Two.

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Las penas de amor a primera vista no duran toda una vida, pero sí un de par minutos.

Izuku al ver que estaba hablando con la pared se inculpó a sí mismo por dejar ir a semejante belleza y tardó en procesar todo un momento.

En su cabeza resonaba una y otra vez su propia voz regañandose "¡Estas idiota!" Y su estabilidad mental colapsó.

-¡La puta madre! ¡¿Por qué?!- gritó mientras que caía de rodillas en medio pasillo y abría los brazos tal cual actor melodramático-

Por el ruido, la puerta de al lado se abrió dejando ver a Shoto en su traje abatidor.

- ¿Midoriya? ¿Por qué estás en el suelo?

Izuku ya había pasado suficiente vergüenza por hoy, ya no tenía nada más que perder, así que pidió lo único que podría animarle.

- Todoroki-Kun, necesito un helado.

[...]

La noche llegó, y los cinco chicos llegaron a la recepción del evento.

Denki sí que se había esforzado, no había chica que los mirara y no babeara por ellos.

La atención se centraba en ellos, eran los chicos codiciados. Izuku fue con un cómodo smokin que acentuaba su figura, su pelo alborotado seguía tal cual y sus ojos verdes brillaban en la noche como un faro en medio del oscuro mar.

Entraron a la fiesta y cada detalle estaba muy cuidado, desde una barra libre hasta hermosas mozas que atendían dulcemente a todos.

Realmente era una fiesta muy al estilo US.

Siguió recorriendo el lugar hasta que encontró el que sería su mejor amigo toda la noche. Su confiable, inconfundible y hermoso sillón de fiesta. En cuanto encontró uno que se viera cómodo se aventó a él y con una copa en mano se dispuso a solo observar.

"Este cóctel, es algo fuerte pero estaré bien" pensó.

La dinámica normal de este tipo de fiestas era que durante las primeras dos horas un par de chicas se le acercase a tratar de sacar algún tipo de plática con él o hasta incluso su teléfono, mas luego de un rato se aburrían y lo dejaban para ir al centro de la fiesta. Entre más pasaba el tiempo, menos personas se daban cuenta de que él estaba ahí, sus amigos pasaban un rato con él y luego volvían a ligar o bailar.

Ya se estaba aburriendo cuando detrás tuyo apareció Mina, una de sus amigas de secundaria.

- ¡Buu!- exclamó mientras hacía un tipo de cara "espeluznante", que no lo era ni un poco, por cierto.

- Ay, vamos, Mina, ese truco ya no funciona conmigo.

- ¡Jum! Me funcionó bien toda la secundaria ¿por qué ya no funciona?- dijo sentándose a su lado- En fin, no vine por eso, ¿qué haces aplastado aquí? Vamos a bailar, ven.

Izuku solo negó con su cabeza.

-Sabes que no sé bailar, voy a hacer un hazmerreír.

Mina anticipando su respuesta empezó a jalarlo de los brazos -Si no lo intentas nunca, jamás aprenderás a bailar, ¡eres un chico guapo que tiene dos esmeraldas de ojos qué vergüenza podrías pasar!

- ¿Estás segura? - dijo dudando, eso realmente sonó a una víl mentira.

- Sí, y sabes qué, tu necesitas un empujón- soltó su brazo y comenzó a observar hacia los lados -¡Mozo, mozo! ¡tráigame el cóctel más fuerte que tenga!

- ¡¿Qué?!- Exclamó Izuku tratando de callar a su amiga - ¡Ay, no!
¡Espera, no!

Así empezó la primera ronda de la noche, no pasó mucho para que el peli verde se emborrachara y fuera a la pista de baile con los demás.

De arriba abajo era una bomba sexy que parecía haber salido de un desfile de modelos, jalaba las miradas de todos los presentes una y otra vez. A la una de la mañana, seguía con energía girando su saco sobre su cabeza mientras movía su cintura sensualmente. Lo mejor es que nadie lo juzgaba como él creyó en un inicio ¡todo lo contrario! Era el It boy de esa fiesta que no parecía que iba a terminar pronto.

Sero y Todoroki eran los otros que estaban más activos, entre los tres destrozaron la pista en todos los sentidos posibles, bailaron hasta abajo con todas las canciones y corearon cada una de ellas.

Denki y Kirishima grababan el momento sospechosamente desde un rincón, parecía que los tragos estaban haciendo efecto.

La fiesta siguió y ún con toda la diversión o energía del momento, él se sentía incómodo u observado. ¿Era su complejo volviendo a él? ¿O era solo efecto del alcohol? No sabía bien.

Llegó un momento en que se sentó en un mueble blanco y sin dejar su aura sexy de lado, pudo divisar con dificultad a una figura frente a él. Traía un hoddie negro encima y tenía unos penetrantes ojos que no se despegaron de él ni un momento después de verse.

Le dio una sonrisa traviesa y en respuesta aquella persona le hizo una seña.

" Nosotros.

Afuera.

Hotel. "

Midoriya después de un poco de esfuerzo al fin pudo ver a la persona detrás del hoddie.

Esa cara tan atractiva prendió algo en su ser, y eso se llama lascividad.

Con los tragos, su instinto sexual y el ambiente de desenfreno encima, solo pudo susurrar lo siguiente antes de ir a los brazos de esa persona.

- Con gusto, lindo.

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