(Queridos lectores, debo advertir que este capítulo puede contener material sensible para algunos, como lo son el csa y el cptsd, están advertidos.)
En aquella casa grande de dos pisos hay un pequeño arreglándose para visitas, aquél tierno e inocente niño era Jack! Lo adivinaste!
En casa de Jessica había un ambiente de anticipación, todo bien limpio y ordenado, comida hecha, y el patio también tenía algunos artículos recién instalados, como sofás, una silla columpio y una mesita.
Por qué tanto orden te preguntarás ¿No?
Bueno, hoy vienen de visita los familiares, esas típicas reuniones de familia que se hacen después de muchos años, donde hay tías, primos y hasta sobrinos! Eso iba a suceder en la casa de Jessica este día.
Claramente nuestro protagonista no estaba precisamente feliz por ello, nunca se llevó bien con su familia, la única con la que se lleva bien es su tía Valentina, la cual le presta su casa en la cuidad para que pueda estar cerca de su uni.
Bien vestido y perfumado Jack ya está listo, por supuesto guardó sus cosas de bebé muy bien, los pañales en lo más profundo de debajo de su cama, sus chupetes en su cajón bien cerrado, y toda su linda y adorable ropa guardada en su clóset detrás de todo.
Ya siendo medio día Jack baja las escaleras, Jessica termina de arreglar unas cuantas cosas, y sin tardanza alguien toca la puerta.
Jessica: Ya llegaron!
La hermana mayor lucía más emocionada, todo lo contrario a su personalidad común seria y enigmática, casi podrías decir que ella estaba feliz de que la familia se reuniera.
Al abrir la puerta hay una señora adulta bien lujosa, con un vestido verde agua, muchas joyas, argollas, collares, aros. Además de apestar a colonia cara de rosas.
Jessica: Tía Rocío!
Exclamó y abrazó a la señora, la cual devolvió el abrazo con gusto.
Tía Rocío: Ay hola dulzura, tanto tiempo sin verte, ya eres toda una adulta trabajadora!
Dice aquella señora, para luego mirar a Jack, y con un poco de asombro acercarse a el para también abrazarlo.
Tía Rocío: Oh Jack! Cuanto haz crecido! La última vez que te ví eras aún solo un pequeño!
La tía Rocío apreta las mejillas de Jack, lo cual lo pone muy incómodo, pero se esfuerza por sonreír y no arruinar el día de reunión familiar.
Jack: Hola tía Rocío-
Antes de que si quiera pudiera terminar de decir esa frase un montón de gritos y risas se acercan por la puerta, eran dos niños pequeños, por allá de los 6 años más o menos parecían. Y estaban jugando y corriendo sin control por el jardín delantero.
???: Niños, con cuidado!
Dice una voz diferente, una señorita de unos veintitantos años bajándose de un auto caro con un bolso Louis Vuitton.
Tía Rocío: Ah sí! Ahí viene Camila.
La joven se acercó y los dos niños la siguieron, ella es la hija de otra tía, prima de Jessica y Jack, y madre de esos dos diablillos que pronto conocerán.
Camila: Hola, llegamos a la hora?
Jessica: Camila!
Jessi salta y abraza a Camila con fuerza, ambas tienen casi la misma edad, así que se llevan bastante bien.
Camila: Aw hola Jessi!
Ambas se abrazan con cariño, y luego todos pasan dentro de la casa.
Jessica: pasen pasen, tomen asiento, puedo servirles galletas o jugo si quieren!
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El Pequeño Jack
RandomEsta historia es de Jack, un adolescente de 17 años que sufre el no haber vivido su infancia y por eso recurre a las regresiones para tener esa infancia que jamás tuvo.