Mi espía favorita

" Una cita romantica" Parte II

POV MORGAN

Sofia seguía llorando en mis brazos, era la primera vez que la me dejó verla tan vulnerable. Tenía pensado quedarme así hasta que se desahogara, pero se apartó unos minutos después con una pequeña sonrisa.

- Perdona- se limpio las lágrimas de su cara.

- No pasa nada, ¿mejor?- asintió.

- Voy a lavarme un poco la cara y seguimos, te prometo que a partir de ahora todo va a ser mas romsmtico y menos....esto- rio un poco.

Vi como intento quitarle importancia a esto, pero no iba a dejarla, para mi esto fue un gesto romántico, se abrió conmigo y me contó cosas que dudo que le dijera a otra persona.

- Sofia, no quiero un romanticismo de película ni nada de eso- tome sus manos delicadamente- Con qué estemos las dos aquí, así....juntas, me vale. Como ye he dicho antes, quiero conocerte, lo bueno y lo malo, es parte de ti-

- Lo sé, pero de verdad quiero que tengamos un rato bueno juntas- le sonreí.

- ¿Y esto no es bueno?- ella me miró extrañada.

- ¿Llorar? ¿Tu consolandome? No es lo que tenia en mente- entrelace nuestros dedos y me acerque un poco a ella.

- No idiota, estar juntas, solas, hablar sin precupacion, conocernos, la comida...- mire todo lo que preparó.

- Sobre todo la comida- bromeó.

Puse sus manos en mi espalda y luego tomé su rostro, aún húmedo por las lágrimas. Deje un beso en sus labios, mientras que ella me juntó más contra su cuerpo.

- Me siento tan bien cuando estoy contigo, que a veces me parece un sueño- susurró con los ojos cerrados.

- Mmm...ha vuelto tu lado romántico, me gusta- eso la hizo sonreír.

- Vale, vale, vamos a terminar el postre- me tomó de la cintura y me empujo hacia la encimera con cuidado.

Seguimos cocinando entre risas, empujones, bromas y besos, compartiendo ese momento romántico que ambas esperábamos. Una vez lo terminamos, lo metimos en el horno y esperamos a que la masa cogiera color y subiera.

- ¿Sabes una cosa?- me abrazo por detrás.

- Dime- sentí su barbilla sobre mi hombro.

- Como estoy en modo romántica y sincera, te admitire que, aunque me hayas hecho sufrir estas semanas sin sexo, no me arrepiento de ningún segundo que pase contigo- sonreí al escucharla.

- ¿Y eso te parece romántico?- pregunte con un tono de broma.

- Lo último si- ambas reimos.

Justo en ese momento el cronómetro del horno sonó, haciendo que ella se separará de mi para abrir la puerta y sacar el postre. Admito que tenía un pinta increíble.

Partió dos trozos, colocó cada uno en un plato y los puso sobre la mesa. Nos volvimos a sentar, ella espero a que lo probará.

- Adelante- me alentó.

Di el primer bocado, sintiendo como la masa crujía y el sabor de las frutas llegaba a mi paladar, de verdad, estaba increíble.

- Esto es una maravilla- dije tapándo me la boca.

- Gracias, era una receta de mi abuela- sonrio- Pasó de familia en familia- ella mordió su trozo- Por lo general me lo guardo para mi, pero como ves tienes un efecto en mi que nadie tiene- la mire con una sonrisa.

Ella siguió comiendo a gusto, mientras que yo no podía dejar de pensar en lo feliz que era cada vez que estoy a su lado, en todo lo que me have sentir, en que el supuesto amor que sentía por Ryan, en verdad no lo era. Puede que al principio de la relación con él si me gustará, pero en todo ese tiempo nunca logró hacerme sentir así de comprendida, segura, escuchada....