How to save a life [niniz - bbangsaz]

1. Teñir mi cabello de morado

Siseo mientras el agua fría hace contacto con la parte posterior de mi cabeza, el agua purpúrea clara cae en cascada alrededor del lavabo blanco de mi baño mientras paso mis dedos por mi cabello y asegurándome de que los químicos se enjuaguen: maldigo al fantasma de mi mejor amiga.

- ¿En serio, Dani, teñir tu cabello de morado? ¿Por qué no podías elegir algo más fácil y divertido como resolver crucigramas en los periódicos?

Después de asegurarme de que mi cabello está bien lavado o al menos lo más apropiado que pueda, mis manos encuentran la toalla a mi lado y la envuelvo en él, haciendo una mueca a medida que me limpio el cuello con los extremos de la toalla; antihiénico, lo sé, pero soy demasiado vaga para ducharme y en el proceso llenar mis increíbles azulejos de color púrpura. El daño en el lavabo tendrá que ser suficiente por ahora.

Salgo de mi baño y me pongo el pijama con facilidad, luego mis ojos pasan por encima del escritorio y camino lentamente hacia él para levantar un papel y tachar con un lápiz el primer ítem en la lista de mi mejor amiga.

- Bien, uno menos, quedan once. Esto no debería ser demasiado difícil - digo mientras me dejo caer en mi cama, leyendo la lista nuevamente.

Mis ojos se cierran momentáneamente cuando imagino a Danielle sentada en su habitación, con las piernas cruzadas y la lengua asomando por la comisura de sus labios, garabateando cosas que considera divertidas. Probablemente tenía el pelo recogido en un moño desordenado con cabellos rebeldes que adornaban su rostro, porque su cabello ondulado era incontrolable y nunca podía ser domesticado, pero a mí me encantaba de esa manera.

Estúpida.

Un golpe en mi puerta me devuelve a la realidad y rápidamente guardo su lista de deseos debajo de la almohada, entonces mi madre asoma su cabeza, sonríe y luego emerge completamente de la puerta.

- Solo paso a ver a mi hija - murmura mientras se sienta en los pies de mi cama y un ceño fruncido se abre camino en su frente - ¿Por qué la toalla es púrpura?

Me muerdo el labio en consideración, ¿debería contarle sobre la lista de Dani? Ella definitivamente lo entendería, después de todo, mi madre siempre decía que Danielle era como una hija para ella y que nunca la trataría de otra manera.

- ¿Bien? - ella insiste.

Suspiro antes de levantar la almohada y trato de aplanar las pocas arrugas en el papel mientras que mamá se acerca a mí intrigada, abriendo mucho los ojos cuando le entrego la lista y ella nota la letra; ella siempre criticaba la mía y le gustaba la de Dani.

"Tu letra es como si alguien hubiera forzado a un jardín de infantes diestro a escribir con la izquierda" solía decirme.

- ¿Esto? ... ¿Esto es de ella?

Se puso una mano en la boca y acarició el papel con la otra sin que yo confirmara su pregunta. Una sonrisa triste apareció en sus labios, un gesto triste y renuente, pero una sonrisa a pesar de todo.

- ¿Por qué no me lo dijiste antes? - preguntó, pero esa pregunta no iba solo hacia mí, también iba hacia Dani y yo lo sabía porque me había repetido mil veces la misma pregunta; pero no sirve de nada, nunca obtendré la respuesta. Ya no.

Mi madre asintió con la cabeza y dobló el papel cuidadosamente para después colocarlo en mis manos, observándome en comprensión.

- Puedo ayudarte con él "aprender otro idioma".

Levanté mis cejas escéptica.

- ¿Sabes hablar otro idioma aparte de vietnamita e Inglés? Mamá, eres astuta.

Ella se rió entre dientes, pero sacudió su cabeza.

- Una amiga mía toma clases particulares de español. Puedo hablar con ella si quieres.

Abracé a mi madre con todo lo que tenía en ese momento, aunque no era mucho.

- A Dani le gustaría mucho eso.

Mi madre se levantó y se preparó para irse.

- Sé que lo haría. Buenas noches cariño.

- Buenas noches mamá.

Cuando ella se va, la puerta se cierra detrás de ella mientras yo me acomodo debajo de mi edredón, mirando el resplandor desvanecido de las pegatinas oscuras en mi techo.

- Buenas noches a ti también, Dani.