Capitulo 13: Arriesgado

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Wow, tengo Vale bajo ataque en esta historia entonces sucede en la serie canon unas semanas más tarde. Juro que no lo sabía.

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Ruby estaba tumbada en la cama, despierta pero aburridísima. No la habían dejado salir desde su incidente, y de eso hacía ya días. Se incorporó y miró a su alrededor, dándose cuenta por primera vez de que las paredes estaban densamente cubiertas de palabras eldritch, dibujos de monstruos de pesadilla e incluso una ilustración perfecta del escudo del cefalópodo de la portada del Necronomicón, todo hecho con lápiz de color negro. No recordaba haber hecho nada. Dio un respingo de sorpresa cuando la puerta se abrió de repente. Entró en la habitación una enfermera guapa, tal vez en sus años universitarios. Tenía el pelo largo y blanco como el lino, ojos violetas como la amatista y un traje de enfermera que era más bien un minivestido blanco que enseñaba mucha pierna. Era el tipo de chica que era guapa, lo sabía y alardeaba abiertamente de ello.

"Buenas tardes, cazadora", dijo la enfermera, "espero que las cosas no hayan sido demasiado aburridas".

"Hola Miri. ¿Qué tal?" dijo Ruby alegremente, contenta de volver a hablar con alguien.

"No te preocupes, no es la hora del baño", dijo la enfermera con una risita amistosa. "Tienes visita".

"¿Una visita?" Ruby sonrió al ver entrar en la habitación a Yang, que parecía sorprendido por la inquietante escritura de las paredes. Real o no, éste era el único lugar donde Ruby aún podía ver a sus amigos. Frunció el ceño cuando se dio cuenta de que no venía nadie más. "¿Dónde están..."

"¿Weiss y Blake? Están..." Yang hizo una pausa para buscar las palabras adecuadas: "No vienen".

"Oh..." Ruby asintió tristemente con la cabeza en señal de comprensión. Pensó en lo que le había hecho a Blake, atravesándola con el puño antes de bebérsela. Había matado a su querida amiga. "Siento mucho lo que le hice a Blake". Ruby gimoteó: "¡No sabía lo que hacía!".

Yang esbozó una débil sonrisa y se encogió de hombros. "Lo sé. Lo sé", dijo. Se volvió hacia la enfermera y le preguntó: "Umm, ¿podría darnos un momento, por favor?".

La enfermera Miriam se mordió el labio y puso cara de disculpa. "Lo haría, pero... su médico no quiere que hable con nadie sin la presencia de un miembro del personal", dijo.

"No pasa nada, hermanita. Ella sabe todo sobre nosotros". Ruby le dijo a su hermana: "Hablo mucho con ella".

"Bueno, es bueno ver que sigues haciendo amigos". murmuró Yang mientras se sentaba al borde de la cama de Ruby.

"No me mientas, Yang". dijo Ruby con los brazos cruzados sobre las rodillas. Recordó las caras de miedo y odio que la habían mirado cuando mató a Blake. "Mis otros amigos de Beacon me ven como una causa perdida, ¿verdad?".

"Todavía te echan de menos, Ruby. Nunca lo olvidarán". Dijo Yang, claramente tratando de evitar una respuesta directa.

"Yo tampoco..." susurró Ruby. Reflexionó sobre una época en la que había ignorado a Cthulhu, una época más sencilla que siempre recordaría. "¿Cómo han ido las cosas en Beacon?", preguntó, sin desear nada más que volver a oír hablar de aquel lugar.

"Bien. No ha cambiado mucho". dijo Yang, tratando de sonar alegre, "Hemos empezado otro año. El Sr. Puerto sigue siendo aburrido, Oobleck sigue hablando demasiado rápido, Jaune y Pyrrha están saliendo abiertamente por fin. Weiss, Blake y yo somos los mejores de la clase". Suspiró y frunció el ceño. "No ha sido lo mismo sin el líder de nuestro equipo. Tenemos una democracia entre nosotras, pero Weiss lleva la voz cantante".

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