Jungkook sólo miró como diciendo "no jodas".
Taehyung por otro lado tomó a Tata entre sus manos. Cuando lo miró, empezó a sonreír. ―¿Estás vivo?
―Eso parece. ―dijo el alien.
―O ustedes tres están teniendo algún tipo de alucinación colectiva ―acotó RJ.
―Es un sueño. ―declaró Jungkook. ―Y me voy a despertar en cualquier momento. ―y salió de cuarto, sin mirar hacia atrás. SeokJin se quedó en su lugar, Taehyung aun miraba fascinado al peluche, y luego lo abrazó con fuerza, con pura felicidad en el rostro.
―Si es un sueño, es el mejor del mundo.
―Lu Shi 👻
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Make a Wish ; BTS + BT21
FanfictionTenían un trabajo. Un sólo trabajo. Diseñar un monigote que pudieran usar como marketing. Uno por cada miembro. Nada difícil. Qué tuvieran éxito y pasarán de ser simples sticker de chat para convertirse en una línea de ropa, peluches, maquillaje y s...