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Capítulo Cinco

—¿Enserió te vas a casar? —Me pregunto Mina—. Jamás lo espere de tu padre.

Eyol no decía nada, al parecer estaba sumida en sus propios pensamientos. Decidí contarle todo a mis mejores amigas, ellas me comprendían mejor que nadie, no quería ocultarles nada, meno este matrimonio por contrato que se venía.

—Sigo sin asimilar todo esto —Pronuncie decaída, estaba triste.

—Pero tu futuro esposo es guapo —Eyol hablo por primera vez.

—¿Y qué? Eso es lo que menos importa ahora, me casaré sin amor, y para mi eso era lo más importante en una relación, no quiero esto —Acaricie mis mejillas sacando rastro de lágrimas.

—Lo lamento amiga —Mina me acaricio el brazo—. Pero ve el lado positivo, no es cualquier desconocido, es amigo de tu papá y además la primera vez que lo viste nos dijiste que te parecía guapo.

—Para mi papá no será un desconocido, para mí lo es ¿Es que acaso no entienden? No quiero atarme a un hombre que no amo.

—Lo amaras, solo deja que el tiempo pase —Eyol acarició mi cabello en forma consoladora.

—Lo dudo mucho, lo estoy odiando ahora, no quiero pensar que mi primera vez sea con un hombre que no amo y no conozco.

—Solo deja que el tiempo decida.

No quería hacerle caso a Eyol, pero en el fondo le daba la razón, aún no conocía muy bien a Jungkook, quien sabe lo que podría pasar más adelante, no quería pensar en ello.

—Debo irme —Le di un último trago a mi jugo de frutilla—. Tengo prueba de vestido en unos minutos.

—¿Quieres que te acompañemos? Será emocionante —Eyol se puso de pie.

Si, emocionante que su mejor amiga se case con un hombre que no conoce para nada, suspire.

—Esta bien —Murmuró por lo bajo—. ¿Quieres venir Mina?

Ella solo asintió y las tres nos fuimos en mi auto hacia mi casa.

—Hija, ya esta todo listo, solo debes escoger el que más te guste —Hablo mi padre apenas entramos a la casa—. Que bueno que trajiste a tus amigas así te ayudarán a escoger el mejor.

El vestido y la fiesta era lo que menos me importaba, solo quería acabar con esto de una vez por todas así que solo asenti y seguí a mi padre hacia una habitación junto con las chicas siguiendome el paso.

—Qué emocion amiga, es la primera vez que una de nosotras se casa —Eyol parecía la más emocionada de las tres, como si fuera ella la que se iba a casar.

—Tranquilízate —Mina la tomó del brazo—. Recuerda que Jieun es la novia no tu.

Suspiré para acercarme a la modista quien me enseñó varios vestidos, mis amigas estaban emocionadas, por lo menos Eyol, en cambio Mina estaba más normal, elegimos varios vestidos que en mi opinión hermosos si estaban, solo que no le ponía tantas ganas a esta boda por lo tanto mis emociones estaban escondidas.

—Amiga te vez preciosa —Halago Eyol—. Estos vestidos parecen hechos para una princesa de Disney.

—La verdad que si amiga pero los que escogimos resaltan tu figura —Mina me miró de arriba hacia abajo dándome el okey con su pulgar en alto—. Mira nomas como resalta tu gran trasero y esa cintura de avispa que tienes, y deja al descubierto tus senos, simplemente perfecta.

La mire un poco sonrojada por sus palabras, Mina era así, muy directa, la modista se acercó a nosotras un poco nerviosa.

—El joven Jeon está aquí y desea verla —Las chicas se pusieron nerviosas de repente y yo puse mala cara.

—Dile que cuando termine aquí lo veré allá —Hagarre el vestido con mis dos manos para sostenerlo y entrar a cambiarme pero algo me detuvo.

La puerta abriéndose y Jeon entrando por ella, las chicas se pusieron enfrente mío tapando el vestido, por lo tanto no pudo ver nada o eso creo.

—Vaya, no sabía que estabas en prueba de vestido —Dijo acercándose a mi—. No puedo verte bien pero apuesto a que estás preciosa.

Las chicas tosieron un poco para que notará su presencia.

—Oh, me disculpo, mi nombre es Jeon Jungkook, él prometido de Jieun —Se presentó con las chicas quienes lo saludaron educadamente.

—Jieun había dicho que eres guapo pero no pensé que tanto —Soltó Eyol, la fulmina con la mirada aunque no pudiera verme se que la sintió.

—¿Enserió dijo eso de mi? —Podía sentir su sonrisa seductora a través de las chicas, aunque no pudiera ver su cara sabía que estaba sonriendo como un tonto.

—Sí, y no mentía, para nada —Termino Eyol.

—Y además de eso sexy, no mentiste amiga —Termino por hundirme Mina.

Carajo, tenía que ser directa justo ahora, maldeci por dentro a mis amigas por haberme mandado al frente delante de Jeon, se que no lo olvidaría y me lo va a restregar en la cara, no quería verlo, no sabía cómo lo miraré a la cara después de este día.