IV

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— Shadow te golpea todo el tiempo en la cara y en otras partes del cuerpo, ¿Y te pones así solo por que te tomo de la mano? — Knuckles pensó sus propias palabras. — Tiene mucho sentido para mi. — dijo después.

— Será mejor que vayamos a descansar para mañana. — dijo Amy y todos asintieron.

— Aún no puedo creer lo que pasó hoy. — suspiro frustrado el cobalto.

— Tranquilo, Sonic, solo fue una coincidencia. Muy extraña coincidencia. — lo consoló Tails.

— Mañana hablaremos de nuevo sobre el regalo. — dijo Amy.

Todos se despidieron y se fueron a sus chozas para poder descansar.

Sonic se fue a su casa pensando en lo de hoy, ya estaba oscuro, lo único que iluminaba su camino era la luna que estaba bien alta, por primera vez el cobalto estaba caminando con tranquilidad.

Cuando llegó a su casa, se recostó en su cama y pensando aún en el azabache empezó a cerrar sus ojos hasta caer profundamente dormido en los brazos de Morfeo.

Los días pasaron y los chicos buscaban más ideas para el regalo perfecto.

Cada quien aportaba una idea, pero Sonic siempre decía que no era suficiente.

Sonic quería darle a Shadow algo único y original, algo que le hiciera recordar al azabache por que tenía ese regalo, que recordara el día en el que el le declaró su amor, no podían ser flores o un osos de peluche, eso era muy cliché hasta para el.

Tails opino que tal vez Sonic podía darle cosas que le gustaran comer a Shadow, pero Sonic le dijo que eso no le duraría y no lo recordaría.

Sonic quería algo único, algo que le durará al azabache no solo en sus recuerdos si no también en el presente, esto era con lo que iba a sellar su amor, no podía ser algo simple como "dulces de café" también por que estaba seguro que Shadow no mucho le gusta lo dulce.

Los dias se habían pasado volando, Sonic estaba bastante estresado por buscar el mejor regalo de todos, ya era veintinueve de junio y aún no tenían nada.

Amy había opinado por un picnic o una cena romántica, era lo que le gustaba a todo el mundo, pero Sonic le respondió con un. "Shadow no es todo el mundo" Sonic queria algo único para Shadow, Shadow era alguien difícil y hacer algo común era algo que posiblemente Shadow rechazara.

— Basta, Sonic. — dijo Tails al ver cómo revisaba las listas de nuevo.

— Se supone que esto debe ser romántico no frustrante. — le dijo Knuckles.

— Tienes que descansar. — le dijo Amy acercándose a el.

— Pero solo faltan cinco días para su cumpleaños, y aún no tengo nada. — se sentía muy mal emocionalmente.

— No haz pensado que tal vez.. ¿Shadow no lo valga? — Sonic levantó sus orejas sorprendido al escuchar eso.

— Voy a fingir que no haz dicho eso. — le respondió con seriedad.

— No, Sonic, tal vez Amy tiene razón. Shadow siempre te trato mal, por que eso a de cambiar solo por que sí. — Sonic suspiro.

— Ustedes no saben por qué me enamore de Shadow. Así que no tienen derecho de juzgar mis sentimientos, y mucho menos a quien se los dedico. — Tails suspiro.

Tails se preocupaba por su amigo, solo quería lo mejor para el, el fue el primero que se enteró de los sentimientos de su amigo hacia el azabache, pero jamás había preguntado por que habían nacido esos sentimientos.

El regalo perfecto para Shadow [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora