PITBABE

Capitulo 4. Parte 1

Además de ser conocido como un gran corredor, otra cosa por la que son conocidas las celebridades como Pit Babe es por su vida sexual, que tiene mucho que contar. Ya sea la pasión aparentemente ilimitada, el temperamento ardiente y el comportamiento prepotente, incluso las extrañas preferencias de Babe que, según la gente del sector, son las más raras y difíciles de satisfacer.

Una de ellas es que Babe prefiere tener sexo sólo con Alfas. El famoso corredor nunca le dio a un Omega una segunda mirada. No importa lo bien que se vea.

Por supuesto, tener un compañero sexual con un alfa no es extraño, si no hay condiciones que la pareja deba seguir. Una de ellas es que no deben besarle y liberar sus feromonas alfa mientras tienen sexo. Basándose en los cientos de alfas con los que ha tenido contacto, Babe no dudará en detener sus actividades en la cama si liberan feromonas en exceso. Básicamente, nunca le gustó el olor de las feromonas de nadie. Se veía obligado a mantener relaciones sexuales para liberar su necesidad, siempre y cuando pudiera mantener su repugnancia por el olor.

Pero desde hace un mes, el comportamiento de Babe, que solía cambiar de pareja, parece merecer especial atención. Esto se debe a que se ha difundido la noticia de que Babe, que antes nunca se fijaba en un alfa joven como pareja, ahora es rebatida porque hay un alfa joven que siempre sigue al hermoso alfa a todas partes como una sombra.

Por supuesto, el rostro o la identidad del joven siguen siendo un secreto. Babe no deja que nadie vea la cara de su compañero favorito, aparte de su mejor amigo, Way. Por lo tanto, esto ha sido un tema candente de discusión en los círculos de carreras que planteaba muchas preguntas, como quién es el joven, de dónde viene o qué tiene de bueno para que Pit Babe sea tan posesivo y esté siempre a su lado.

Pero hasta ahora nadie ha podido dar con una respuesta, porque Babe lo escondía muy bien. Además de esconderlo y protegerlo de los demás, Babe también lo mima mucho. Imagínate, cerró todo el estadio durante un día entero para que su joven alfa favorito pudiera aprender a conducir en la pista.

"No des tirones al volante. Te dije que lo giraras a las 3 y a las 9".

También empezó a entrenarlo él mismo como nunca antes lo había hecho.

Sentado junto al conductor, Babe trató tranquilamente de enseñar a Charlie técnicas de carrera. Sin embargo, le resultaba difícil contenerse para no maldecir demasiado. (Lo que significa que todavía dice palabrotas.) Ahora entiende por qué a la mayoría de la gente le gusta decir que uno no debe dejar que sus conocidos le enseñen a conducir, porque se maldecirán mutuamente como en este momento.

Eso era porque le estaba enseñando algo que le parecía más fácil que montar en bici, pero Charlie no era capaz de hacerlo. Así que Babe tenía que ser capaz de contenerse y repetir en su mente para mantener la calma.

'Todavía está aprendiendo. Mantén la calma, Babe'.

"Te he dicho que cruces los brazos, no que te des la vuelta. ¡Si te vuelves a girar, te pegaré!"

"Lo-lo siento..." Charlie se encogió como una tortuga al ponerse a cubierto. Desde que empezó a entrenar, había sido regañado por Babe muchas veces. De hecho, podía entender que esto fuera frustrante para Babe porque le gustaba hacer accidentalmente cosas que Babe le había prohibido hacer por costumbre. Era descuidado, pero ¿qué podía hacer? Cambiar un hábito no es algo que pueda hacerse de la noche a la mañana.

"Concéntrate, no bajes la guardia", dijo Babe con voz severa, antes de volver la vista atrás para mirar al frente. "Habrá una curva en unos cien metros. Y al entrar en la curva, no vuelvas a dar tirones al volante. Aún no lo dominas y el coche perderá el ritmo. Cuando te acostumbres, sabrás soltarlo de abajo arriba".

"Sí", respondió Charlie obedientemente, antes de intentar girar lentamente el volante siguiendo la técnica que Babe le había enseñado cuidadosamente. El resultado no pareció malo en absoluto, ya que Babe no le gritó como la última vez. Se quedó sentado en silencio, como si comprobara su trabajo.

"Mejor". Pit Babe asintió levemente después de que el coche saliera satisfactoriamente de la curva. Tal confirmación del otro hizo que Charlie sonriera ligeramente. Ya estaba pensando que si hoy no le elogiaban al menos una vez, entonces cuando volviera a su habitación, no podría ser capaz de dormir. "La próxima vez, te dejaré sentarte en el borde de la pista, entonces te enseñaré como se hace. Si puedes ver el ángulo de las ruedas cuando el coche gira, ¿te imaginaras lo que se siente?".

"Si."

"Hace un momento has girado mejor el volante. Pero sigue habiendo un problema cuando pisas el acelerador al salir de las curvas", dijo Babe mientras extendía la mano para sujetar el volante. Vio que Charlie cometía accidentalmente otro error, pero esta vez, afortunadamente, Babe estaba hablando de otra cosa y no le regañó como antes. "Cuando llegue el momento de pisar a fondo, intenta mantener el peso sobre los pies y acelera despacio. No des tirones, ni pises el pedal, ni lo sueltes o el coche irá más despacio".

Explicó Babe mientras miraba hacia delante. Y al mismo tiempo, dirigió su mano para que tocara ligeramente el muslo de Charlie como indicación para que bajara ligeramente la presión del acelerador mientras enseñaba.