Día numero 98

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10:30 am.

¡Alice, prepara también desayuno para mi! -Le gritaba casi dormida desde mi dormitorio a mi 'odimada' hermana, mayor por un año y par de meses.

-No jodas. -Chillo.

Diablos, odiaba pedirles favores a las personas. Pero, así funciona el mundo, haces un favor y aveces lo recibes igual. Aveces... 

-Hoy, es el gran día. -exprese emocionada, pizcas de emoción, ternura, adrenalina y nervios inundaban mi ser. Mientras desordenaba su cabello con mis dedos, Alice me miraba incrédula.

-¿Gran día?, vaya loca -murmuro comiendo. -¿sueños con príncipes azules anoche?

 ¿Sueños con príncipes azules? uno en especial, aunque quizás no era un príncipe sino mas bien un plebeyo, ángeles adornando su sonrisa y miles de demonios en su mirada.

-Si no te acuerdas hoy vamos a la playa con Samantha  y Pool.

-Ah, si eso...

-Si eso -Repetí ya de mal humor, mientras me dirija a la cocina buscando oreo, y sacando leche de el refrigerador.

-Ah, oye si buscas tus oreo , me las comí- confeso corriendo a su dormitorio.

- ¡Que te den!  

-Si sigues así no iré a la playa contigo y Cameron -asomo la cabeza, por encima del marco de la puerta.

Esperen, ¡¿que?!

-¿Como sabes?... Que Cameron y yo...

-Vi un mensaje sobre eso en el whatsapp -confeso.

La observe por varios segundos, cabello negro azabache rizado, curvas definidas aunque no delgada. Sonrisa amplia, ojos negros penetrantes, y  look perfecto. 

Y yo pues... simplemente 'yo' cero definiciones, cero adjetivos calificativos. Bien.

-Si, bueno como sea... -disimule una sonrisa. -El dijo que iría con unos amigos, y pues tal vez lo vea y lo salude. No iré específicamente con el, no sera algo así como una...

-¿cita? Oh nena, eso si sera una cita. -me advirtió risueña.

Tres palabras...

Nervios.

Nervios.

Nervios.

Menos palabras y mas nervios.





Anónima.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora