Saturno - Minwon/Meanie

TRECE

— Ya volví, traje tu chocolate favorito, esta vez es chocolate sin vainilla.— Soojin se sienta a su lado y le extiende la palma de su mano donde hay una golosina. Mingyu le sonríe un poco y la toma.

— Gracias.

Ella asiente a sus palabras luciendo muy calmada, abre la envoltura de la galleta que ella trajo para sí misma, gira su rostro hacia el frente donde tiene una amplia vista del patio de la escuela, ahí los alumnos toman un refrigerio o hablan sentados sobre el césped.

Mingyu no deja de mirar su perfil sin que Soojin lo note, ella luce tan pacífica al igual que él, pero eso es algo meramente superficial, Mingyu siente un torbellino de emociones que no sabe identificar dentro suyo. Por dentro es un completo desastre.

Ultimamente Mingyu ha mantenido su cabeza sumida en las palabras de Soojin, en cómo su relación se transformó en solo una amistad, y llegó a la conclusión de que quizás... él no la quería como una pareja.

Casi no hacían cosas comunes que hacen las parejas. Al comienzo pensó que quizás era porque su relación aún era muy reciente, pero realmente no era eso, era el hecho de que ninguno de los dos sentía que realmente eran pareja.

Fue extraño para él descubrirlo, se pregunta si eso es lo que Soojin también habrá sentido, y por como se lo dijo deduce que llevaba dudando sobre su relación al menos desde hace un par de semanas atrás. Pero contrario a sentirse decaído por los acontecimientos, se siente más liberado al aceptar que su relación con SooJin no resultó como esperaba.

Lo que lo tiene hecho un lío en su corazón y mente es Wonwoo, todo el asunto de Wonwoo no deja espacio en su cabeza para nada más.

"Creo que deberías hablar con él, sería lo mejor" le dijo Soojin aquella ocasión, y claro que lo ha considerado, pero no se atreve a dar el primer paso.

Se ha dedicado a ver de lejos al chico de contextura delgada y ropas holgadas, cada día sin falta alguna. Siempre manteniendo su distancia y procurando no ser muy obvio. No sabe muy bien el porqué, simplemente no puede dejar de verlo. Tampoco sabe qué espera realmente de todo eso, ¿Qué le devuelva la mirada? Ni siquiera se percata de que es observado por él.

Lo mira caminar de lado de su amigo, un chico del que no conoce su nombre pero si su rostro. Recuerda que hace unas semanas fue a recoger a Wonwoo a su casa y ambos se fueron juntos. Ahora que se ha dedicado estos últimos días a observarlo, se ha percatado de que es la única persona con la que Wonwoo habla, y la única con la que lo ve en la escuela si no es Soojin.

Wonwoo es bastante solitario, llega a esa conclusión. No puede evitar pensar que antes de perder la memoria seguramente era él quien andaba al lado de Wonwoo todo el tiempo en la escuela, no lo duda. Justo a la misma hora que siempre Wonwoo y su amigo del cuál desconoce el nombre. Llegan al patio de la escuela para caminar por este hasta una mesa en la sombra de un árbol. Mingyu los sigue desde que aparecen hasta que toman asiento hablando entre ellos.

— No creas que no lo he notado.

La voz de Soojin llama su atención, gira encontrando los irises marrones de su exnovia que lo ven con un destello juguetón, con esa expresión en su rostro de "Lo sé todo".

— ¿A qué te refieres?

— Vamos Mingyu, no puedes negarme que has estado observando a Wonwoo desde hace días.— Mingyu ante sus palabras pasa saliva y desvía la mirada.— ¿Porqué no solo vas a hablarle?

— No sé si sea buena idea, ha pasado una semana desde lo que ocurrió, quizás Wonwoo se siente herido por que lo he estado evitando.

Soojin hace una mueca.— No te lo he dicho pero en casa lo noto más callado de lo usual.
Luce decaído.— Mingyu se siente culpable al escuchar eso.— Cuando mi tía pregunta sobre la escuela o nuestro día, Wonwoo no contesta. Yo ya he tratado de hablar con él por pedido de mi tía pero él no quiere hablar conmigo, es un asunto entre tú y él.

Mingyu asiente cuando ella termina de hablar, fija su mirada en Wonwoo metros frente suyo y puede presenciar el momento en que sus labios forman una pequeña sonrisa mientras su amigo pasa uno de sus brazos por sus menudos hombros, hablan un poco más hasta que el chico más alto se despide de Wonwoo y camina de vuelta al interior de la escuela. Mingyu ve a Wonwoo solo y tiene el impulso de acercarse pero finalmente suspira y baja la mirada, Soojin nota esto y le sonríe comprensivamente.

— Anda, habla con él.— Mingyu se sorprende cuando la chica le da un ligero codazo con la intención de darle ánimos.

— ¿Crees que deba ir?

— Claro que sí, ahora está solo.

Mingyu asiente lentamente a sus palabras y apretando los labios se coloca de pie, da un paso seguido de otro y empieza a travesar la distancia que lo separa de aquella persona que invade sus pensamientos cada día, pero a la mitad del camino sus pies se detienen y ya no quieren moverse.

Sus ojos siguen fijos en la espalda de Wonwoo y por más que quiera acercarse sigue inmóvil en el mismo lugar, se pregunta si lo que siente son nervios, miedo o culpa, pero sea el sentimiento que sea le está impidiendo acercarse a enfrentar su presente. Soojin observa todo desde su asiento, no entiende porqué Mingyu se quedó parado en medio del patio. Suena la campana indicando el final del descanso y con esto la oportunidad de que Mingyu se acerque a Wonwoo se desvanece.

Soojin hace una mueca y se levanta de su asiento para volver a clases. Ella no es la única que observó lo que pasó, Se-Jong pretendía volver a su asiento con Wonwoo cuando vio a Mingyu cruzar el patio en dirección a Wonwoo y decidió quedarse a ver qué pasaba, pero se le hizo muy extraña la forma en la que pareció atascarse en medio del camino.

Quizás Mingyu necesite un pequeño empujón.

Mira a Wonwoo aún sentado en aquella mesa, seguramente esperando a que él vuelva. Por otro lado ve de lejos a la amiga de Mingyu, a quien reconoce como la prima de Wonwoo.
Sonríe acercándose a ella aprovechando que
Wonwoo sigue en su asiento.

—

— Mingyu, ¿Porqué te quedaste estancado en medio camino?— Soojin lo mira confundida, caminando al lado del susodicho por el pasillo principal que los llevaría a su salón.

— Me acobardé, supongo.— Hace una mueca disconforme al recordar su propio actuar.

—Tranquilo, pero la próxima vez que tengas una oportunidad de hablar con él, por favor aprovéchala.— Mingyu cabizbajo asiente.— ¿Porqué no vas al baño y te refrescas? Yo te cubro con el profesor.— Le sonríe compresiva acariciando su brazo para darle confort. Mingyu mira la señal del baño a tan solo unos metros.

— Creo que es buena idea, necesito ordenar mi mente un momento.— Sonríe desganado.

Soojin le responde rápido.— Bien, entonces te veo en clase, solo no te demores mucho.— Da media vuelta y se aleja trotando del lugar.

Mingyu camina unos metros más hasta que llega a la puerta del baño para hombres, pero antes de tomar la perilla y abrir dicha puerta esta se abre dejando ver un chico alto, Mingyu lo reconoce rápidamente. Es el amigo de Wonwoo, del que aún no sabe el nombre. Se miran unos segundos hasta que este chico carraspea y se digna a hablar.

— Con permiso.— Mingyu se hace a un lado y el chico se aleja.

Arquea una ceja pero decide no tomarle importancia a su inesperado encuentro.
Finalmente se adentra a los baños y cierra la puerta detrás suyo, camina directo a los lavamanos pero contrario a lo que creyó, había un chico ahí de espaldas mientras parecía secar su rostro con una pequeña toalla.

— ¿Olvidaste algo, Seokmin?— El chico deja la toalla en el colgador al lado del lavamanos y se gira para encarar al que cree es su amigo.

Mingyu abre de más los ojos al ver a quien menos esperó. Wonwoo está frente suyo, a menos de un metro, y los nervios se disparan por su cuerpo. Wonwoo pasa saliva cuando se da cuenta que no es Seokmin el que entró al baño, si no Mingyu. Un nudo se forma en su garganta y baja la cabeza incapaz de devolverle la mirada.

Por diferentes razones sus corazones saltan dentro de sus pechos cuando chocan miradas, y una electricidad los atraviesa como un rayo.

— Hola Wonwoo.

— Hola...— Aprieta sus labios en una fina línea.

Mingyu esta vez no desaprovechará su oportunidad.